A inicios de esta semana la presidenta del Colegio Médico (Colmed), Izkia Siches, concurrió a una reunión en el palacio de La Moneda, donde participó el presidente Sebastián Piñera y el ministro de Salud, Jaime Mañalich. A pesar de que en esa instancia la dirigenta reconoció voluntad del gobierno, y se mantuvo un espíritu de trabajo conjunto, las conversaciones no llegaron a puerto.

Este viernes, luego de una semana en que se denunciaron faltas de insumos en distintos recintos de salud e improvisación de las autoridades en esta crisis –entre otras cosas–, desde el Colmed elevaron el tono.

“La estrategia que ha tomado el gobierno de diagnosticar para contener la expansión de Covid-19 es imposible de implementar a la fecha. Es urgente ampliar la capacidad de testeo y mejorar la organización de la red asistencial”, dijo Izkia Siches en una rueda de prensa, en la que abogó por el cierre de la Región Metropolitana.

La dirigenta denunció también “los problemas relevantes en la saturación de la capacidad diagnóstica y no se están aplicando los protocolos mandatados por la autoridad sanitaria, no por desacato, sino por problemas en su implementación”.

Por último, y en un antecedente que hasta el momento no estaba sobre la mesa, advirtió que la comunidad médica está preocupada y que los datos entregados a la fecha por el Ministerio de Salud (Minsal) son “incompletos, inconsistentes y tienen una tremenda falta de transparencia que no se había visto en la historia institucional de la salud pública chilena”.

Siches en ningún momento se refirió a Jaime Mañalich, quien ha estado a cargo de las vocerías del gobierno en torno al tema de los contagios de Covid-19. De hecho, la dirigenta llamó al presidente Piñera a tomar “las riendas de esta emergencia sanitaria”, en medio de un escenario de crisis que se agrava y que ahora tiene a distintos actores de la salud confrontando al Ejecutivo.

Falta de transparencia

El viernes 13 de marzo, cuando el número de contagios a nivel nacional recién llegaba a los 43, el Ministerio de Salud (Minsal) comenzó a informar a la ciudadanía sobre los nuevos casos a través de reportes en su sitio web. Estos incluían la región, el sexo, la edad y el centro asistencial en que había sido diagnosticado el paciente como positivo por Covid-19.

A partir del miércoles 18 eso cambió, eliminando así información valiosa para la sociedad civil, actores clave en el manejo de la pandemia alrededor del mundo. No hubo una justificación pública, y ahora el Minsal solo incluye el total de casos y los nuevos contagios por región.

“Cuando esta crisis comenzó en Corea del Sur, el gobierno abrió una página donde transparentaron todos los datos, minuto a minuto en tiempo real”, explica el doctor José Miguel Bernucci, secretario general del Colegio Médico. “¿Qué les permitió eso? Que no solamente la autoridad tuviera acceso a la información, sino que toda la población”, incluyendo centros de estudios, universidades y organizaciones, miembros de la sociedad civil con capacidad para proponer soluciones que el gobierno puede tomar o desechar. “Así pudieron tener una respuesta a la pandemia”, asegura.

“Actualmente, el Colegio Médico no recibe información del Ministerio de Salud. Solo lo que está disponible en la página del ministerio”, indica Bernucci, quien agrega que este hermetismo de la cartera de Salud entorno al manejo de la crisis sólo complica más el panorama para el Ejecutivo, y no sólo en el ámbito de la estrategia, al dejar fuera a la sociedad civil, sino también desde la credibilidad. “La realidad es que, con los datos que hay, no se explica el cambio de fase 3 a fase 4”, explica el doctor Bernucci. “Son demasiado incompletos como para poder justificar ese paso”.

Bernucci agrega también a las señales confusas que da el gobierno las declaraciones de la vocera del comité de expertos, la epidemióloga María Teresa Valenzuela, quien indicó este viernes en entrevista con La Tercera que “no se puede paralizar un país cuando todavía podemos trazar los casos”. “Si ese fuera el caso [de que todos los casos son trazables], no se habría justificado el cambio a fase 4”, asegura Bernucci, ya que en dicha fase el aislamiento social es mucho más importante por la dificultad de alcanzar la trazabilidad de los contagios.

“Es extremadamente preocupante que, en la situación en la que estamos, la colaboración con otras entidades -sacando el Colegio Médico incluso, porque el ministro puede tener diferencias políticas- no exista: ni universidades, ni colaboradores, ni nadie tiene acceso a los datos. Son personas que podrían analizar los datos y proponer medidas”, finaliza. 

La bronca en regiones

Ayer se viralizó un video que mostraba a enfermeras del Hospital Las Higueras de Talcahuano confeccionando mascarillas con máquinas de coser, ante la falta de insumos por el coronavirus. “Las chicas han traído todas sus cositas para empezar a generar mascarillas para el cuidado tanto de los funcionarios como de las personas, ya que si el personal de salud no está sano, ¿cómo vamos a atender a todos los pacientes que prontamente, en las próximas semanas, va a incrementar o se espere que incremente?”, dice la persona que graba el video.

Además, la funcionaria aprovechó de increpar al ministro de Salud por la situación: “Ojalá el señor Mañalich, y todas las personas del gobierno, puedan atender pronto estas demandas ya que no tenemos insumos para atender esta gran necesidad de la población”.

Al respecto, el doctor Juan Godoy, subdirector del Servicio de Salud Talcahuano, dijo a BioBioChile que las mascarillas son de reserva y no para uso inmediato, que desde enero se están preparando para para atender la emergencia de coronavirus y que se encuentran en coordinación con el Minsal y Cenabast para la renovación de insumos.

En paralelo, este viernes más de 700 médicos de hospitales, Cesfam e instituciones privadas de la Araucanía adhirieron a una carta que, a grandes rasgos, pedía el cierre inmediato de la región para ingresar a un período de cuarentena, y a la vez le solicitaban a la ciudadanía respetar esta medida para no colapsar la red asistencial.

“Es una situación nueva para todos, adaptarse a un nuevo escenario ha sido muy difícil”, indicó a INTERFERENCIA la doctora Javiera Brierly, una de las médicas firmantes de la misiva.

Brierly además describió las dificultades que atraviesan en el manejo de la crisis por el coronavirus en la zona, donde hay nueve casos confirmados: “Estamos haciendo los mejores esfuerzos para responder a las demandas de la población ante esta pandemia, pero nos pasa que hay casos que no se tiene acceso a un test confirmatorio, porque la indicación es sólo para sintomáticos con dificultad respiratoria, no para todos los pacientes. Por ello, sentimos que hay un subdiagnóstico respecto a los ciudadanos que tienen coronavirus, y nuestra carta también es un llamado a contar con los insumos suficientes, tests confirmatorios, elementos de protección para población y para los profesionales de salud. Creemos que hay una falta de recursos y de lineamientos un poco más claros desde las instituciones”.

Para otros profesionales de la zona, la situación se vislumbra compleja entendiendo que solo habrían llegado 100 kit para realizar los diagnósticos en toda la región y estos estarían centralizados en Temuco, por lo que desde otras comunas más alejadas tendrán que priorizar sólo los casos más graves para enviarlos hacia la capital regional a realizarse las pruebas de Covid-19.