A fines de 2012, un grupo de emprendedores chilenos inauguraron Goplaceit, una plataforma que funciona con éxito hasta el día de hoy y que sirve para publicar viviendas en arriendo o en venta, donde los usuarios marcan en un mapa sus zonas de interés en la ciudad y así les van llegando notificaciones de opciones –departamentos, oficinas o casas– que se disponen a ser comercializadas.

Uno de los principales negocios de Goplaceit consiste en cobrarle a las personas o empresas interesadas en arrendar o vender sus inmuebles. Estos son llamados como ‘oferentes’. "GOPLACEIT cobra a todo aquel oferente que utilice el sitio con fines comerciales, en donde dicho cobro dependerá de los planes comerciales vigentes para el período en curso, del país de suscripción y de la cantidad de propiedades publicadas por dicho oferente por medio del sitio", se lee en la sección de ‘Términos y condiciones’ de la herramienta.

No está actualizada la cantidad de personas que usan la plataforma, sin embargo, en el blog de ésta se encuentra una nota del 22 de septiembre de 2016, en la que se señala que para esa fecha ya contaban con más de un millón de usuarios. "Más de 18.000 profesionales inmobiliarios publican con nosotros en todo Latam, contamos con más de 400.000 propiedades publicadas y disponibles para buscar hoy en Latam y nuestra comunidad en redes sociales supera los 900.000 seguidores", añadieron esa vez.

Desde un inicio que Goplaceit funciona en siete países de Latinoamérica: Argentina, Colombia, Perú, Uruguay, México, Chile y también Venezuela. En este último, que según la oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) cuenta con más de 4,7 millones de migrantes y refugiados alrededor del mundo –gran cantidad de ellos han migrado por la crisis humanitaria–, todavía sigue operativa. De hecho, mediante una búsqueda rápida en la plataforma se pueden encontrar más de una decena de propiedades en venta en las cercanías del Palacio de Miraflores, en Caracas.

Aunque tiene presencia internacional, la herramienta posee su sede en Chile. Acá funciona a través de Goplaceit SpA, sociedad constituida el 24 de julio de 2012 –con un capital de $1.000.000– por sus fundadores Daniel Ibarra Alvarado, Felipe Vargas Vargas, Pablo Espinace Ronda y su asesor Jean Boudeguer Simonetti, este último director ejecutivo de Start-up Chile entre octubre de 2010 y marzo de 2012.

El ascenso del emprendimiento fue meteórico: en menos de un año aumentó considerablemente su capital, y en el camino fue sumando una estructura societaria que la llevó a ser lo que es ahora: una empresa en la que en su propiedad convive la sangre nueva y vieja del mundo de los negocios en Chile.

De los Cornershop al "Choclo" Délano

La última junta extraordinaria de accionistas pública de Goplaceit SpA se realizó el 5 de mayo de 2019. En ésta, además de aumentarse el capital de la compañía a la suma de 2.779 millones de pesos, se pudo ver con mayor detalle la participación de las distintas personas o empresas. De esa manera, compareció por 250.458 acciones de la serie A la sociedad Buena Onda Inc, domiciliada en el estado de Delaware, en Estados Unidos; registrada también en el estado de California, y compuesta, acorde a un documento ingresado en la entidad de negocios de esta última jurisdicción, por Juan Pablo Cuevas, Daniel Undurraga y Oskar Hjertonsson, fundadores de Cornershop, la aplicación del momento en Chile, próxima a ser adquirida –si es que lo aceptan los organismos anti-monopolios– por Uber en una suma cercana a los 450 millones de dólares, según ha trascendido en la prensa.

Contactado por INTERFERENCIA, Felipe Vargas, fundador de Goplaceit, confirmó que Buena Onda Inc pertenece a los dueños de Cornershop y que todavía continúan participando de la plataforma de búsqueda de propiedades. "Personalmente los conocimos y recibimos muy buenos consejos de emprendedor a emprendedor en aquel tiempo [2012, cuando se creó Goplaceit]", indicó.

En la propiedad de la sociedad que opera esta herramienta inmobiliaria también está como minoritaria Inversiones Delmen Limitada, perteneciente a Carlos Alberto ‘Choclo’ Délano y su familia. Délano es amigo del presidente Sebastián Piñera. Fundó Empresas Penta y fue condenado –junto a su socio Carlos Eugenio Lavín– en 2018 por delitos relacionados al financiamiento ilegal de la política. Lo que se conoció a través de la prensa como el bullado ‘Caso Penta’.

Petra SpA, controlada por Gabriela Luksic Fontbona a través de Benares Limited –esta última domiciliada en el paraíso fiscal de Jersey, jurisdicción perteneciente a la corona británica– también figura en la propiedad de Goplaceit SpA, como minoritario al igual que el ‘Choclo’. En un reciente artículo, INTERFERENCIA relató las distintas inversiones inmobiliarias que posee la hermana menor del clan Luksic, incluyendo esta participación en una plataforma que se enfoca en el mismo mercado inmobiliario pero a través de la web (ver "El imperio inmobiliario en Chile que Gabriela Luksic controla a través de su sociedad domiciliada en un paraíso fiscal").

Felipe Vargas confirmó a nuestro medio que tanto Inversiones Delmen Limitada como Petra SpA siguen en la propiedad de Goplaceit SpA.

Y existe otro nombre que no aparece mencionado en la junta extraordinaria de accionistas realizada el 5 de mayo de 2019. Se trata de Nicolás Noguera Correa, el hombre que administra los negocios de la familia Piñera Morel como CEO de Inversiones Odisea. Él y su esposa –Catalina Morán Ovalle– son minoritarios de Goplaceit a través de Asesoría e Inversiones El Principio Limitada, lo que fue confirmado por el mismo Noguera a nuestro medio.

Tanto las platas de Délano, Luksic y Noguera llegaron a capitalizar Goplaceit SpA a partir del Fondo de Inversión Privado Patagon Land GPI, ligado a José Antonio Rabat, y donde participaban estos nombres del mundo empresarial chileno. Éste fue disuelto en 2019, mediante una asamblea de aportantes que conoció INTERFERENCIA, realizada el 20 de marzo de ese año, en la que se señaló que la única inversión del fondo había sido en Goplaceit SpA, por una cantidad de acciones "las cuales se encontraban avaluadas en seis millones de dólares de los Estados Unidos de América".