En una decisión que sorprendió a muchos, Theresa May, a través del Consejo de Seguridad Nacional, dio su aprobación al ingreso del gigante chino Huawei Technologies Co en la construcción de la red 5G del Reino Unido, a pesar de la férrea oposición que Estados Unidos ha ejercido para que todos los países excluyan a Huawei de la instalación de la red 5G en sus respectivos territorios. Sin embargo, la premier ignoró las presiones de Donald Trump.

De este modo, el Consejo de Seguridad Nacional del Reino Unido acordó permitir un acceso limitado al gigante tecnológico chino “para ayudar a construir partes de la red, como antenas y otra infraestructura» no central”. La decisión tomada por May se produce en medio de la filtración de advertencias de la CIA dirigidas al gobierno británico que afirmaban que Huawei había sido financiada por ramas del ejército y la inteligencia de China. Información que hasta ahora, carece de pruebas.

May optó por seguir los consejos de sus asesores, incluido el Centro Nacional de Ciberseguridad, quienes sostienen que no existen pruebas suficientes que den validez a la versión de que Huawei sería utilizado por el gobierno chino para realizar espionaje. Asimismo, las principales firmas de telecomunicaciones británicas, BT Group Plc y Vodafone Group Plc, han explicado que dejar de lado a Huawei ralentizaría la instauración de la nueva red 5G.

Según se acordó en el citado encuentro, Huawei tenga acceso sólo a partes no fundamentales de la infraestructura 5G, como las antenas.

No obstante, al gigante chino no se le permitirá suministrar a compañías de telefonía del país elementos core de la futura red de telefonía móvil 5G. Según se acordó en el citado encuentro, Huawei tenga acceso sólo a partes no fundamentales de la infraestructura 5G, como las antenas

"Huawei recibe con agrado los informes de que el gobierno del Reino Unido está avanzando para permitir que Huawei ayude a construir la red 5G del Reino Unido. Esta luz verde significa que las empresas y los consumidores del Reino Unido tendrán acceso a las redes más rápidas y confiables gracias a la tecnología de vanguardia de Huawei. Mientras esperamos un anuncio oficial del gobierno, nos complace que el Reino Unido siga adoptando un enfoque basado en la evidencia en su trabajo y que continuemos trabajando en cooperación con el gobierno y la industria", comunicó la multinacional.

Estados Unidos, Nueva Zelanda y Australia han prohibido a Huawei desarrollar en sus respectivos territorios las redes 5G, aduciendo amenazas de seguridad. Estados Unidos también ha estado presionando a sus aliados europeos, incluida Alemania, para que sigan su ejemplo e impongan prohibiciones formales a los productos de Huawei cuando se trata de construir la próxima generación de redes móviles inalámbricas. Sin embargo, la canciller alemana, Angela Mekel, dijo que se oponía a excluir a Huawei o a cualquier otra compañía del desarrollo de la red móvil 5G del país solo porque proviene de un determinado país.

La importancia del 5G

Si bien esta tecnología no es imprescindible para los usuarios en este momento, su incorporación en los dispositivos permitiría la incorporación de avances, como los automóviles sin chofer. En estos momentos, la industria móvil mundial está compitiendo para desplegar redes avanzadas 5G que prometen conexiones más rápidas, y Huawei está presionando para tomar una posición de liderazgo mundial en este aspecto, a pesar de la presión de los Estados Unidos.

La proliferación de dispositivos que se conectan a internet como los electrodomésticos, ropa o relojes -la llamada Wearable technology- necesita de una red con mayor capacidad de conexión simultánea, como la 5G.

La inteligencia artificial que requiere esta tecnología solo es posible mediante una velocidad de transmisión de datos que solo se lograría mediante la red 5G, que tiene una capacidad de envío y procesamiento de datos hasta 100 veces mayor que las actuales redes 4G y 3G.

Por otro lado, la proliferación de dispositivos que se conectan a internet como los electrodomésticos, ropa o relojes -la llamada Wearable technology- necesita de una red con mayor capacidad de conexión simultánea, como la 5G, por lo que su llegada e implementación es imprescindible para este tipo de innovaciones.

Los “consejos” de Estados Unidos a Chile

Las presiones de Estados Unidos se han hecho sentir también en nuestro país, como la reciente visita del secretario de Estado norteamericano, Mike Pompeo, que tensionó las intenciones presidenciales de negociar con el gigante chino. Tanto, que hizo retroceder a Piñera en sus intenciones de visitar la planta del gigante tecnológico durante su visita de Estado a China. Durante sus días en Chile, Pompeo aseguró que Huawei representa “riesgos para los ciudadanos”.

Durante sus días en Chile, Mike Pompeo aseguró que Huawei representa “riesgos para los ciudadanos”.

Uno de los grandes proyectos de este gobierno es mejorar las telecomunicaciones mediante la instalación de un cable de fibra óptica que conecte América Latina con Asia, trayecto que mediría cerca de 26 mil kilómetros, magnitud que hace necesaria la participación de Brasil y Argentina, para hacerlo rentable.

La construcción e implementación de este cable será licitada y las principales empresas interesadas son Huawei, NEC (Japón) y Fiber Home (China), empresas que solo fabrican el cable y deben subcontratar barcos para su instalación. También están interesadas las Padtec (Brasil), NSW (Holanda), Orange (Francia), que ofrecen el servicio completo.

Al respecto, la ministra de Transportes y Telecomunicaciones, Gloria Hutt, comentó que “la licitación de 5G es una licitación abierta e internacional, y no tenemos ningún mecanismo, ni tenemos la intención tampoco, de decretar países prohibidos o empresas prohibidas”.