Sebastián Bianchi Simoncelli tiene 18 años, vive en Puente Alto y es hijo de un coronel en retiro de Carabineros. En la tarde del 12 de noviembre salió a marchar junto a su prima Constanza y cientos de personas más por Vicuña Mackenna.
Desde la 38 Comisaría de Puente Alto, ubicada a pocos metros del Hospital Sótero del Río, los funcionarios de Carabineros comenzaron a reprimir y dispersar a los manifestantes con disparos de perdigones. Uno de ellos impactó en el brazo izquierdo de Sebastián –quien se encontraba a más de 30 metros de Carabineros– provocando una fractura expuesta. Además, su cubito se fracturó en cuatro partes.
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Entre los manifestantes lo trasladaron hasta el Hospital Sótero del Río, donde le realizaron una radiografía y le enyesaron el brazo. Luego fue trasladado hasta el Hospital de Carabineros (Hoscar), donde estuvo hospitalizado por seis días y le pusieron una placa para reparar la fractura, sin lograr sacar el perdigón que se alojó muy cercano a los nervios, arriesgando un daño permanente en su mano izquierda.
En el Hoscar, el traumatólogo que atendió a Sebastián le indicó que el proyectil que había recibido no era un perdigón de goma, puesto que este no le habría provocado tal daño y tampoco se vería claramente en las radiografías.
Revisa el relato de Sebastián y su familia acá:
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