En un intento de última hora por impedir que en el Congreso prospere la iniciativa de que más de 9 millones de ahorrantes puedan retirar el 10% de sus fondos en las AFP para lidiar con la actual pandemia, ayer el presidente Sebastián Piñera anunció un nuevo paquete de medidas que, supuestamente, va a aliviar a la clase media.

Pero, más que a la población, los anuncios del mandatario estaban dirigidos a los 13 parlamentarios del oficialismo que la semana pasada votaron a favor de esta iniciativa, así como a los 29 legisladores de Chile Vamos que se abstuvieron, facilitando así la aprobación de la iniciativa.

A nivel ciudadano, las propuestas de Piñera generaron más rechazo que adhesión. De hecho, a las 9 de la noche del martes 14 de julio y por unos 30 minutos, en varias ciudades del país hubo intensos cacerolazos y bocinazos como no se escuchaban desde el estallido social el año pasado. Se trató de una expresión ciudadana, convocada por redes sociales, en repudio a las nuevas medidas anunciadas por La Moneda.

Las medidas anunciadas por el Presidente -que incluyen una transferencia directa de 500.000 pesos, un préstamo sin intereses de hasta 1.950.000, y un subsidio al arriendo de hasta 250.000 pesos para alquileres que no superen los 600.000 pesos, entre otras medidas- no lograron convencer a varios congresistas de su propio sector.

“Es una medida tardía e insuficiente”, afirmó a los pocos minutos del anuncio presidencial Leonidas Romero, diputado de RN. “Mantengo mi posición respecto del retiro del 10%: estoy por apoyar a la gente que lo está pasando mal, no es ser populista y no es que me haya ido a la izquierda o la derecha”. 

Andrés Celis, diputado de RN, también reafirmó su voto a favor del retiro de un 10% de los fondos de pensiones. “Valoro el anuncio del gobierno, pero quiero la libertad de que la gente pueda optar entre ese 10% por esta única oportunidad en medio de una pandemia y que ellos vean si también aceptan el crédito y los 500 mil pesos”, aseguró el representante por Valparaíso. “Hay que saber lo que está sufriendo hoy la clase media y lo más vulnerables”.

Aracely Leuquén y Eduardo Durán, ambos legisladores de RN, también expresaron ayer que mantenían su voto a favor del retiro del 10% de las AFP.

La votación

Hoy la Cámara de Diputadas y Diputados votará si se continúa con el proyecto del retiro del 10% de las AFP, o si -por lo contrario- el último ofertón de la presidencia logra persuadir a los parlamentarios oficialistas para echar pie atrás.

En una entrevista ayer con CNN Chile, Andrés Celis aseguró que “mañana, lamentablemente, el proyecto se va a rechazar. No van a contar con los 93 votos”. En esa conversación con el medio afirmó que algunos diputados de su partido, como Diego Schalper, han actuado como intermediarios del gobierno, ofreciendo beneficios a diputados e incluso puestos en la administración con tal de persuadirlos para votar en contra del retiro del 10%.

“La votación de mañana [hoy] será muy, pero muy estrecha”, afirma un miembro de RN. “En términos sociales, el resultado podrá tener un impacto mil veces más grande que el de los 30 pesos del metro”.

Sin embargo, hay señales de que el paquete anunciado ayer por Piñera está seduciendo a su propio sector. Tras conocerse los anuncios, el presidente de RN, Mario Desbordes, pareció dar luz verde a La Moneda. “Siempre he dicho que retirar fondos de pensiones es la última opción”, aseguró en su cuenta de Twitter ayer en la tarde. “[Ahora] hay algo mejor […] pese a todos los ataques logramos buenas medidas. Ahora a legislar con urgencia”.

Al igual que la semana pasada, se necesitarán 93 votos para aprobar la iniciativa. Es decir, necesariamente algunos diputados oficialistas tendrán que votar a favor. El parlamentario de la UDI, Christian Moreira, que en la votación pasada sufrió un desmayo, anunció ayer que se internará en un hospital por problemas de salud.

Tras la humillante e histórica derrota de la semana pasada, La Moneda ha tratado de manera desesperada retomar el control de la agenda política. Y en la votación de hoy se ha jugado varias de sus mejores cartas, en un intento de que la iniciativa del 10% no prospere y no pase a otras instancias legislativas. En otras palabras, está tratando de cortar de raíz esta iniciativa.

Con todo, de no prosperar, aún queda la instancia del Senado -donde los ánimos parecen favorecer el retiro del 10%-,el veto presidencial y, en última instancia, el Tribunal Constitucional si un cuarto de la cámara baja o alta da su firma para ello.