Es el tema de pasillos y oficinas en el Instituto de Salud Pública (ISP): el conflicto de intereses de la nueva directora de la institución, María Soledad Velásquez Urrutia, quien fue lobbysta de Laboratorios La Roche y Socofar, de Cruz Verde hasta corto tiempo antes de asumir el cargo.
La nueva autoridad fue designada la segunda semana de agosto, tras un concurso por Alta Dirección Pública. Sin embargo, para los funcionarios, no es la persona idónea para asumir este cargo, pues su labor principal es fiscalizar a las grandes farmacias y laboratorios, entre la que se cuentan sus ex empleadores.
Los funcionarios, representados por la Fenats del ISP, anuncian manifestaciones en el servicio esta semana, en repudio del nombramiento de Velásquez, debido a la gravedad que ellos ven en este conflicto de intereses.
Los funcionarios ya se habían manifestado, en diversos actos públicos de la directora, en contra de su nombramiento. Posteriormente, el 13 de septiembre hicieron una presentación en Contraloría para que ésta se pronuncia ante este nombramiento. Contraloría aún no toma razón del decreto que designa a Velásquez como nueva directora del ISP, por ello la asociación de trabajadores espera un pronto pronunciamiento del ente fiscalizador.
Según la información pública de ley del lobby, María Soledad Velásquez era una conocida lobbysta por laboratorios La Roche y por Socofar, empresa de farmacias Cruz Verde. En el sistema aparece en 32 reuniones representando a estas empresas, y en una representando al Colegio de Químicos Farmaceúticos, en donde fue dirigenta. Entre los organismos donde Velásquez actuaba como lobbysta, aparece el ISP, además de la Subsecretaría de Salud Pública, Fonasa y la Cámara de Diputados. Así lo expuso un reportaje en Mega.
En dicho reportaje, la directora respondió a las protestas de los funcionarios afirmando que "las causales de inhabilidad están en la ley y a mí no me afecta ninguna".
En términos netamente técnicos, efectivamente existe un vacío legal con respecto a los funcionarios que antes de asumir su cargo en servicios públicos trabajaban en el sector privado para empresas sujetas a fiscalización por el servicio en el que asumen. Al revés, la ley solo cubre los casos en que, desde un servicio público, un ex funcionario debe esperar seis meses antes de trabajar en las empresas que antes fiscalizó.
"Este es realmente un conflicto de intereses puro. Pero la ley no lo ha tipificado, del mundo privado al público no sale en la ley, Pero si uno va al concepto de probidad, al espíritu de la ley, hay un gran conflicto de intereses. Y eventualmente, si ella siguiera en el cargo, tendría que privarse de participar en lo que le genera conflicto de intereses, que más o menos puede ser un 70% de las labores de ella, en un área, y eso es mucho”, comentó a INTERFERENCIA el dirigente de Fenats, Luis Caroca.
Consultado por este caso, el Ministro de Salud, Jaime Mañalich, afirmó a Radio Cooperativa, que "todos los antecedentes no me han parecido que constituyan ninguna causa de hacer su nombramiento u otros".
Ante este tema, la Fenats anuncia que conversará con los parlamentarios de la Comisión de Salud esta semana, para exponerles estos hechos, mientras pretenden generar manifestaciones para visibilizar el conflicto.
Según otras fuentes internas del ISP, la nueva directora es una orgullosa pinochetista. Estas personas afirman que incluso Velásquez puso una fotografía en su oficina donde aparece con el dictador Augusto Pinochet. Según lo investigado por INTERFERENCIA, su vínculo con el mundo militar es como académica del Diplomado en Gestión de Instalaciones de Salud de las Fuerzas Armadas, en la Academia Politécnica Militar.
Además, según lo indagado por INTERFERENCIA, María Soledad Velásquez, además, es socia de la empresa Exportadora y Comercial Victus Limitada, con su ex esposo, Sergio Subiabre Muñoz, según los datos del Diario Oficial. Sin embargo, la directora del ISP no declara esta empresa en su declaración de intereses y patrimonio.
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