En 2012 España todavía no se recuperaba de la crisis económica y financiera que azotó a Occidente. El desempleo superaba el 24%. Como muchas otras profesiones, el periodismo no se escapó de la tormenta que se desató tras la llamada crisis subprime de Estados Unidos. Entre 2008 y 2012, más de 6.200 periodistas perdieron su empleo.

Pese a la crisis, en septiembre de ese año apareció un diario nuevo en España: eldiario.es. Esta publicación digital prometía ser independiente, alejada de los compromisos con las grandes marcas y los grupos económicos. Para cumplir ese objetivo planteó una fórmula de sostenibilidad basada en los suscriptores. Era una apuesta arriesgada, ya que en el mundo online no existía una cultura de pago. Pero seis años después, eldiario.es se ha convertido en un éxito editorial y financiero en ese país.

Números azules

“Vigilamos al poder para proteger la libertad y el progreso sostenible de la sociedad (...) Los socios de eldiario.es pagan para defender la independencia de este medio (...) Sin ti, no hay periodismo independiente”, reza hoy en día su sitio web.

“Gracias a los suscriptores, podemos trabajar con total libertad, sin tener que pedir permiso. Sin miedo a que una noticia nos quite un contrato de publicidad institucional. Con autonomía para publicar noticias incómodas sobre gobiernos de derechas o de izquierdas”, afirma el director Ignacio Escolar.

En una época en que las fake news y el auge de la ultra derecha parecen poner en peligro la democracia y los contenidos ecuánimes y profesionalmente producidos, la apuesta de buscar el apoyo de los lectores para sostener un medio de comunicación le ha dado frutos a este periódico digital. El medio fue fundado, entre otros, por el periodista Ignacio Escolar, su actual director, quien este año obtuvo el Premio Gabriel García Márquez a la excelencia periodística.

Reportajes como el de las tarjetas de créditos de los consejeros de Caja Madrid, o los supuestos estudios de posgrado del que se jactaban dirigentes del Partido Popular y del Partido Socialista Obrero Español le han permitido a este medio mostrarse como un diario políticamente independiente. Junto a ello, han ido creciendo las suscripciones. Si en septiembre de 2012 contaba con poco más de 1.000 suscriptores, en junio de 2018 ya eran casi 32.000 personas dispuestas a pagar una mensualidad de, al menos, 5 euros, es decir, poco menos de 4.000 pesos chilenos.

Actualmente, eldiario.es es el cuarto medio digital más leído de España y uno de los más creíbles, según un informe del Reuters Institute de la Universidad de Oxford. Además, contrario a lo que los dueños de medios tradicionales suelen decir, también ha sido una operación rentable.

“Calculamos que vamos a terminar 2018 con ingresos totales de entre 5,7 y 6 millones de euros. Cerraremos otro año más mejorando nuestras cifras, sin deuda alguna y en superávit”, escribió Escolar el 26 de septiembre de este año, cuando eldiario.es publicó su rendición de cuentas semestral.

Tendencia: la transparencia

En esa rendición de cuentas eldiario.es no solo hizo públicos los ingresos que obtuvieron, sino que también especificó que la mayoría de las utilidades se estaba reinvirtiendo en periodismo. No por nada los costos del medio aumentaron en 24% en el último año, así como además se incrementó la cantidad de periodistas, pasando de 73 a 83 personas.

“Gracias a los socios (suscriptores), los periodistas de eldiario.es podemos trabajar con total libertad, sin tener que pedir permiso. Sin miedo a que una noticia nos quite un contrato de publicidad institucional. Con autonomía para publicar noticias incómodas sobre gobiernos de derechas o de izquierdas”, escribió Escolar.

En la actualidad, el medio de comunicación cuenta con 10 millones de usuarios únicos al mes en la Web, siendo el cuarto medio más popular después de medios tradicionales como El País y El Mundo.

“Nuestra única deuda es con los lectores y especialmente con nuestros socios, que ya suponen el 40% del total de nuestros ingresos y blindan nuestra independencia. Ningún anunciante, ni siquiera los más grandes, llegan a acercarse a una fracción de lo que nos aportan los lectores”, afirmó Escolar.