Los 21 integrantes del máximo tribunal del país tenían previsto reunirse hoy en la mañana para confeccionar una nueva quina de la cual saldrá el próximo miembro que ingresará a la esfera más alta del poder judicial.
Todo indica que en los últimos días se han reunido suficientes votos como para que Jessica González, ministra de la Corte de Apelaciones de Santiago, lidere la lista de cinco nombres que la Suprema propondrá al gobierno. Según pudo recoger INTERFERENCIA, la fiscal judicial del tribunal, Lya Cabello, ha desplegado un intenso lobby a favor de González, quien se hizo conocida a nivel nacional al investigar el caso Karadima en 2011, acreditar las denuncias y después sobreseerlo por prescripción.
Los esfuerzos de Cabello habrían asegurado el voto de Ángela Vivanco, ya que ambas son muy cercanas, y cuentan con el incentivo de su pareja, el ministro y ex presidente de la Suprema, Haroldo Brito. Este, junto a Leopoldo Llanos y Jorge Dahm, suelen formar una suerte de troika al interior de la institución, por lo que se cree que los tres también votarían por la jueza González para encabezar la quina.
En la primera sala de la corte, González contaría con los votos de las ministras Rosa Egnem y Rosa Maggi, además del apoyo de Juan Eduardo Fuentes. Este último es vecino de Jessica González en un mismo condominio en La Reina, al igual que la recién asumida Adelita Ravanales, quien también daría su voto a su candidatura. El hecho de que los tres altos magistrados vivan en el mismo condominio ha llevado a algunos dentro de la corte a bromear con “la mafia de La Reina”.
De esta manera, González tendría asegurado al menos ocho votos, lo que podría ser suficiente para salir en primer lugar. De llegar a la Corte Suprema, Jessica González sería la sexta integrante del tribunal en provenir de la Universidad de Concepción. Los otros son el actual presidente Guillermo Silva, Rosa Egnem, Leopoldo Llanos, María Eugenia Sandoval y Juan Eduardo Fuentes. Sólo la Universidad de Chile cuenta con más miembros en la máxima corte.
De todos modos, una vez acordada la quina será el gobierno, a través del ministro de Justicia Hernán Larraín, quien escoja un nombre para proponerlo a la ratificación al Senado. Los dos últimos intentos por colocar a candidatos del oficialismo naufragaron al comienzo. Fue el caso de Dobra Lusic y Raúl Mera, que fueron rechazados por la cámara alta.
Pero esta vez el cupo corresponde a la oposición y si bien la ministra González tiene un perfil progresista que calza con la visión de ese bloque, hasta ahora el candidato con mayores simpatías en ese sector es el ministro en visita de la Corte de Apelaciones de Santiago, Mario Carroza, conocido por llevar decenas de causas por violaciones a los derechos humanos durante la dictadura.
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