
El líder de Revolución Democrática reúne casi todas las características para asumir el liderazgo político del nuevo gobierno, dada la confianza con el presidente electo, su experiencia encabezando el Frente Amplio y sus vínculos con otras fuerzas políticas. Sin embargo, la naturaleza del cargo podría sepultar sus aspiraciones personales, como suceder a Boric en una aventura presidencial propia.