Según consignó el periódico argentino, La Política Online (LPO) -un medio digital que ha ido adquiriendo notoriedad -dada la calidad de su información política y que abrió sede en México- el vicepresidente de Estados Unidos, Michael Pence, recriminó a Juan Guaidó que varios supuestos relacionados a la intervención en Cúcuta no se cumplieron.
El más serio de ellos, según la publicación, fue que no se produjo la fractura de las fuerzas armadas venezolanas, un punto que Guaidó, el líder de la oposición, habría asegurado a Estados Unidos que sucedería, dada la presión internacional. En ese sentido, los cerca de 300 desertores que ha logrado la intervención, fueron evaluados como un número muy por debajo de lo esperado.
Otros puntos críticos son que la base social chavista no estaba tan desafecta al gobierno de Nicolás Maduro, como Guaidó habría asegurado a Estados Unidos, y que los millonarios venezolanos no acudieron con los recursos financieros suficientes a la aventura de Cúcuta.
Según LPO, otros puntos de discusión pasaron por las dudas de Washington respecto de lo adecuado de la estrategia de retorno de Guaidó a Venezuela, por razones de seguridad, y respecto de los riesgos de abrir un frente regional de conflicto, si es que se logra que la guarnición militar de algún estado reconozca al líder opositor, dadas las malas experiencias de Libia y Siria.
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