
En marzo del 2020, un dirigente sindical del CNA se manifestó con un sticker pegado en un casquillo vacío de una lacrimógena. En la ocasión, las autoridades del CNA llamaron al GOPE, lo acusaron que querer generar un atentado y terminaron despidiendo al dirigente, sin embargo, hace dos semana la justicia dictaminó su reincorporación.