Gustavo Álvarez

Lo primero que debe tenerse en cuenta es que estas cláusulas, en nuestro sistema, son difícilmente defendibles en tribunales del trabajo, en la medida que se les considera abusivas. Pero es difícil creer que en los casos mencionados los profesionales firmaran desconociendo el alcance de aquello a lo que se comprometieron. Entonces, ¿por qué se establecen estas cláusulas si se sabe que no gozan de respaldo jurídico y su destino natural es abrir paso a negociaciones en que aflora lo peor del ser humano?

La primera rueda del torneo chileno dejó más preguntas que certezas. El juego mejora por momentos, pero el sistema no lo acompaña. Hay equipos que ilusionan, pero un modelo que no los sostiene. El fútbol nacional es como un buen volante creativo rodeado de compañeros que no entienden la jugada.




