Haroldo Brito

El TC deberá resolver si la reserva de los antecedentes que constan en la Comisión de Ética del máximo tribunal que investigó a Muñoz antes de ser destituido, se apega a los parámetros de la Carta Fundamental. Entre los supremos, la idea no es de su agrado.

Reconocido como un juez metódico, estudioso, austero y sin una tendencia asociada a un sector político en el que haya hecho redes. Es un técnico, que llegó sin proponérselo al máximo tribunal y ahora, según la tradición debería presidirlo. Pero sus ocho meses de licencia por tratamiento médico y una violenta discusión con su esposa, que terminó con medidas cautelares en su contra, abren la posibilidad de pasar por alto la costumbre de nombrar al ministro o ministra más antigua en la testera.

Pese a que la defensa del joven de 17 años describió la alteración de imágenes de un video que fue utilizado como prueba en el juicio, el tribunal desestimó el argumento y confirmó la pena en contra del menor acusado de incendiar esa estación de metro durante el viernes 18 de octubre de 2019.

El próximo miembro corresponde al cupo de la oposición, según la ya histórica práctica del antiguo duopolio político.

El enfrentamiento entre los ministros Haroldo Brito, actual presidente de la corte, y Sergio Muñoz, ex presidente de la misma, ha sido un secreto a voces dentro del máximo tribunal, acentuado por la reciente polémica en torno al cara a cara con el Tribunal Constitucional. Sin embargo, a veces se cuidan las espaldas, como sucedió esta semana cuando ambos se alinearon para que la causa disciplinaria en contra de Dobra Lusic, ministra de la Corte de Apelaciones, fuese a puertas cerradas.

El nuevo cupo en el máximo tribunal corresponde -según el tradicional acuerdo binominal- a la oposición. Llanos, un juez cercano al actual presidente de la Suprema, Haroldo Brito, tendría los suficientes votos de la ex Nueva Mayoría, por lo que La Moneda propondría su nombre.

Luego de 25 años, la justicia estadounidense vuelve a la carga sobre este controvertido empresario chileno, quien jugó un relevante rol en la historia de la defensa en los 80 y quien se hizo mundialmente conocido por fabricar municiones que posteriomente fueron vendidas a Irak y otros países en guerra entre 1983 y 1990.