Hidrógeno verde en Chile

La iniciativa recientemente inaugurada por la transnacional y desarrollada en conjunto con Engie, consideró una inversión cercana a los US$ 15 millones. Organizaciones ambientales apuntan a que en la presentación del proyecto al SEA no se señala en ninguna parte que la energía utilizada para la electrólisis provenga de alguna fuente de energía renovable, sino que sería proporcionada por el Centro de Distribución – LTS de Walmart, cuyo abastecimiento eléctrico provendría de Enel.

En diciembre de 2021, Corfo escogió seis proyectos de hidrógeno verde para distribuir $50 millones de dólares. A un año de la adjudicación, solo uno ha sido aprobado en el SEA. Los demás, entre ellos el polémico proyecto de Enel Faro del Sur, desistido en el SEA, no reportan avances.

La crisis energética que vive el viejo continente sólo se ha agudizado producto de la guerra entre Rusia y Ucrania, por lo que el principal país europeo ha optado por acelerar acuerdos y proyectos en los que ha estado en los últimos años. De todos modos, advierten potenciales cuellos de botella en la infraestructura para la exportación.

ENEL e HIF retiraron su proyecto de parque eólico acusando "exigencias excepcionales" para su implementación. Sin embargo, los más de 20 oficios de diversos organismos muestran deficiencias diversas que serían objetables para cualquier industria.

Las gigantes energéticas AES, Enel, Engie, entre otras empresas, son consideradas por el Estado para desarrollar proyectos de hidrógeno verde en Chile. Algunas ya están siendo subvencionadas por el fisco, mientras tanto se les unen viejos conocidos: Luksic, Matte, Von Appen, Angelini y Pérez Cruz

Europa necesita reemplazar al petróleo y Chile está dispuesto a ser una pieza clave en el proceso desarrollando una industria de hidrógeno que requerirá 80 millones de toneladas de agua anualmente y 450 mil hectáreas de molinos eólicos y paneles solares en Magallanes y Antofagasta. Energías renovables que, en todo caso, no aportarán a la matriz energética nacional.

Se trata de una licitación para el desarrollo del proyecto Hidrógeno Verde Bahía Quintero. El dinero proviene íntegramente de SQM a través de una cláusula del contrato de arrendamiento para la explotación del Salar de Atacama modificada en 2020, condición con la que la empresa de litio pudo visar a las licitantes.