extrema derecha

Un reportaje del medio brasileño Agência Pública da cuenta de cómo asociaciones rurales, medios y canales digitales funcionan como escenario de científicos que promueven la desinformación ambiental.

Con un 35,5% de las preferencias al cierre de esta edición, el Partido Republicano se convierte -por lejos- en la primera fuerza electoral del país. Estaría logrando 22 de los 50 consejeros constitucionales, asumiendo de facto la conducción del proceso constituyente.

Desde que asumió el nuevo gobierno de Benjamin Netanyahu, apoyado por varios partidos de extrema derecha, se han incrementado las señales de amenaza a la democracia de Israel. La última; el proyecto que sometería dictámenes de la Corte Suprema a las mayorías del Poder Legislativo.

El ex líder de la Garra Blanca se ha vuelto el personaje político con mayor impacto después del triunfo del Rechazo, guste o no. En esta entrevista, arremete en contra de la derecha tradicional y en especial contra Piñera, dice comprender las demandas del 18 de octubre, niega ser de ultraderecha y afirma que su movimiento social y otros son los verdaderos triunfadores del 4 de septiembre.

El intérprete se sumó a la iniciativa mundial de muchos artistas e hizo su propio concierto streaming. No le fue bien. Si Pedro Aznar reunió de manera virtual 67 mil espectadores, el pasado lunes Plaza resultó con más de 10 mil “No me gusta”. Además, tuvo una fallida transmisión en conjunto con José Antonio Kast. El artista, quien suele atacar por Twitter a dirigentes del PC, tras caer en una depresión y en la adicción a la cocaína, se unió a la Iglesia de la Cienciología, publicó un libro y comparte su pensamiento en videos de la fundación de extrema derecha Nueva Mente.

El medio británico The Guardian develó cómo una red de páginas de Facebook, ligadas a sitios web, publican y difunden noticias falsas, con fuertes tintes racistas y antimulsumanes. Las web lucran con la venta de publicidad en sus plataformas. Los administradores de estas cuentas funcionan desde Israel, pero estas páginas han influido en discursos de odio en diversos países, como Estados Unidos, Canadá y Australia.