Tras semanas de noticias desalentadoras sobre el futuro climático, se dio a conocer una buena noticia para el planeta tierra. Según informó el influyente semanario alemán, Der Spiegel, este martes, la capa de ozono se ha recuperado y el gran agujero que tiene se ha reducido al tamaño que tenía en 1989, hace treinta años.

La capa de ozono es una capa de aire incoloro que protege a los seres vivos de los rayos ultravioleta, emitidos por el sol, que causan cáncer de piel y cataratas a las personas. Los productos como los aerosoles, que contienen moléculas de cloro y bromo, que vienen del clorofluorocarbono CFC), generan daño en la capa de ozono. Esto provocó que se formara un gran agujero, ubicado sobre la Antártica.

El servicio de monitoreo de la atmósfera Copérnico de la Unión Europea informó que el agujero de la capa de ozono sobre la Antártida este año puede ser uno de los más pequeños desde los años ochentas. Investigadores del Centro Europeo de Pronósticos Meteorológicos a Mediano Alcance (EZMW) en el Reino Unido, han llegado a la conclusión de que el agujero de ozono es actualmente solo la mitad del tamaño que normalmente habían pronosticado para este año.

La noticia vino a coronar el aniversario 32° del Protocolo de Montreal, firmado el 16 de septiembre de 1987 por 24 países. El fin del acuerdo era fomentar la eliminación de los gases que destruyen la capa de ozono.

La Organización Meteorológica Mundial (OMM) estima que para el año 2060 la capa de ozono se recuperará a niveles anteriores a 1970. Sin embargo, los investigadores advierten que no hay que quedarse en la complacencia, y continuar los intentos por recuperar esta capa de la atmósfera. Y agregan que el cambio climático podría retrasar la regeneración de la capa de ozono.