Estamos donde tú estás. Síguenos en:

Facebook Youtube Twitter Spotify Instagram

Acceso suscriptores

Lunes, 11 de Agosto de 2025
[Interferencia América Latina]

El narco estado de Bukele 

Carel Fleming (desde Washington D.C.)

“Lo irónico es que en la comitiva de Kast iban también el diputado chileno Cristian Araya, presidente de la Comisión de Seguridad de la cámara de diputados de su país y Cristian Valenzuela, un abogado y magister en ciencias políticas cercano a Kast. Todos esos títulos y cargos de nada sirvieron ya que nunca supieron con quién estaban reunidos y menos con quién se fotografiaban. Tenían al frente al abogado, cómplice y protector del narcotraficante Chepe Diablo y no se enteraron”.

Ahora muy pocos lo mencionan y menos quieren fotos con él. Nayib Bukele era el profeta que todos admiraban. Sus seguidores y fanáticos en diversos países pedían un presidente como él. Todo eso cambió, y no es por su reciente anuncio para perpetuarse en el poder indefinidamente. Hay mucho más que causó que de ídolo pasara a ser un leproso político. 

El mundo recién está despertando de quien es realmente Bukele. Un hábil vendedor de sus productos en redes sociales. La falsa narrativa del ser el país más seguro de Latinoamérica ya nadie la compra. Viven en plena dictadura, con medios de comunicación censurados, periodistas perseguidos, con un estado de sitio de ya tres años, y con el gobierno manipulando cifras y estadísticas no es difícil que la delincuencia aparezca en sus informes con bajo porcentajes.

Otros países “seguros” como Nicaragua y Cuba, reportan cifras similares. Lo mismo sucede con las encuestas de aceptación que, por temor de los ciudadanos, le arrojan un alto porcentaje, al igual que a Ortega, Díaz-Canel, Putin y Kim Jong Un. 

El cuento del control de las pandillas era toda una mentira. El mundo se dio cuenta y la verdad salió a flote. The New York Times, The New Yorker, Washington Post y el diario digital salvadoreño El Faro, publicaron con evidencias como Bukele liberó a sus líderes y les ayudó con altas sumas de dinero para negociar votaciones a su favor y para que redujeran sus crímenes. 

El cerebro detrás de Bukele 

Lo que sí es verdad y nadie habla es de la persona detrás de Bukele. Se trata de un anciano de 75 años de edad. Es quien tiene el poder sobre Bukele. Es su jefe y financista desde antes que fuera presidente. Se trata del narcotraficante José Adán Salazar Umaña, alias “Chepe Diablo”, fundador y líder del cártel de Texis. 

Este cártel, que comenzó el año 1990, es una organización criminal salvadoreña especializada en el tráfico de drogas, que se dedican al transporte de narcóticos de grupos colombianos para ser enviados a Estados Unidos. Su poderío alcanza ahora todo Centroamérica debido al soborno de policías, jueces, fiscales y políticos.

Se supone que el cártel de Texis fue desmantelado el año 2018, después que sus líderes fueran detenidos incluyendo Salazar Umaña. Una vez que llegó Bukele al poder el 2019, su apoyo a Chepe Diablo fue incondicional y hasta lo liberó de la cárcel. El negocio continuó y ahora hasta con protección presidencial. 

El narcotraficante Salazar Umaña y su cártel de Texis han sido declarado desde hace más de diez años como “relevantes narcotraficantes extranjeros" y un grupo de "delincuencia organizada transnacional en Centroamérica y el Caribe”, por la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC, por sus siglas en inglés) y el gobierno de los Estados Unidos. 

Chepe Diablo es un genio del narcotráfico. De bajo perfil, pero muy inteligente. Durante años y hasta la fecha logró infiltrar la embajada norteamericana en El Salvador, donde tiene a varios diplomáticos norteamericanos en su nómina, incluso logró corromper hasta un embajador. Obtiene acceso a radares y satélites de la embajada para captar drogas de su competencia, y para evitar capturas de sus envíos cuando Estados Unidos ubica sus barcos, aviones y transportes terrestres. 

Salazar Umaña tiene montado una red tan influyente que actualmente él es el jefe, no solamente de Bukele sino también de sus ministros, fiscales, diputados, fuerzas armadas, policías y jueces. 

La mayor creación de Chepe Diablo fue el infiltrar a la policía salvadoreña, pero de una manera muy perspicaz y nunca antes vista. Su estrategia de lograr que los policías trabajen para él como espías en varios países es original e ingeniosa. Se le ocurrió comprar a los agregados policiales salvadoreños en el servicio exterior para así tener información y acceso a las investigaciones de las agencias policiales extranjeras de sus negocios de narcotráfico y la de sus rivales. 

Los agregados policiales reciben del estado un sueldo aproximado de 2 mil 500 dólares mensuales. Sin embargo, Chepe Diablo creó el plan de darle a estos agentes diplomáticos 10 mil dólares extra al mes para que trabajen para él.

El sistema creado por Chepe Diablo es tan ingenioso que funciona como un ejército o servicio de inteligencia privado para él. Los agregados policiales contactan a policías de otros países como si estuvieran pidiendo asistencia en alguna investigación, pero es sólo para averiguar qué información hay sobre su patrón y sus rivales. 

La novedosa estrategia de Salazar Umaña fue investigada por otros policías salvadoreños y entregada a varias embajadas y agencias policiales en el mundo en julio de 2024. De esta forma, cuando los agregados policiales salvadoreños traten de hacer las falsas consultas a sus homólogos extranjeros y con la doble intención de ayudar a Chepe Diablo, las instituciones policiales de diversos países ya estarían advertidas. 

Lo más llamativo es que los corruptos agregados policiales y espías de Salazar Umaña son nombrados por el propio narcotraficante y no por el comisionado de la policía o Bukele. 

Hay un caso registrado en ese informe interno que llega al borde de lo ridículo y el descaro. Se trata de un agregado policial destinado actualmente en Europa y por años socio de Chepe Diablo. Este funcionario se había retirado de la policía hace 20 años atrás. Era tan exitoso en sus negocios que registraba ingresos por más de 8 millones de dólares al año. Pero por “amor a la patria” decidió reintegrarse como policía por 2 mil 500 dólares al mes y dejar sus empresas. Un “noble” gesto para convertirse en agregado policial en el extranjero al servicio de su socio Salazar Umaña. 

En diciembre del 2016, Danny Dalton ex-agente de la Administración para el Control de Drogas de Estados Unidos (DEA por sus siglas en inglés), dio una entrevista en que acusaba al fiscal general de ese entonces, Douglas Meléndez, de frenar la investigación en contra del Cártel de Texis y de Salazar Umaña, para así proteger al poderoso narco y a dos de sus cómplices.

En esa entrevista, el ex agente de la DEA indicaba que estas dos personas que protegió el procurador eran abogados y cercanos del narco Chepe Diablo. Lo más grave hoy en día es que estos sujetos son actualmente ministros de Bukele: Gustavo Villatoro, ahora ministro de seguridad y justicia, y Rodolfo Delgado, fiscal general de El Salvador, a quienes la DEA señaló como cómplices y colaboradores pagados por el Cártel de Texis.

El agente Dalton explicaba en su relato que Rodolfo Delgado, cuando era jefe de la Unidad Contra el Crimen Organizado de la Fiscalía, colaboraba con el Cártel de Texis para permitir el ingreso de drogas a El Salvador proveniente de Honduras, que luego era destinada a Estados Unidos. Actualmente, Delgado es el procurador del país, y la protección a Chepe Diablo y su cartel continúa con más blindaje que nunca. 

Gustavo Villatoro, actual ministro de Justicia y Seguridad de Bukele y rostro de la lucha contra el crimen, en ese entonces era director general de Aduanas, y para la DEA estaba sin duda involucrado en el narcotráfico junto a Chepe Diablo. 

Estos dos ministros de Bukele ahora son presentados en el mundo como “ejemplos” del combate a la delincuencia organizada y hasta dan cátedras y son visitados por sus homólogos en varios países latinoamericanos. 

Kast y Bullrich elogiando narcos 

Muchos políticos latinoamericanos son admiradores del presidente salvadoreño y visitan su cárcel “modelo”. Felices señalan que viajan a aprender sobre el combate a la delincuencia. Así ocurrió con el chileno José Antonio Kast, un político de ultraderecha y candidato a la presidencia de su país, quien viajó a El Salvador en abril del 2024, y fue recibido por el propio Gustavo Villatoro, el protector de Chepe Diablo, y señalado por la DEA. 

Lo irónico es que en la comitiva de Kast iban también el diputado chileno Cristian Araya, presidente de la Comisión de Seguridad de la cámara de diputados de su país y Cristian Valenzuela un abogado y magister en ciencias políticas cercano a Kast. Todos esos títulos y cargos de nada sirvieron ya que nunca supieron con quién estaban reunidos y menos con quién se fotografiaban. Tenían al frente al abogado, cómplice y protector del narcotraficante Chepe Diablo y no se enteraron. 

Solo debieron haber googleado el nombre del ministro y podrían haber evitado haberse relacionado y alabar al cuestionado socio del narco salvadoreño. Incluso Kast escribió en su cuenta X: 

“Gracias ministro Villatoro por el gran recibimiento y la posibilidad de conocer a fondo las exitosas estrategias para combatir el crimen organizado que está liderando El Salvador. Hoy, cuando Chile nuevamente despierta con la triste noticia de un policia asesinado por delincuentes, más que nunca necesitamos usar todas las herramientas disponibles para derrotar el crimen y encerrar a quienes se oponen a que millones de chilenos puedan vivir en paz”. 

Kast destacaba en su mensaje a Villatoro el fallecimiento del policía chileno sin haber tampoco indagado en internet al en ese entonces director de la Policía salvadoreña, el comisionado Mauricio Arriaza Chicas, que fallecería cinco meses después en un extraño accidente en helicóptero. Los improvisados políticos chilenos no se imaginan quién está detrás de la muerte del jefe policial.

Los ingenuos chilenos del Partido Republicano no fueron los únicos en demostrar falta de rigurosidad y profesionalismo a la hora de organizar su visita a El Salvador. Argentina también cayó en lo mismo y su ministra de seguridad incluso invitó a Villatoro a Argentina a dar charlas y hasta lo premió. Patricia Bullrich escribió en X: “Me reuní con Gustavo Villatoro, ministro de Justicia y Seguridad Pública del presidente de El Salvador para discutir estrategias efectivas en la lucha contra el narcotráfico y las mafias”.  Un patético chiste que la dejó como una básica ministra que se reunía con el cómplice del narco más grande de Centroamérica. Pero eso no es todo. Cuando asumió al poder el presidente argentino Javier Milei, el enviado por Bukele, a la toma de posesión en representación de El Salvador, fue nada menos que el abogado y protector de Chepe Diablo, el ahora ministro, Gustavo Villatoro. 

Esto no es nuevo en política. Lo mismo hicieron muchos países en México, incluso Estados Unidos cuando premiaban y felicitaban al narco y director de la Policía, Genaro García Luna. Todo el país lo sabía, menos los policías y diplomáticos extranjeros. 

La administración del expresidente Biden sabía muy bien quiénes son los ministros narcos de Bukele. Sin embargo, la política norteamericana no permite que se acusen a funcionarios mientras estén activos. Al llegar Trump, se hizo caso omiso de estos datos y hasta se disolvieron inclusos las unidades norteamericanas que investigaban a los pandillas y autoridades en El Salvador.  

La protección de Trump a su amigo Bukele y su cártel es tan notoria que incluso cuando viajó Bukele a reunirse con Trump, llegó acompañado de Gustavo Villatoro. Muchos agentes no entendían qué hacía ahí el socio de Chepe Diablo en la oficina oval de La Casa Blanca, dándole la mano al presidente de Estados Unidos. Salazar Umaña ganaba ahora acceso a Washington y al propio Trump. 

Aún hay más secretos de Nayib Bukele y sus crímenes que no han sido expuestos. Es por eso que adelantó las elecciones presidenciales para el 2027, un año antes que se vaya Trump, y así también perpetuarse en el poder por miedo a ser juzgado por un nuevo gobierno estadounidense, y proteger a su jefe Chepe Diablo, quien fácilmente algún día podría testificar en contra de Bukele en una corte en EE.UU.  

En este artículo

Personas:


Los Más

Ya que estás aquí, te queremos invitar a ser parte de Interferencia. Suscríbete. Gracias a lectores como tú, financiamos un periodismo libre e independiente. Te quedan artículos gratuitos este mes.

En este artículo

Personas:


Los Más

Comentarios

Comentarios

Estimada Carel....Se te olvidó poner en la lista con nombres de presidentes o líderes en que, según tú son comparables con "Bukele", y es a "XI Jinping"?...., y por supuesto!, dejas de lado a Trump?... Digamos, que por lo menos, has hecho una columna de información llena de FALSEDADES!!

Increíble el narcotráfico y las redes q se tejen ojala las autoridades desarrollen algo de inteligencia para prevenir q permeen nuestros estamentos públicos o vamos a estar igual q allá!

Añadir nuevo comentario