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Martes, 16 de Abril de 2024
Desvinculado de Iberoamericana de Prisa

Freddy Stock: “Ojalá mi despido no sea una señal de amedrentamiento y se empiece a perseguir y dejar sin trabajo a periodistas que se atreven a decir lo que piensan”

Víctor Herrero A.

Hace una semana el periodista fue sorpresivamente despedido de la Radio Futuro, pese al éxito de su programa ‘Palabras sacan palabras’ que conducía hace ocho años. ¿Por qué? Por “razones editoriales” según la gerencia de Iberoamericana Radio Chile, dueña de más de 10 estaciones en nuestro país y que pertenece al Grupo Prisa, de España. Freddy Stock cree que fue por razones políticas, en especial por ser muy crítico del gobierno en sus redes sociales personales. “Yo creo que no hay nada más democrático e institucional que sacar a un violador de Derechos Humanos de La Moneda”, asegura en esta extensa entrevista.

Admision UDEC

La tarde del jueves 26 de diciembre, el director de la Radio Futuro, Rainiero Guerrero, le comunicó al periodista Freddy Stock que en este año 2020 ya no iba a seguir en Palabras sacan palabras, programa que se trasmitía de lunes a viernes entre las 18 y 20 horas y que lideraba este periodista.

“Pero ¿cómo? Si tenemos seis mil oyentes más que el año pasado”, le contestó desconcertado Stock. Guerrero le respondió: “Sólo te puedo decir que fue por razones editoriales”. Ambos se dieron un abrazo. Estaba claro que el director de la radio no estaba feliz con la decisión de la gerencia.

En la primera entrevista que Freddy Stock da a un medio de prensa tras su despido en la Radio Futuro, INTERFERENCIA le preguntó:

- ¿Recibió alguna explicación sobre qué significa ‘razones editoriales?

- Ninguna. Sólo me dijeron eso. Pero si vuelvo a tener un programa de radio me gustaría que tuviera el nombre de ‘Razones Editoriales’.

La tarde del viernes 27 de diciembre, pocas horas antes de realizar su último programa, Freddy Stock envió un mensaje por Twitter que ese día llegó a ser trending topic:

“Este tuit es de los más importantes para mí que he escrito. Es para contarles que después de 8 años fui despedido de radio Futuro. Ni por falta de profesionalismo ni menos de audiencia. Fue ‘por razones editoriales’. Hoy me despido al aire en un brindis de rock y de periodismo”.

Nuestro medio se contactó con el director de la radio la semana pasada, quien declinó comentar la salida de una de las voces más exitosas de esa emisora. Sólo se remitió al comunicado oficial que, como suele ocurrir, no decía nada de relevancia.

En conversación con INTERFERENCIA, el periodista despedido fue enfático en señalar que tiene un gran cariño por el equipo con el cual trabajó durante ocho años, y también a los oyentes del programa que le enviaron numerosas muestras de cariño.

“Pertenecí a una radio y también a un equipo humano muy valioso, que son gente de muchos valores, y espero que no vean mi despido como un amedrentamiento”, asegura Stock.

Radio Futuro es parte de Iberoamericana Radio Chile, dueña de más de diez estaciones en nuestro país, la que a su vez pertenece al Grupo Prisa de España, gigante editorial que publica el diario El País. Prisa también es dueña de la editorial Santillana, la mayor proveedora de textos escolares en Chile, gracias a exclusivos contratos con el Estado.

Según supo nuestro medio, la decisión de despedir a Stock provino directamente del gerente del conglomerado radial, Ricardo Berdicheski, quien no dio mayores explicaciones al respecto.

- Llama la atención que todos los periodistas despedidos o renunciados de los medios tradicionales, usted incluido, sea gente que ha estado a favor del movimiento surgido a partir del 18 de octubre.

- Yo me acuerdo de que el primer informe que saca Amnistía Internacional sobre violaciones a los Derechos Humanos hacía alusión a que todas estas pérdidas oculares -que no eran casualidad, cuando en ese momento ya iban más de 150-, eran una manera de amedrentar a los jóvenes para que no siguieran saliendo a las calles y que sus familias los retuvieran. Esta manera brutal de represión tenía  como fin el amedrentamiento. Ojalá mi despido no sea una manera de amedrentar a varias personas que tienen una opinión distinta. Porque claro, si me pasó a mí, o a otro profesional visible en el mundo periodístico y profesional, uno puede perfectamente llegar a pensar que se trata de un amedrentamiento.

"Razones editoriales"

El lunes 30 de diciembre en la tarde-noche, INTERFERENCIA acudió a la casa del periodista en la comuna de Ñuñoa para conversar acerca de su despido, pero también para hablar del estado actual del periodismo.

“Yo soy republicano del alma”, dice Stock. “Provengo de una familia masónica, estudié en el Instituto Nacional, en la Universidad de Chile, yo creo en la República y en que las diferencias políticas se conversan”.

A continuación se presentan extractos de esa conversación.

- Partamos por lo más obvio. ¿Por qué cree que lo despidieron?

- Yo creo que la gerencia del consorcio se sintió incómoda por lo que posteaba en mis redes sociales. Pero todo esto comenzó antes. A fines de 2017, en plena campaña de Alejandro Guillier contra Sebastián Pinera, en la segunda vuelta, con mi grupo de rock Los Carrera sacamos una canción sobre la persona que era Piñera. Lo pusimos en las redes y lo lanzamos. Eso causó un gran malestar en la gerencia general. Ahí sentí que algo estaba cambiando.

- ¿Cómo sabe que causó malestar?

- Me llamó a la oficina este gerente general, muy molesto. Consideraba que yo había cometido una imprudencia, porque yo era un rostro de la radio y no podía andar haciendo esas cosas. Yo le dije que soy un profesional, que esto no lo hice con la radio, sino que a través de mis redes sociales, mi vida privada, y que yo consideraba que en el mundo que vivimos la honestidad es mucho más importante. Además que mi problema no era con un sector político determinado, sino que puntualmente con un personaje que no tiene las condiciones éticas, por toda su historia, de volver a ser presidente de la República. Ahí se produjo un primer quiebre.

- Y después del 18 de octubre de 2019, ¿qué pasó?

- Cuando estalla el conflicto social, se comienzan a hacer especiales unificados de la radio, informativos de la radio comandados por la ADN. Y a mí, en un momento, me dejan de invitar a esos paneles, comienzo a ser dejado de lado. Expresé mi molestia y nadie me dio explicaciones al respecto.

- ¿Tuvo señales de alerta sobre su despido?

- No, no. Escuché varias cosas, pero siempre eran rumores de pasillo. 

- ¿No le llama la atención que casi todos los periodistas despedidos desde fines de octubre sea gente más bien progresista?

- No puedo hablar por los otros medios. Lo único obvio es que alguien que está a cargo de once radios, muchas informativas y muchas de primera sintonía, tiene un poder impresionante. Si ese poder se ocupa con el sentido que requiere el manejo social de un medio de comunicación, o se ocupa de una manera tecnócrata como un trampolín para después cambiar de pega… no lo sé. 

- El Grupo Prisa viene perdiendo plata hace varios años.

- Claro y tú puedes sumar de manera especulativa el mal año que ha tenido PRISA el primer semestre por pérdidas millonarias. El conglomerado está en un muy mal pie ahora. 

- Estaba revisando su twitter, que es el espacio en redes más combativo. Uno se mete a Twitter y parece una guerra civil a ratos. Y su perfil es súper claro, o sea, claramente está con el movimiento. En este clima polarizado uno lo identificaría políticamente como alguien de izquierda. A eso se suma uno de sus últimos tweets, donde reproduce un artículo sobre los once principios de la propaganda de Joseph Goebbels. Entonces, desde luego no ocultó su sentir político. 

- Sí. Yo no sé si soy... bueno, no soy una persona de derecha, sin duda. Ahora, definirse en este momento es difícil en esta liquidez de ideologías que hay y de cambios y de nueva era. Pero yo en lo personal soy una persona que tiene mucho respeto por la gente que emprende. Por la señora que lleva el carrito a las 5 AM en invierno y que está emprendiendo su propia faena. En el empresario honesto que es capaz de compartir y socializar. Yo mismo soy un pequeño empresario que me cuesta mucho llegar a fin de mes pagando sueldos. Tengo un restaurante que es una empresa familiar. Está mi hija y mi hijo trabajando ahí. Tengo mucho respeto por la iniciativa privada, y además tengo mucho respeto por un Estado garante de que un país pueda ser realmente meritocrático. No como Chile donde no hay ningún mérito en que alguien pueda pagar 500 mil pesos por una educación escolar y otros no tengan ni siquiera la enseñanza mínima. No hay mérito en eso. Partiendo de esa base, creo que mi lucha como periodista y comunicador es contra un gobierno o un sujeto que comanda un gobierno, que está violando sistemáticamente los Derechos Humanos, como lo han dicho estos informes. Eso es. Que haya ganado un gobierno de derecha está bien, está en su lid y bienvenido sea. La alternancia en el poder no es mala dentro de una república y se logra desde todos los sectores. 

Por eso no me detuve nunca, pagando los costos de decirlo. Sobre todo cuando empecé a ver cómo estaba actuando esta represión que nosotros vivimos como generación de la dictadura. Cuando entró esa fuerza policial al Liceo 7, o cuando empezaron las primeras personas a perder su vista o se empezó a saber de muertos que aparecían quemados en supermercados, o gente torturada, violada nuevamente; o sea, revivimos lo peor de la dictadura cuando éramos estudiantes. Estos mismos cabros que están siendo mutilados. Uno no puede ser indiferente a eso.

- ¿Qué opina de cómo la prensa tradicional ha actuado y cubierto esta crisis?

- La reflexión ahí va más atrás. Es "¿qué prensa tenemos?". Qué leyes, dentro de todo lo que se dejó ser, dentro de todo el neoliberalismo, qué límites o no límites existieron para pensar realmente cuáles son los roles de los medios de comunicación dentro de una sociedad. Cuando no están esos límites de propiedad de los medios, finalmente ese es el gran dique para que logremos construir sociedades diversas de pensamiento y enriquecedoras de pensamiento. Que vayan encauzando los procesos sociales para que no estallen como estallaron hoy. La respuesta la dio y la sigue dando la gente. Cuando se enfrenta a la televisión abierta o a ciertos medios. Y la gente incluso que, cuando explico en un tweet que me echaron por razones editoriales, llega a 900 mil impresiones a la hora de hacer esta entrevista, y no se cuantos miles de retweet y todo lo que se ha dicho alrededor de eso. No solamente por mi persona, sino que en general, de saber que esto está ocurriendo. Además en un medio extranjero que debería tener una responsabilidad aún mayor por todo lo que está ocurriendo, y además, te lo repito, con esta línea editorial que tenía el grupo PRISA en los principios, los valores que tenía...

- Claro, el diario El País fue un medio clave en el posfranquismo, y en abrir la democracia en España...

… la mano del PSOE y de la mano de la liberalización que necesitaba España en esos momentos.

- ¿Cree que en Chile, han habido medios de comunicación que desempeñaron un papel así?

- No... bueno, hay un gran documental, El diario de Agustín, que habla un poco de como la Concertación terminó trabajando en pos de salir en esas portadas de El Mercurio. Y durante los 90 y los 2000, el 90% del avisaje estatal en plena democracia se fue a solamente dos grandes cadenas de medios que fueron Copesa y El Mercurio. Ahí están los números finalmente y eso lo dice todo. Y las revistas que lucharon por recuperar la democracia, todas quebraron porque no tuvieron auspicio o ayuda para ser parte de aquello. Nosotros somos del equipo fundador del Diario Siete, con Mónica González, Alberto Luengo, y jamás recibimos la ayuda estatal. No se si ayuda, pero al menos el avisaje que le debería corresponder a todos los medios. Se estranguló no más ese diario en pos de otros más tradicionales. Como decían los cabros "no son treinta pesos, son treinta años", entonces esto también es parte de eso.

- O sea, la prensa tradicional también sería parte del problema.

- Bueno hay varios análisis. La credibilidad de la televisión abierta cayó de manera estrepitosa. Cuando Piñera da una entrevista a La Tercera y dice "lo peor ya pasó", y esa entrevista sale el mismo día en que están entregando el cadáver de un joven que murió manifestándose, tú te das cuenta de que estamos con un sujeto que o no entiende lo que está pasando o tiene una frialdad tremenda de poder divorciarse de la realidad. Es una frialdad que pareciera tener tintes psicóticos, de poder decir algo tan cruel cuando hay gente aún sufriendo. Familias enteras sufriendo por lo que ha pasado en este tiempo.

- Piñera fue varios años dueño de un medio de comunicación, Chilevisión. Debe conocer perfectamente el juego comunicacional y saber perfectamente dónde apretar y dónde no.

- Y Larroulet también. Libertad y Desarrollo tiene mucha gente. Sabemos que tienen muchos contactos en los medios de comunicación. La élite chilena es muy endogámica, es muy chica. Hablaba con Nicolás Eyzaguirre que sacó un libro sobre la desigualdad, y explicaba en la entrevista que los privilegios que ha tenido la clase alta en Chile han sido desde que se fundó la república, no han pagado nunca los impuestos que corresponden. En el siglo XIX prácticamente no se pagaban impuestos, se vivió de la minería y después de la guerra del pacífico del salitre. Y en el siglo XX se llegó a un acuerdo con la Corfo cuando se crea la Corfo industrial de que no se tocaran los campos (de las élites). Entonces lo que hay ahora es una lucha muy profunda, y la denominación del "partido del orden" es muy interesante y muy inteligente. 

Finalmente el status quo no tiene signos políticos, sino solo el deseo de mantener este status quo. Cuando uno ve hace unas semanas a Piñera presentando un proceso constituyente como si fuera de él y flanqueado de esta serie de personajes sentados: ese es el partido del orden, respaldando un acto de un tipo que ha violado los Derechos Humanos. Cuando los Derechos Humanos no tienen color político. O sea, cuando se dice que Piñera tiene que terminar porque hay que respetar la institucionalidad, entonces bajo ese precepto Nixon nunca debió haber renunciado, debió haber terminado su año y no haber renunciado antes de que lo echara el propio Parlamento por el caso Watergate. Yo creo que no hay nada más democrático e institucional que sacar a un violador de Derechos Humanos de la Moneda, a un tipo que está comandando o ha sido responsable político de todas estas violaciones a los Derechos Humanos. 

Entonces, hay un Chile que se sostiene y que está haciendo lo posible porque finalmente las cosas no cambien. Que la mayoría de la gente quiere que cambien, e incluso mucha gente de la derecha, ojo. Yo creo que aquí hay un consenso democrático más allá de los pensamientos políticos y las ideologías puntuales de que hay muchas injusticias. Yo escucho al Manuel José Ossandón, a Mario Desbordes, a los cuales les tengo un gran aprecio, y hay una derecha que entiende que esto no puede seguir así. El mismo Swett, de la CPC, dijo en un momento que había que meterse la mano en los bolsillos, de que esto no puede seguir así.

- Curiosamente muchos políticos de la centro-izquierda de alguna manera le han tirado varios salvavidas a este gobierno.

- Sí, lo que pasa es que hay una centro izquierda ahí que es defensora de este modelo. Recuerda que SQM terminó siendo militante del PPD. Y el PS invirtiendo en la bolsa también en SQM. SQM que estaba liderada por el yerno de Pinochet, el cual mató a muchos de sus camaradas, compañeros. Entonces ahí se produjo una frivolidad frente al dinero, que terminó socavando las bases más puras de esta nación.

Esta es una nación solidaria, los chilenos somos solidarios porque la naturaleza nos condicionó a serlo. La cantidad de terremotos y otros azotes... estamos obligados a ser solidarios, de otra manera no hubiésemos podido seguir adelante. Por lo tanto este modelo va en contra de nuestra propia naturaleza humana como chilenos, como gente telúrica, como hijos de los desastres. Y hay un Chile entero que se acomodó a ese modelo. Primero porque tuvo que hacerlo, teniendo a Pinochet, y luego porque le gustó y sintió que también era parte de eso. Por eso el cambio es tan profundo y es tan difícil y es tan complicado, porque muchos poderes están dispuestos a todo para que la cosa siga lo más parecido posible a lo que era antes del 18 de octubre.

- ¿Su propio despido no será una señal de cómo se defiende este ‘partido del orden’? es una señal de que aún no se ha avanzado mucho, por lo menos en este mundo. Los primeros despidos fueron en la televisión -a la Paty Maldonado la escondieron un rato, pero parece que ahora están preparando su retorno-, pero uno no esperaría que se siga apretando tan fuerte a estas alturas.

- Sí, claro. Es que quizás lo de la Patricia Maldonado es más un maquillaje televisivo que un despido, “poner en un congelador porque puede bajar el rating si estás tú” en el fondo, más que un cambio editorial como ocurrió en Radio Futuro, que es “sáquenlo porque hay un cambio”…

- ¿Cuál es la frase…?

- Por razones editoriales. O sea si tengo nuevamente un programa en la radio se va a llamar así, “Razones editoriales”...

- Buenísimo...

- Y yo sé, me lo dijo también gente adentro, buenas fuentes adentro, que ya circulaban nombres para reemplazarme dentro del programa, y que algunas personas a las que se les preguntó no quisieron hacerlo, por todo lo que significaba también. Pero quiero dejar en claro que le tengo un enorme cariño a la Futuro, y que en ese conglomerado internacional hay grandes profesionales, muchos grandes comunicadores que están súper conscientes de que cuando se comunica o se hace periodismo no solamente es para pagar un sueldo para vivir, también porque hay una responsabilidad detrás, sobre todo en momentos como éste cuando más se necesitan. Ojalá que mi salida no quede como una señal de amedrentamiento por ocupar las redes sociales para ello, porque finalmente sociedades con un periodismo amedrentado son sociedades que no tienen democracia, no son sociedades democráticas.

- Ojalá que aquí no empiecen a perseguir y dejar sin trabajo a periodistas que están atreviéndose a decir lo que piensan.

- Lo voy a decepcionar: eso ya está ocurriendo. Por ejemplo, la salida de varios periodistas de La Tercera se vendió hacia afuera como lo típico: razones de la empresa, reducción de costos. Efectivamente eran periodistas más caros por su experiencia y trayectoria, , pero por lo que nosotros supimos todos compartían un perfil, que era gente más progresista, que no estaban del todo conforme con la línea editorial que estaba empujando el diario y se lo hacían ver a sus jefes. 

Bueno, entonces… Mira, hay un libro que ha sido uno de los últimos best seller que se llama Cómo mueren las democracias, que es de un par de profesores estadounidenses, y también el pensamiento de Byung-Chul Han y Yuval Harari, que hablan también de cómo se expresa ahora el poder. Los golpes de Estado ya no son aviones bombardeando La Moneda –ese libro parte con el ejemplo de Chile en el 73-, sino que ahora el poder tiene mecanismos mucho más sutiles para manifestarse. Y al ser más sutiles también son mucho más efectivos, porque tú no te das ni cuenta y eres despedido de una radio, no te das ni cuenta y amordazan a cuatro o cinco, no te das ni cuenta y hay un conglomerado entero que te deja sin trabajo y te silencia. Y la censura también opera como parte de esos golpes de Estado, porque finalmente un país que está censurado es una dictadura, termina la democracia. La libertad de expresión es la piedra basal de una democracia.

- Como el nuevo lema de The Washington Post, que dice “Democracy Dies in Darkness” (la democracia muere en la oscuridad).

- Eso es lo que está pasando ahora. O sea, están matando al periodismo para que sigamos viviendo en una oscuridad que permita que estas cosas sigan ocurriendo. Frente a eso hay que rebelarse…

- Ahora, con todos sus altos y bajos, las redes sociales pueden ser una manera saltarse estos cercos informativos, aunque no un sustituto para el periodismo.

- Sí, claro, pero fíjate lo que me pasó a mí. Mi pensamiento contra lo que estaba ocurriendo en Chile lo canalicé, lo canalizo en mis redes sociales, en Twitter básicamente. Y estas ‘razones editoriales’ apuntan a eso, y ya están pasando a tu vida privada y te están persiguiendo más allá de lo que debieran y lo que es tu trabajo profesional dentro de una empresa.

- ¿Cree que hoy en día el uso de redes sociales corresponde a la vida privada?

- O sea, debiera corresponder básicamente a tu propio discernimiento como ciudadano. Obviamente no es privado en el momento de hacerlo público, pero sí es privado en el acto tuyo de querer comunicar algo más allá de un medio de comunicación formal que te está contratando. Más allá de ser un empleado de alguien o pertenecer a una casa editorial, a eso voy en que es un acto privado, un acto de reflexión, que finalmente es privado.

- O de libertad de expresión.

- De la libertad de expresión que tiene todo ciudadano.

- Lo despidieron por razones editoriales ¿Tiene una línea editorial la Radio Futuro?

- Bueno, la Radio Futuro tiene la línea editorial de lo que debiera ser el rock and roll, y el rock and roll como fuerza es la fuerza política más importante de Occidente de posguerra. Es la fuerza que ha logrado combatir el status quo y gracias al rock and roll tenemos muchas de las libertades que hoy seguimos respirando y avanzando. Sin el rock and roll el mundo sería mucho más estrecho de lo que es. Por lo tanto, la línea editorial del rock and roll es el progresismo como tal y el combate al status quo que empantana a las sociedades y eso es lo que yo siempre sentí perteneciendo a una radio de rock como la Radio Futuro.

- O sea, la conclusión más obvia entonces es que esas "razones editoriales" se deben a tus opiniones políticas en tus redes sociales.

- No hay otra explicación lógica. En el comunicado oficial dicen que quieren cambiar un poco la línea, que no van a hacer tanta actualidad. Es muy anodino. Claro, si te despiden porque tienes mala audiencia o porque has sido poco profesional, uno lo puede entender. ¿Pero despedirte por razones editoriales de un proyecto que desde hace ocho años es un éxito? 

- ¿Cuál es el feedback que obtenían por el programa Palabras sacan palabras a partir del 18 de octubre?

- Aumento de sintonía... Es una radio muy querida la Radio Futuro, tiene una labor muy linda, porque finalmente, como yo definía al programa, es una comunidad de pensamiento. Se hacen muy buenas relaciones. Ponte tú, hay mucha en el gobierno que fue panelista nuestro, como Ignacio Briones, Gloria Hutt, Lorena Recabarren, Lucas Palacios, gente que es parte del equipo de Radio Futuro...

- ¿En qué sentido?

- En que logramos un buen nivel de estimación, ellos mismos con otras personas que pensaban distinto. Se logró una comunidad. Muchos de ellos me han escrito también en la interna, para darme fuerzas en el momento por el cual está ocurriendo todo esto. Logré hacer muy buenos amigos dentro, Jaime Bellolio... El mismo Mario Desbordes, lo conocí haciendo Radio Futuro. Personas con las que claro, tengo un pensamiento distinto, pero en esa fraternidad se logran estos puentes, que se construyeron gracias a ese programa. Y espero que se sigan construyendo, más allá de las razones editoriales que puedan seguir, porque son programas que hacen falta finalmente, son puntos de encuentro que hacen falta. Sobre todo en estos momentos. Y las razones que hayan tenido estos gerentes generales para tomar ese tipo de decisiones ojalá se diluciden, y el tiempo todo lo explica, si finalmente estos gerentes tienen realmente una convicción de estar al mando, y una responsabilidad de estar al mando, un poder tan importante para una sociedad que se construye como tener once radios, o si están trabajando básicamente para después de esto, y pagando favores, tener buenos puestos de trabajo una vez que dejen el conglomerado. Eso solamente el tiempo lo dirá.

- ¿Tienes ofertas de otras radios?

- No, todavía no me he metido a buscar, además ¿en qué conglomerado? Y eso es lo otro, que las radios pertenecen a conglomerados. Antes las radios eran de personas, ahora son en general de conglomerados. Son poderosos. Sabes qué pasa, otra reflexión interesante que podríamos hacer como sociedad, y dentro de la importancia que debieran tener los medios de comunicación, en la construcción y en la integración de las sociedades, es que se le exija al Estado responsabilidades a la hora de armar un medio de comunicación. Más allá de la línea editorial que cada uno pueda tener, sobre todo cuando es el Estado el que pasa sus espectros radiofónicos o sus espectros para que puedan seguir como tal. Porque cuando un canal de televisión abierto pasa sobre el espacio que es de todos los chilenos, o una radio pasa por el espectro que es de todos los chilenos, tiene que cumplir una labor social, sobre todo cuando son dueños de más de una radio, en este caso, de once. 

Y eso nosotros lo dejamos estar. Hay valores que tienen que ver también con la diversidad y la libertad de expresión que puedan tener todos los medios en la construcción de sociedades más inclusivas. De partida, quiénes son, quién es el dueño, quiénes son, cuántos medios puede tener alguien o un conglomerado económico…

- O sea la propiedad de los medios de comunicación…

- Exacto, que es una discusión que están dando hoy varias democracias importantes de Occidente. Sobre la concentración de medios y cómo eso también está minando las sociedades en el mundo entero.

- ¿El gerente general habló con usted?

- Dijo que me iba a dar una entrevista, que me iba a dar una reunión, me mandó un correo. Que habían unos estudios que señalaban que se quería más música que actualidad… Una ridiculez, pero no…

- ¿Pero se reunió con él?

- No.

- ¿Porque no quiso?

- Lo fui a buscar a la oficina y no estaba. Luego, le pedí una reunión con la secretaria y me mandó un correo diciéndome que él me iba a llamar para juntarnos. No sé si será productivo…

- Sí, pero distinto es escuchar acerca de las "razones editoriales" de la boca del gerente.

- Sí, posiblemente. Ahora, soy un demócrata, me puedo juntar feliz, me juntaría con cualquiera a conversar, pero no sé qué podrá decirme.

- Estos despidos selectivos en la prensa que han sucedido desde el 18 de octubre se camuflan en parte con una crisis de la industria, que es efectiva, pero también son señales poderosos ¿Cuál es el mensaje que cree captan los comunicadores jóvenes, los que recién están empezando en el mundo laboral o que aún están estudiando?

- Primero, que tengan muy en claro, como decía Nietzsche, que no hay realidad, sino que interpretaciones. Que el mundo se interpreta, y ellos están metidos en la profesión de las interpretaciones, que es donde se mueve finalmente el poder. Y donde se puede ser víctima fácil del poder. Cuando Foucault decía que era el poder finalmente lo que determinaba qué era normal y anormal, lo que estaba dentro de la norma, de las leyes, señala que se hacía a través de los medios de comunicación. Por lo tanto, es una profesión que te enfrenta cara a cara con lo mejor y lo peor que puede tener esa construcción de la normalidad o de la anormalidad. 

No es una tarea fácil, si no se hace con pasión y si no se hace con honestidad. Lo dije al momento de despedirme de la Radio Futuro, en el que recordé a un viejo de Paine, don Aurelio Moreno, que era este viejo sabio, que debe haber tenido unos 90 años en esa época, y le digo: “don Aurelio, me gustaría saber qué es para usted la felicidad”. Este caballero me mira así y me dice: “poder dormir tranquilo en las noches, pues cabro”. Y yo al principio no entendí mucho lo que me dijo, pensé que me estaba agarrando para el tandeo, pero con el tiempo fui sopesando la profundidad de esas palabras de don Aurelio. Cuando cierras los ojos y te encuentras con tu conciencia y puedes dormir tranquilo es porque realmente has logrado ser feliz con lo que estás haciendo.

- ¿Y duerme tranquilo?

- Es lo que siempre he intentado hacer, y creo que gran parte de los tweets que he puesto desde el 18 de octubre para adelante van en la memoria de don Aurelio Moreno.

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Buena entrevista. Espero que Freddy retorne en un podcast, en el mismo horario. Larga vida al Rock and Roll

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Muy buena entrevista

Buena entrevista. en la nueva constitución se deberá velar por la imparcialidad de los medios de comunicación, no podemos seguir sin regular esto. No es posible que los que tienen dinero y poder son los únicos que puedan arrogarse la voz de todo un país . Grande Freddy.

Aguante Freddy Stock..eres de los imprescindibles...

Gracias

Buena Freddy..hay que desnudar al poder, tal como lo hace Interferencia. Veamos si Antonio Quintero y el programa de la mañana se amedrentan....

Demanda por persecusion politica

estoy esperando y deseando escucharte nuevamente... Futuro no es nada, en cualquier emisora daras la nota y tendrás muchos auditores...se te extraña camino a casa, la hora que se necesita escuchar un programa agradable.

Un saludo Freddy, y hoy mas contento que nunca escuchándote nuevamente..... yo creo que la Futuro ya se dio cuenta de lo que perdió y lo que ganamos todos nosotros...GRACIAS POR TODA TU ENTREGA

Grande Freddy. Tu trabajo es un aporte a la democratización de los medios

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