Estamos donde tú estás. Síguenos en:

Facebook Youtube Twitter Spotify Instagram

Acceso suscriptores

Viernes, 19 de Abril de 2024

¿Dónde quedan la ética periodística y superioridad moral con que interpelan los "progres" como Daniel Matamala o Mónica Rincón, cuando están 2 horas al día exponiendo detalles escabrosos y causando más daño a la familia del niño asesinado? Los afectados son gente sin influencias, dinero o poder político, imposibilitados para decirle a los dueños de medios o periodistas que no escarben en su dolor (como Carlos Larraín con su hijito). Con tal que a fin de mes su cuenta corriente se llene de millones, los valores periodísticos y supuestos principios quedan a un lado para hacerles ganar plata a los patrones explotando el morbo y a costa del dolor y exposición de una familia. Así es fácil ser progre, interpelante o feminista.

En este artículo



Los Más

Ya que estás aquí, te queremos invitar a ser parte de Interferencia. Suscríbete. Gracias a lectores como tú, financiamos un periodismo libre e independiente. Te quedan artículos gratuitos este mes.

En este artículo



Los Más

Comentarios