Estamos donde tú estás. Síguenos en:

Facebook Youtube Twitter Spotify Instagram

Acceso suscriptores

Viernes, 19 de Abril de 2024
Pujante fuerza política

Chile Verde: El ascenso político de los ambientalistas en la Convención y los territorios

Camilo Solís
Francisco Velásquez

Los resultados de las últimas elecciones dieron cuenta de un creciente auge y éxito de candidatos con ideas ecologistas, como Rodrigo Mundaca, el gobernador electo de Valparaíso. Esto tiene correlato con tendencias internacionales -principalmente europeas- que plantean una alternativa verde a la izquierda tradicional. 

Admision UDEC

“Esta nueva economía debe ser ejecutada siempre pensando en la disminución del impacto negativo sobre la naturaleza y los seres humanos, considerando la gravedad del cambio climático y su impacto en la transformación del medio ambiente”, señalan los lineamientos programáticos de la Lista del Pueblo, gran triunfador en las últimas elecciones a convencionales con 27 constituyentes electos. 

“La futura Carta requiere de un enfoque ecológico, que coloque en el centro de los objetivos de la organización social, la mantención de nuestro entorno como base en la que sustenta la vida en todas sus formas. Lo anterior sólo es posible de lograr en un tránsito rápido hacia una relación de mayor armonía entre la sociedad y el medio ambiente”, dicen los principios rectores de Independientes No Neutrales, que consiguieron 11 convencionales. 

Apruebo Dignidad, conglomerado electoral que agrupa al Frente Amplio con el Partido Comunista -y que consiguió 28 constituyentes señala que “el resguardo de un medioambiente sano y el buen vivir en armonía con la naturaleza es un principio transversal en toda Constitución. El Estado chileno debe actuar coordinadamente con la comunidad internacional para abordar desafíos cruciales para la humanidad como la crisis climática, promoviendo la adopción y el respeto de acuerdos y tratados que lo protejan”. 

El auge del discurso verde, ecologista o medioambientalista es un hecho que se tomó las elecciones del pasado fin de semana, y en especial si se considera las elecciones para convencionales. Una nota de El Mostrador señala que 108 de los 155 convencionales encargados de redactar la nueva Constitución consideran “como principio democrático clave establecer el agua como un derecho humano y plantean la regulación o, directamente, el término de los derechos de aprovechamiento en manos de privados”.

El auge del discurso verde, ecologista o medioambientalista es un hecho que se tomó las elecciones del pasado fin de semana, y en especial si se considera las elecciones para convencionales.

El discurso ambientalista, además, ha tenido un auge en el último tiempo en distintas latitudes del planeta, en especial en importantes países de la Union Europea. 

Es el caso de Die Grünen, Los Verdes, partido ecologista alemán que hoy se encuentra encumbrado en las encuestas de cara a las elecciones federales a celebrarse el próximo 26 de septiembre de este año en el país europeo. Annalena Baerbock, es la candidata a Canciller por ese partido, el cual goza de una popularidad inédita considerando que se encuentra al tope en los recientes sondeos por la jefatura del Gobierno alemán superando a la CDU, el partido de la actual gobernante, Ángela Merkel. 

Algo similar ha ocurrido en Francia, considerando que las últimas elecciones municipales supusieron una dura derrota para el partido del derechista Emmanuel Macron, “La República en Marcha”, y por el contrario un éxito para el partido verde, el cual consiguió hacerse con la alcaldía de algunas ciudades principales como Marsella, Lyon, y París -esta última en alianza con la socialista Anne Hidalgo- además de las ciudades como Burdeos y Estrasburgo.

En Chile, los resultados de la constituyente parecen mostrar correlato con esta “marea verde”, la cual estuvo presente en las principales consignas durante las manifestaciones del estallido social de octubre de 2019.

Vilches y Royo, convencionales ambientalistas en la Constituyente

Sin duda, la bandera más visible del éxito ambientalista es el triunfo del líder de Movimiento de Defensa del Agua, la Tierra y la Protección del Medioambiente (Modatima), Rodrigo Mundaca, como gobernador de la Región de Valparaíso, en primera vuelta. Pero no está solo.  

Carolina Vilches fue electa como una de las 155 personas que escribirán la Constitución. Su candidatura es la consecuencia de 10 años de formar parte de Modatima . Esta mujer estudió geografía en la Universidad de Playa Ancha y es fundadora de la primera Oficina Municipal de Asuntos hídricos del país, junto con la Unión de sistemas de Agua Potable Rural cuenca río Petorca, la cual ha sido premiada en Latinoamérica, por la lucha en contra de la desprivatización del agua y el fortalecimiento de la gestión comunitaria.

Su candidatura como constituyente por el Distrito 6 concitó el 5,8% de los sufragios con un total de 19.071 votos. Las comunas a las que representa son La Ligua, Petorca, Puchuncaví, y Quintero las que se encuentran entre las llamadas zonas de sacrificio ambiental, lo que ha marcado su  liderazgo en la zona.

Uno de los principales elementos que Vilches considera deben ser trabajados desde los movimientos sociales “es pasar de concebir el tema ambiental como un problema técnico y abordarlo como tema político".

Uno de los principales ejes en la campaña de Vilches es la defensa del agua y la declaración de su acceso como derecho humano. Fue parte de esa lucha durante los últimos diez años asistiendo a exponer a cesiones en el Congreso Nacional, movilizándose junto a sus vecinos, desarrollando acciones a través de la oficina hídrica y gestionando el recurso vital junto a las organizaciones comunitarias para la distribución del agua potable rural (APR).

Uno de los principales elementos que Vilches considera deben ser trabajados desde los movimientos sociales “es pasar de concebir el tema ambiental como un problema técnico y abordarlo como tema político. Es eso lo que entendimos, que había que participar de la institucionalidad y disputar los espacios de poder y decisión, porque hay muchas que nos afectan totalmente”, señaló en conversación con INTERFERENCIA. 

“El participar en la Constitución es uno de nuestros principales objetivos para poder terminar con el abuso y la corrupción. Estoy muy feliz de hacer política desde los movimientos sociales y la autogestión con la vinculación entre comunas, tierra campesina que han sufrido muchísimo a partir del despojo y la contaminación”, explica Vilches.

Según la nueva constituyente el estallido social ha cambiado mucho la forma de hacer política y una de esas evidencias se encuentra en la capacidad de organización y convocatoria que se ha dado desde la revuelta entre las comunidades en las asambleas territoriales que no han parado de funcionar y que son las mismas que hoy han sorprendido con la cantidad de candidatos electos que representan sus intereses.

Para Vilches, los principales ejes para la discusión constituyente deberían estar enfocados en “el modelo económico que es la distribución del poder del Estado con clave territorial y dar garantías de derecho que son básicas elementales para la vida digna”.

Otra de las constituyentes ecologistas que consiguió un escaño es Manuela Royo, quien obtuvo 8.607 votos que representan un 5,30% del total en el Distrito 23 de La Araucanía. La historia de activista ambiental de esta candidata, surgen ligadas al pueblo mapuche con quienes ha trabajado como abogada en la defensa de los hermanos Catrilaf en el caso por el crimen del matrimonio Luchsinger-Mackay. Algo que debe tomarse en consideración, pues ambas causas suelen estar íntimamente ligadas en los territorios con fuerte presencia indígena.

Manuela Royo es licenciada en Historia, abogada, candidata a doctora en Derecho Constitucional y profesora universitaria; defensora de presos del estallido social y de comunidades mapuche.

Como parte de Modatima, la abogada expuso en marzo una denuncia contra el Estado chileno ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) por la contaminación y falta de acceso al agua.

Todos estos espacios de organización comunitaria son los que luego del estallido social, según Manuela Royo, tomaron sentido para la gente permitiendo que se integrará como un espacio para consolidar la acción política y transformarla en candidaturas constituyentes.  “Lo que hemos hecho los movimientos sociales y ambientalistas es construir pensamiento crítico frente al modelo establecido”.

“Lo que hemos hecho los movimientos sociales y ambientalistas es construir pensamiento crítico frente al modelo establecido”, dice Royo.

Según Royo es necesario definir dónde “ponemos el centro, creo que es súper importante limitar la función del derecho de la propiedad, límites ecológicos a la propiedad y que esto sea una nueva política tributaria donde los más ricos paguen lo que corresponde”.

La constituyente plantea que a pesar de que se ha robustecido la cantidad de autoridades que tienen una mirada ambientalista, como el recién electo gobernador Mundaca, lo más complejo en este escenario político será “asumir nuevos desafíos frente a una institucionalidad que no es ajena y que está hecha a medida de los poderosos”.

El hecho de que 108 de los 155 constituyentes tengan una mirada ambientalista y que la nueva constitución pueda tener una impronta en que se desincentive la expansión industrial y se busque transformar el modelo extractivista podría traer un desincentivo en la inversión. Frente a esto Royo plantea: “Si eso genera un desincentivo para sus industrias, me parece lamentable si pasara sería muy egoísta tenemos que pensar que hoy tenemos que dar el paso para las nuevas economías, emprendimiento, nuevos modelos de economía local los que tomen protagonismo, ya fue el tiempo de las grandes empresas en Chile para dar pie a otro modelo más sostenible y más respetuoso de las economía locales”.

Desde Max Neef hasta la verde Convención Constitucional

Pero no siempre fue así. Otros candidatos a altos cargos políticos en el pasado reciente de Chile fueron vistos como figuras excéntricas y fuera del eje político tradicional entre izquierda y derecha. Es el caso de las candidaturas presidenciales Manfred Max Neef o Sara Larraín en los 90, o Alfredo Sfeir en 2013, las que no obtuvieron resultados arrolladores.

Candidaturas como la de la abogada y activista medioambiental Manuela Royo, por el Distrito 23 -correspondiente a la región de la Araucanía- o Carolina Vilches por el Distrito 6 -correspondiente a comunas con conflictos ambientales como Petorca, Puchuncaví y Quinteros- sumado al ascenso de Rodrigo Mundaca en la gobernación de la región de Valparaíso parecen confirmar el rápido ascenso de esta corriente política. 

“El ecologismo dejó de ser la preocupación por los arbolitos. De a poco la gente está haciendo la relación, de que si no estás en un ambiente sano, con justicia ambiental, vas a tener problemas de salud, falta de agua, contaminación”, dice Nathalie Joignant en conversación con INTERFERENCIA. “En Chile estamos atrasados como 30 años. Aquí se ha visto a los ecologistas casi como hippies, pero se trata de un pensamiento mucho más avanzado que ha tenido mucho auge en Europa”, agrega. 

Joignant, aunque no consiguió la Gobernación Metropolitana, fue la candidatura revelación en esa elección, consiguiendo 390.542 votos, equivalentes al 15,19%. Corriendo por el Partido Ecologista Verde, salió tercera, superando incluso a la candidata de Chile Vamos, Catalina Parot, la que además contó con los aportes económicos más grandes para candidatos a gobernaciones con $760 millones de pesos, y a Pablo Maltés, la carta de Pamela Jiles. 

Para Joignant, el ascenso de estas fuerzas ambientalistas responde a que el perjuicio para las personas que venían denunciando los ambientalistas desde los años 90 ya se han materializado y se han hecho evidentes. “La gente vive el deterioro hídrico en carne propia. Ahí hay un hito importante que es el 2018 cuando se secó completamente la Laguna de Aculeo. Además tienes glaciares sin protección y que alimentan a las fuentes de agua que nos abastecen. El glaciar Echaurren se estaría derritiendo en 35 años si seguimos de la misma forma. La gente ha comenzado a sentir estos efectos que antes parecían más lejanos”, señala.

Joignant, aunque no consiguió la Gobernación Metropolitana, fue la candidatura revelación en esa elección, consiguiendo 390.542 votos, equivalentes al 15,19%. Corriendo por el Partido Ecologista Verde, salió tercera, superando incluso a la candidata de Chile Vamos, Catalina Parot, y a Pablo Maltés, la carta de Pamela Jiles. 

Para Joignant los principales problemas medioambientales tienen raigambre en el modelo económico imperante, el cual ha encontrado su expresión principalmente en la Constitución del 80. “Es una Constitución que privatiza y depreda los territorios, los que han sido fuertemente intervenidos, lo cual es un fenómeno global que ha sido invisibilizado por los principales intereses económicos y que de a poco ha cuajado hasta que ha hecho más sentido, como es el caso del cambio climático, algo que viene del mundo científico y que pocos niegan ahora. Esto lo corona esta pandemia, que tiene origen animal, y que se debe a la invasión del ser humano de distintos ecosistemas”, plantea. 

La candidata a la gobernación metropolitana señala que una de las preocupaciones centrales en la Constituyente debería ser la desprivatización del agua, y que esa discusión podría dar lugar a una puesta al día del Estado, y “ordenarse a lo que es la política del siglo 21 y el bien común”. 

Otra voz autorizada para hablar sobre ecologismo y su historia es Lucio Cuenca Berger, quien fue candidato a la Convención Constitucional por el Distrito 12 en las últimas elecciones. Si bien, no consiguió el escaño, conoce de cerca la lucha ambientalista desde los 90 pues cumplió con el rol de ser jefe de campaña de la candidatura presidencial de Manfred Max Neef, quien fue cuarto en la elección presidencial de 1993, superando al candidato del PC, el cura Eugenio Pizarro. 

Manfred Max Neef compitió por la Presidencia de la República en 1993, cuando compitió con candidatos como Eduardo Frei Ruiz Tagle, Arturo Alessandri Besa y José Piñera Echenique, el hermano del Presidente actual. Max Neef consiguió el 5,55% de los votos y el cuarto lugar de las preferencias en la primera candidatura ecologista de Chile en una incipiente transición democrática.

“Su candidatura fue claramente un hito del ecologismo naciente en Chile, y puso una mirada crítica en el modelo de desarrollo del país y sobre derechos socioambientales”, señala Cuenca. 

Para Cuenca el ambientalismo pasó de ser un problema local y social en los 90 a ser un tema ciudadano en los años 2000, época en que ya se habían vivido hitos en la lucha medioambiental como el conflicto por la primera represa en Alto Bio Bio o las manifestaciones por la contaminación de la minería en Huasco en los 90. Señala que comenzó paulatinamente a hablarse de “conflictos socio- ambientales” los que están cifrados hoy en día en 125 en todo el país, según el mapa de conflictos disponible en el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH).

“La gente ha peleado contra empresas enfrentando al Estado, porque se ha visto afectada en su situación de vida, pero además queda claro cómo este modelo neoliberal de desarrollo genera fuertes costos para los territorios, con la apropiación y destrucción del medioambiente. Eso lleva a darse cuenta de que son necesarios cambios estructurales en este modelo extractivista.La lucha social ha sido clave y de ahí surgen los liderazgos que marcan el escenario actual”, dice Cuenca, para luego agregar que como movimiento político solía estar relacionado con personas y agrupaciones desilusionadas de las deudas de las que no se estaba haciendo cargo la transición a la democracia de la Concertación. 

A propósito de la orgánica política de estas nuevas figuras del ambientalismo elegidas como constituyente, señala que “el proceso constituyente se abre precisamente porque la política tradicional no ha escuchado a los movimientos sociales, movimientos medioambientales, a los indígenas, al feminismo, al modelo que está precarizando la vida. Tuvo que venir el estallido social para poder visibilizar esto, y por eso el tema medioambiental pasa a ser central. Hoy no se puede pensar en una Constitución que no se haga cargo del problema medioambiental que existe”. 

“No es casual que las figuras del ambientalismo no se hayan acercado a la política tradicional, porque genera mucha desconfianza. Ahí tenemos el caso de Guido Girardi, que ha sido el adalid de este discurso desde la Concertación", dice Cuenca.

Desde el punto de vista de Cuenca, esa es la razón por la que el ambientalismo tuvo tanto éxito disperso, y no necesariamente capitalizado por el Partido Ecologista Verde. “Las listas independientes lograron capturar miradas y formas de organización que tienen que ver con el fragmentado mundo social que tenemos. El estallido nos pilla en un momento débil en lo organizacional, pero así hemos tenido que ir construyendo esto. Eso tiene sus cosas positivas y negativas, pero pienso que hay que saber ver el valor que puede tener esto”, señala. 

“No es casual que las figuras del ambientalismo no se hayan acercado a la política tradicional, porque genera mucha desconfianza. Ahí tenemos el caso de Guido Girardi, que ha sido el adalid de este discurso desde la Concertación. Pero en la práctica hemos tenido que luchar contra las ideas impulsadas por ese sector político. Eso lo han hecho solo para legitimar sus partidos y sin ningún interés real por estas problemáticas”, señaló Cuenca. 

En este artículo



Los Más

Ya que estás aquí, te queremos invitar a ser parte de Interferencia. Suscríbete. Gracias a lectores como tú, financiamos un periodismo libre e independiente. Te quedan artículos gratuitos este mes.

En este artículo



Los Más

Comentarios

Comentarios

Añadir nuevo comentario