En medio de los denodados esfuerzos de la derecha cultural y política por connotar la memoria del golpe de Estado, en su 50 aniversario, como una salida inevitable al drama de la Unidad Popular, aparecen muchas señales, desde muy adentro de la memoria colectiva, que con porfía recuerdan que lo único verdaderamente trágico posible en estos hechos es la injustificable y masiva violación de los derechos humanos por parte de la dictadura, siendo la desaparición masiva de personas, su aspecto más cruel e inverosímil.
Ante eso, todo lo demás se achica y enmudece.
El Baile de los Cisnes es una de esas señales. En este documental, Daniel Miranda, su director, aborda la historia de Violeta Zúñiga, la esposa de Pedro Silva, quien un 8 de agosto de 1976 dejó de ver a su marido para siempre, cuyo paradero se desconoce hasta hoy, habiendo sido visto por última vez en el centro de detención y tortura de Villa Grimaldi, en Santiago.
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A partir de una notable narración que entreteje la historia de Zúñiga -contada por ella misma de manera cronológica- con el brillante registro fotográfico de su vida, poco a poco va emergiendo ella, desde su papel de mujer popular, comunista, viuda y víctima de la dictadura, hacia el de la artista, improbable, en que se convirtió, tal vez sin haberse dado cuenta tanto, siendo uno de los íconos culturales y artísticos más potentes que hayan surgido en Chile: la mujer que baila la cueca sola.
Poco a poco va emergiendo ella, desde su papel de mujer popular, comunista, viuda y víctima de la dictadura, hacia el de la artista, improbable, en que se convirtió, tal vez sin haberse dado cuenta tanto, siendo uno de los íconos culturales y artísticos más potentes que hayan surgido en Chile: la mujer que baila la cueca sola.
La cueca sola es el resultado artístico del proceso de búsqueda de verdad y justicia que emprendieron muchas, principalmente, mujeres, familiares de detenidos desaparecidos, a lo largo de todas las décadas de estos 50 años.
En algún momento, agrupadas por el talento en el folklore o las meras ganas de expresar su complejo dolor y su decisión vital de dedicarse a quienes desaparecieron, inventaron este dispositivo, en el cual algunas componen y tocan cuecas alusivas a sus seres queridos, brutalmente arrebatados, y otras las bailan, sin estos seres queridos. Con esto, el amor, la ausencia, la tenacidad y la dignidad, crean un ícono único, que reverbera mucho más allá de Chile. En la danza, probablemente es lo más potente, hasta la llegada de Las Tesis en el estallido social.
El Baile de los Cisnes hace así homenaje a esta danza, al ofrecer la metáfora de estas aves que cantan y se alejan en solitario si es que muere su pareja. "Además de la metáfora hay algo con la paleta de colores, pues los cisnes de cuello negro, que son tan representativos de nuestro país, tienen el blanco y el negro, que son también los colores que usaban los familiares de detenidos desaparecidos, con la camisa blanca y la falda negra", explica Miranda a Interferencia.
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Otra virtud del documental es que se atreve a hacer preguntas que podrían resultar incómodas, pero que al hacerlas con delicadeza permiten que emerja Violeta Zúñiga, la mujer y el sujeto, quien se refiere a su soledad, a la imposibilidad social y personal de volver a emparejarse, donde insinúa el dilema del sexo de una mujer viuda que busca por décadas a su marido, y que sueña todavía con él, aunque no lo alcanza o le da la espalda. La conversación también transita así por el sentido de la vida y de la tristeza y el sufrimiento, desde donde emerge una ternura digna, tal vez la misma, pero más íntima, que el de la cueca sola.
"Hay una gran reflexión en torno a la demora de la Justicia y también un gran escepticismo. Somos nosotros, los hijos y los nietos, familiares o no, los que vamos a tener que continuar esta lucha, más allá de lo que haga el Gobierno, porque, como dice el concepto de impunidad biológica, los familiares, pero también los represores, los asesinos y los cobardes, están muriendo, o suicidándose, como pasó esta semana. Violeta dice 'espero que sigan bailando', esa es la posta que ella a mi me entregó", reflexiona Miranda.
El registro fotográfico al que accedió Miranda -quien se ha dedicado a la creación audiovisual vinculada a memoria- es otro gran mérito del documental. Mediante este, la historia de Violeta Zúñiga agarra textura, profundidad y matices, pues buena parte de la conversación transcurre revisando fotos viejas y no tan viejas. "Esto tiene que ver también con la importancia de la fotografía en la lucha de derechos humanos, porque poner en el pecho la foto de un ser querido, es una forma de traerlo en ausencia. También es una puesta en escena, yo le pedí a Violeta que dispusiera un mar de fotografías, y ahí es donde aparecen los recuerdos y aparece Pedro. Es un ejercicio de memoria que dice que siempre va a estar presente, que nunca va a estar olvidado", dice.
Estas fotos, además dan cuenta del paso de los años, y cómo el tiempo y las vivencias van marcando su cuerpo, el cual bailó en las cinco décadas de estos 50 años.
"Hay una gran reflexión en torno a la demora de la Justicia y también un gran escepticismo. Somos nosotros, los hijos y los nietos, familiares o no, los que vamos a tener que continuar esta lucha, más allá de lo que haga el Gobierno, porque, como dice el concepto de impunidad biológica, los familiares, pero también los represores, los asesinos y los cobardes, están muriendo, o suicidándose, como pasó esta semana. Violeta dice 'espero que sigan bailando', esa es la posta que ella a mi me entregó", reflexiona Miranda en conversación con Interferencia.
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Miranda sera conferencista en el Congreso de los 40 años del retorno de la democracia en Argentina, a fines de septiembre.
De momento, el filme se exhibirá en los actos de conmemoración de los 50 años en Recoleta, en el microcine Carmen Bueno, donde será estrenada este martes 5 de septiembre a las 11.00 am. También el documental irá a Ancud, donde se exhibirá este sábado 9 de septiembre, y en México será exhibido por Canal 22, la señal pública del país, la que también llega a Estados Unidos.
Luego, El Baile de los Cisnes recorrerá distintos circuitos de festivales.
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Comentarios
Mmmm, y bueno que bueno que
Mi opinión y de muchos
Ellos, los detenidos
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