Estamos donde tú estás. Síguenos en:

Facebook Youtube Twitter Spotify Instagram

Acceso suscriptores

Domingo, 17 de Agosto de 2025
Silencio en Roma

Abuso de poder y manipulación: Víctima de monjas Clarisas Capuchinas demandó por $400 millones a Diócesis de Villarrica

Jorge Molina Sanhueza

La acción legal fue interpuesta por el abogado Juan Pablo Hermosilla, ante la Corte de Apelaciones de Temuco, en favor de una mujer, quien fue parte de la orden desde 2003 hasta 2020. En la presentación, detalla cómo una de las superioras la manipuló con una “cultura abusiva”, que derivó en un deteriorado estado de salud, físico y mental.

Una demanda por $400 millones de pesos por daño moral, presentó el abogado Juan Pablo Hermosilla en contra de la Diócesis de Villarrica, Región de Araucanía, de donde dependen las monjas Clarisas Capuchinas.

La acción legal fue interpuesta ante la Corte de Apelaciones de Temuco, en favor de una mujer (cuya identidad este medio se reserva), quien fue parte de la orden desde 2003 hasta 2020.

En el libelo, la mujer acusa que durante su internado en el Monasterio Santa Clara, ubicado en Pucón, sufrió maltrato profundo de las superioras, a través de “culturas abusivas”, derivando en un deteriorado estado de salud, físico y mental.

“Deja de llorar”

En su relato, la demandante apunta a sor Verónica, actual presidenta de la orden para el conosur. Esta última, de acuerdo a su versión, habría logrado manipularla hasta el punto de soportar el dolor de problemas de salud. De hecho, por una de las varias afecciones, debió ser operada de urgencia.

“A veces los dolores eran tan fuertes que sentía que me volvía loca, entonces llamaba al doctor para preguntarle si podía tomar (un) medicamento y él me daba la autorización. Cuando sor Verónica se enteraba de esto me retaba y me decía que yo tenía engañado al doctor, que él se ablandaba conmigo y terminaba haciendo cosas que no debía, como (...) darme permiso para tomar (...) medicamentos”, detalló en la demanda de 36 fojas a la que accedió Interferencia.

La víctima, fue sometida a una segunda operación en un órgano estomacal, cuya convalecencia la pasó en el monasterio mencionado. Sor Verónica habría tenido la misma conducta.

“Recuerdo una vez que me pasé toda la noche llamándola para que me ayudara (...) y no me contestó, entonces sin poderme ni vestir me puse una bata y me arrastré hasta el coro donde estaban rezando para pedirle que me ayudara, pero ella solo me miró y no se movió”, relató. 

La demanda entrega mayores detalles: “Llegó horas más tarde a mi habitación y comenzó a gritarme: “deja de llorar” (yo lloraba del dolor, (...) y mientras intentaba pegarme la (...)  me gritó: “¡cállate, deja de llorar y dile a tu tripa que deje de botar (...), pero eso era imposible y ella lo sabía, ya que cuando se tiene una (...) no se puede controlar la (...)”.

Los vínculos

La víctima denunció este y otros hechos en 2021 a la curia general de Roma, principalmente al Dicasterio para la Vida Religiosa de la Sede Apostólica y -detalla- nunca habría recibido una respuesta formal, aún cuando se realizó un extenso y detallado informe, luego de una visita “federal” ordenada desde el Vaticano.

La demanda en cuestión es tramitada actualmente por el ministro de fuero del tribunal de alzada de Temuco,  José Marinello, quien debe notificar al jefe de la Diócesis de Villarrica, Francisco Javier Stegmeier Schmidlin. 

El aludido es hermano de José Miguel Stegmeier Schmidlin, quien operó la red de sociedades clandestinas de la Colonia Dignidad y que -mediante el lavado de dinero, incluso en paraísos fiscales- permitieron financiar la estadía en Paul Schäfer cuando estuvo fugado en Argentina.

Pese a todos los datos, fue nombrado gobernador a poco de asumir el primer gobierno de Sebastián Piñera, pero después de una crónica publicada por El Mostrador su designación fue revocada.

Aún cuando la fallida autoridad aseguró que jamás tuvo relaciones con el enclave alemán, un reportaje de Ciper, reveló todo lo contrario.

En este artículo



Los Más

Ya que estás aquí, te queremos invitar a ser parte de Interferencia. Suscríbete. Gracias a lectores como tú, financiamos un periodismo libre e independiente. Te quedan artículos gratuitos este mes.

En este artículo



Los Más

Comentarios

Comentarios

El nombre de la demandante es Carolina Soto, ex monja maría Antonieta de la Preciosa Sange. Mujer manipuladora, mentirosa y abusadora. Laa clarisas la trataron con guante de seda, porque llegó muy herida por una situación muy irregular en su familia: un hermanovenfermo, un padre abusador y pederasta ( tiene una media hermana producto de la fornicación de su padre con una hija de adopción. Por la relación afectiva neurótica con su padre, es que provino su enfermedad. No fueron las monjas.

Ya que usted aporta el supuesto nombre de la víctima, seamos equitativos y aportemos el suyo, Hernán Prat Huerta, que quizá a muchos lectores no les diga nada, pero para que todo el mundo lo sepa ¡Es un cura! Si ya la mayoría de la gente tenemos poca fe en la iglesia católica (sí, con minúsculas), hechos vergonzosos como lo que acaba de hacer usted, no hacen sino refrendar esa animadversión por su organización. ¿Cómo puede un supuesto representante de Dios decir las cosas que usted dice? Desde luego, no hay más que ver sus videos en internet para saber el personaje que es. Esa malicia de la que usted habla en alguno de ellos es lo que usted muestra en sus palabras, habladas y escritas, de las cuales me quedan claras varias cosas. La primera, que estoy seguro de que aplica usted aquello de “miente, miente que algo queda”, al más puro estilo Goebbles. ¡Qué vergüenza! Y, por otro lado, su escrito destila despecho por todas partes. ¿No será que dicha monja no sucumbió a “sus encantos” en el pasado no consiguiendo usted su propósito? Porque no se conoce a la susodicha, pero de usted son de sobra conocidos sus múltiples devaneos sexuales… Y, por último, aunque fuese verdad lo que usted esputa sobre su familia, que desde ya pongo en duda, ¿acaso es usted culpable de los pecados de sus padres? Esta es la iglesia que tenemos, señores: curas pederastas (se cree el ladrón que todos son de su condición), machistas, viviendo vidas rodeadas de lujos, lanzando injurias a hermanos suyos gratuitamente… ¡Qué vergüenza! No sé si esta señora y/o sus padres le demandarán por esto, espero que sí. Pero lo que sí sé es que no se librará usted del Juicio Divino cuando le llegue el momento. No se piense usted, como muchos de sus compinches, que por llevar el alzacuellos se librará de rendir cuentas.

San Agustín dijo: Ama y haz lo que quieras. Evidentemente yo no puedo hacerlo, porque no amo. A raiz de lo publicado anteriormente, mis superiores me han hecho ver el tremendo pecado que he cometido y he caído en cuenta del daño que he hecho por hablar sin medir mis palabras. Pido perdón a la familia Soto, en primer lugar, y a toda la Iglesia, pues por mi actitud también los he dañado, tanto a fieles como a consagrados. Aunque sé con certeza que hay sobre mi una elección de Dios, y aunque llevo cuarenta años en la iglesia, no me atrevo a llamarme cristiano, y el hombre justiciero e inconverso aflora cada tanto y hace daño. Espero que entiendan que esto es exclusivamente responsabilidad mía y que no es lo que la Santa Madre Iglesia me ha inculcado. La Iglesia está conformada por seres humanos, en vías de conversión. Unos son más avanzados y otros, como yo, más duros de convertir. Nuevamente pido perdón a ustedes y que Dios tenga compasión de mi.

Alejandro: Tiene usted toda la razón. He sido un infame, y he despreciado el amor y la misericordia que Dios ha tenido Conmigo. No merezco usar el alza cuello, como usted lo llama. He escrito una disculpa, que no han publicado, pero que se la transcribo, por si esta se publica. San Agustín dijo: Ama y haz lo que quieras. Evidentemente yo no puedo hacerlo, porque no amo. A raíz de lo publicado anteriormente, mis superiores me han hecho ver el tremendo pecado que he cometido y he caído en cuenta del daño que he hecho por hablar sin medir mis palabras. Pido perdón a la familia Soto, en primer lugar, y a toda la Iglesia, pues por mi actitud también los he dañado, tanto a fieles como a consagrados. Aunque sé con certeza que hay sobre mi una elección de Dios, y aunque llevo cuarenta años en la iglesia, no me atrevo a llamarme cristiano, y el hombre justiciero e inconverso aflora cada tanto y hace daño. Espero que entiendan que esto es exclusivamente responsabilidad mía y que no es lo que la Santa Madre Iglesia me ha inculcado. La Iglesia está conformada por seres humanos, en vías de conversión. Unos son más avanzados y otros, como yo, más duros de convertir. Nuevamente pido perdón a ustedes y que Dios tenga compasión de mi y me perdone.

estimados me parese sinpatico que discutan sobre lo que no saben, yo ingrese junto con carolina el 2003 y dejando aparte lo que paso con su papa, ella es una persona manipuladora se queja porque vivió lo que ella me hizo vivir a mi durante 10 años en los que estuve en el monasterio, para mi ella fue un error de las hermanas nunca tuvo vocación, lloro un mes después del ingreso porque no quería ser monja, no sele podía decir nada pues saltaba, incluso yo la vi y escuche ser violenta con las hermanas mayores hablo de verla gritonear a sor María Regina, sor Inés, sor Pía incluso como manipulaba a nuestra maestra Sor verónica para que actuara según sus caprichos, es una mujer mala la carolina , yo gracias a ella conocí la maldad y si viviera en Villarrica testificaría en su contra pues a ella de debo haber tenido que salir por su violencia conmigo y como ella manipulo a las hermanas para que la dejaran ser.

Añadir nuevo comentario