“Histórico triunfo de @jmilei en las PASO. Desde Chile, todo el apoyo para la dura contienda que viene hacia adelante”, tuiteó ayer José Antonio Kast. La derecha radical festejó en el cono sur con el triunfo del economista libertario, Javier Milei, en las primarias presidenciales argentinas, quien tuvo la mayor votación del país. El mandato de Bolsonaro en Brasil, la segunda vuelta presidencial de Kast en Chile y ahora el triunfo de Milei confirman el auge de la ultra en Latinoamérica; en desmedro de la derecha tradicional y la izquierda progresista.
Milei –quien corrió como candidato único de su coalición, La Libertad Avanza– obtuvo un 30,4% de las preferencias, dos puntos más que lo obtenido por la oposición, Juntos por el Cambio, y tres más que la coalición oficialista, Unión por la Patria.
De trasladarse la mayoría de La Libertad Avanza a la próxima elección presidencial del 22 de octubre, eventualmente se podría forzar una alianza tácita inédita entre quien quiera que llegue a segunda vuelta con el polémico libertario.
El avance de Milei reconfigura la política argentina, donde kirchnerismo y macrismo han sido los dos grandes actores en el escenario de los últimos años. De trasladarse la mayoría de La Libertad Avanza a la próxima elección presidencial del 22 de octubre, eventualmente, se podría forzar una alianza tácita inédita entre quien quiera que llegue a segunda vuelta, con el polémico libertario; quien se autodenomina “anarcocapitalista” y busca bajo su programa de gobierno cortar con los derechos sociales al considerar que “el Estado solo debe estar a cargo de la seguridad y la justicia”.
A pesar de quedar en tercer lugar detrás de la ultra-derecha y el macrismo, el peronismo pareciera no haber tenido un resultado tan negativo a la luz del complicado momento que vive como Gobierno. Con una inflación interanual del 115,6%, una pobreza que alcanza el 40% de la población y la desaprobación del presidente Alberto Fernández en un 66% –quien desistió de buscar una reelección–; Sergio Massa, el ministro de Economía trasandino, obtuvo un 21,3% de las preferencias, ganándole al abogado Juan Grabois (5,76%) y consagrándose como la carta presidencial de Unión por la Patria para la elección del 22 de octubre.
Massa es el segundo candidato más votado, aunque el 27% obtenido por la coalición entre sus dos candidatos es su peor resultado en décadas. “Se ha disputado el primer tiempo. Nos quedan el segundo tiempo, el alargue y los penales”, comentó anoche una vez conocidos los resultados.
En cuanto a la irrupción de Milei como una verdadera posibilidad para llegar a la Casa Rosada, el ministro indicó que existe “un nuevo escenario en la política, no porque haya nacido una nueva fuerza, sino porque se ha dividido el escenario electoral en tercios".
Ahora, Bullrich buscará asegurar que los votos de Larreta no pasen al fenómeno Milei y llegar a una segunda vuelta en noviembre que enfrente a la derecha tradicional con la radical.
El otro tercio, Juntos por el Cambio, es posiblemente el mayor derrotado de la jornada. A pesar de ser la segunda coalición más votada, con 28,5% de las preferencias, el macrismo vio liquidadas sus opciones de pactar con Milei algún apoyo para octubre, quien sacó 13 puntos de distancia a Patricia Bullrich (17%), la ganadora de la primaria en la derecha. La ex ministra de Seguridad será la carta presidencial de Juntos por el Cambio, al imponerse sobre el gobernador de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, quien obtuvo el 11,2% de las preferencias.
Ahora, Bullrich buscará asegurar que los votos de Larreta no pasen al fenómeno Milei y llegar a una segunda vuelta en noviembre que enfrente a la derecha tradicional con la radical. “Si estuviéramos en un país normal estaríamos festejando la elección pero no estamos en un país normal, […]. Los argentinos vivimos con angustia, con miedo, sin poder sentir, sin poder soñar, sin poder proyectar. Nos han dado la oportunidad de poder liderar un cambio profundo en la Argentina”, expresó ayer la candidata de Juntos por el Cambio.
Fue la PASO con mayor abstención desde su instauración en 2011, alcanzando un 69% del padrón de 35 millones de argentinos habilitados para votar. Son 11 millones de personas las que decidieron no votar, un número considerable de desencantados con la política que las tres fuerzas a medirse en octubre buscarán convencer durante estos dos meses.
Otro actor importante fue la abstención. Fue la PASO (Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias) con mayor abstención desde su instauración en 2011, alcanzando un 69% del padrón de 35 millones de argentinos habilitados para votar. Son 11 millones de personas las que decidieron no votar, un número considerable de desencantados con la política que las tres fuerzas a medirse en octubre buscarán convencer durante estos dos meses.
Comentarios
Añadir nuevo comentario