La segunda rueda del campeonato nacional de Primera División sigue su curso, mientras los equipos se refuerzan aprovechando el mercado de pases de invierno. Así también, otros tantos futbolistas vuelven de sus préstamos por media temporada a sus equipos de origen. Esos son los casos de César Huanca, Cristopher Barrera y Felipe Yáñez, que regresaron a Coquimbo Unido desde Huachipato, Curicó y Colo Colo, respectivamente.
Pero, además de volver de un préstamo, a estos jugadores los une otra característica en común: todos son representados por Mundo Futuro Chile.
No se trata de casos aislados, desde 2015 que Coquimbo Unido tiene una tónica fuera de la cancha que marca su funcionamiento: las contrataciones sistemáticas y mayoritarias de jugadores representados por Mundo Futuro, empresa de Sergio Morales Durán, quien hasta 2022 fuera director del cuadro pirata.
Según cifras de Transfermarkt, actualmente Mundo Futuro representa a 72 jugadores en diferentes divisiones del fútbol chileno. De esos 72 futbolistas, un total de 40 pasaron en algún momento de su carrera por Coquimbo Unido, más específicamente entre 2015 y 2022, años en los que Sergio Morales fue director del club.
Durante la presente temporada, 14 jugadores del plantel de Coquimbo son manejados por Morales, de los cuales 9 llegaron en el mercado de pases del verano. Otros tres volvieron de sus préstamos respectivos durante el mercado de pases de invierno y, los dos restantes quedan de la temporada pasada.
Asimismo, durante 2023 Mundo Futuro movió otros 7 jugadores de su representación desde Coquimbo Unido hacia otros equipos del fútbol chileno. Un control solo comparable con el de Fernando Felicevich en Huachipato y La Serena, y que fue detallado por Interferencia en el reportaje Mapa de pases 2023: clubes ligados a Felicevich, Bragarnik y Pachuca traspasaron entre sí 39 jugadores.
Durante los últimos ocho años los Morales han tenido la conducción completa de Coquimbo Unido, dirección del club, gerencia general y la representación de sus jugadores.
Pero, ¿cómo Sergio Morales llegó a ser director y representante en Coquimbo Unido?
El archivo de prensa deportiva lo señala como “un accionista que ingresó al club coquimbano en 2015”. Sin embargo, eso no es del todo cierto, pues Morales nunca manejó acciones de la empresa que lo nombró como director en 2015, Inversiones Villarreal.
En realidad, como accionistas de Asesorías e Inversiones Villarreal Limitada figuran la madre de los hijos de Morales, Katherine Villarreal Ravello y su hermana, Jocelyn Villarreal, con un 34% y 33% de la propiedad. El otro porcentaje de la sociedad lo tiene Nicole Morales Santa María, hija de Morales con María Soledad Santa María.
De este modo, Morales llegó a ser director de Coquimbo sin poseer propiedad directa en el club, al mismo tiempo que manejaba a los jugadores que iban y venían por la institución. De la misma forma entró a la gerencia general del club su hijo, Pablo Morales Pérez, con sólo 27 años en 2016, cargo en el que se mantiene hasta hoy.
Memoria anual Coquimbo Unido SADP 2022.
Vale decir, durante los últimos ocho años los Morales han tenido la conducción completa de Coquimbo Unido, dirección del club, gerencia general y representación de sus jugadores.
Coquimbanos por Siempre
Ahora bien, la historia de Coquimbo no parte con Sergio Morales, pero sí que ha logrado mezclarse con sus antiguos dueños hasta el punto de mimetizarse con ellos y mantenerlos en el club a través de la sociedad que mantiene la madre de sus hijos.
En esta línea, en 2016, junto a Morales, Inversiones Villarreal nombró como director en el club a Claudio Morales Araya, hermano del presidente de Coquimbo Unido, Jorge Contador Araya, ex consejero regional por Renovación Nacional entre 1993 y 2010, y secretario general de la Asociación Nacional de Fútbol Chileno (ANFP) durante la gestión de Harold Mayne-Nicholls.
Cabe señalar que Claudio Contador era director de Coquimbo antes de la llegada de Morales e Inversiones Villarreal, esto a través de la Corporación Coquimbo Unido, que por esos años tenía un 69,15% de la propiedad del equipo.
No obstante, esa propiedad se redujo al 28,55% en la memoria anual de 2016, cuando ingresó a la propiedad del club Inversiones Villarreal, con el 22,19%, y la sociedad Coquimbanos por Siempre, con el mismo porcentaje de participación.
Lo curioso es que Coquimbanos por Siempre fue constituida por los mismos directores de la Corporación Coquimbo Unido, en agosto de 2015, bajo la certificación de la notaría de Miguel Bauzá Fredes (RN), quien por entonces era director del club, además de ex presidente de la ANFP. A nivel político, Bauzá Fredes fue seremi de Justicia durante la dictadura militar y consejero regional de Coquimbo entre 2010 y 2013, cuando asumió en reemplazo de Jorge Contador.
Accionistas de Coquimbo Unido SADP, según su memoria anual de 2022.
Ahora bien, según consta en el Diario Oficial, Coquimbanos por Siempre SpA fue constituída por el entonces presidente de Coquimbo, Fernando Sánchez y por Jorge Contador, cuyo hermano, Claudio, ya figuraba como director; Ricardo Larraguibel; Hugo Llewellyn; Raúl Isaac Humeres Barraza; Ricardo Sánchez Medina; Patricio Javier Araya Campaña; José Guerrero Muñoz y Claudio Contador Pierotic, hijo de Claudio Contador Araya.
Con un capital de $151 millones, el objeto de la sociedad se destinó a “comprar acciones de sociedades anónimas deportivas”. De ahí que la transformación del club a nivel accionario cambiase en 2016, pero mantuviera a los rostros históricos que han conducido al cuadro pirata los últimos 25 años.
En 2015 ingresó a Asesorías Deportivas Los Piratas, sociedad de Katherine Villarreal, accionista de Coquimbo, y de Alejandro Soffia, socio de Morales en Mundo Futuro, el entonces presidente de Cobreloa, Augusto González. Esto en la misma semana en que la ANFP lo sancionó por un año por faltas a la ética.
Sale Morales, pero queda Morales
A pesar del ascenso de Coquimbo a primera división en 2018 y 2021 y de una buena campaña en la Copa Sudamericana 2020, desde su llegada que la gestión de los Morales en el club de la cuarta región ha sido criticada por su falta de relación con la hinchada y el medio. Por ello, en septiembre de 2022, Morales anunció su salida de la dirección del club.
Según declaró a El Día su asesor y actual gerente deportivo del elenco pirata, Pablo Ramírez, la salida de Morales se dio por “un agotamiento personal, producto de que no se reconocen los avances que ha tenido Coquimbo Unido, y que por lo mismo, tomó la decisión de salir de la primera línea de Coquimbo y hacer su retirada”, afirma el diario provincial.
Infografía "El cartel del gol".
En reemplazo de Morales, ingresó como director Eduardo Crovetto, ex presidente del club y director hasta 2016, cuando participaba en nombre de la Corporación Coquimbo Unido. Es decir, otro director histórico que, como Claudio Araya, regresa a Coquimbo por gracia de Morales.
De todas formas, la presencia de Morales se seguirá haciendo sentir en el cuadro aurinegro a través de sus representados y su familia aún presente en la administración del club.
Mundo Futuro, Cobreloa y Gilabert
Para dimensionar el poder de Mundo Futuro se puede ver cómo, tras su salida de Coquimbo, corrió la noticia de que la empresa de Morales había desplazado a Fernando Felicevich como la novena agencia de representación que más transferencias realizó durante enero de 2023. Según registros de Transfermarkt, Morales movió 32 jugadores, mientras que Felicevich, dueño de la agencia Vibra Fútbol, realizó 27 en el mismo periodo.
Morales ha extendido su influencia hacia Audax, donde representa ocho jugadores y comparte la propiedad de su centro de entrenamiento, el Ciudad de Campeones.
Ahora bien, la historia de Mundo Futuro comienza en 2013 con su constitución como sociedad comercial. Como primeros accionistas figuran Sergio Morales con un 70% y Alejandro Soffia con un 30%. En años posteriores, Soffia ingresaría a diversas sociedades creadas a nombre de Katherine Villarreal, con quien Morales comparte una hija, siempre con el objeto comercial de asesorías deportivas.
Una de estas empresas es Asesorías e Inversiones Deportivas Villarreal Limitada, constituída en agosto de 2015 y cuyo nombre de fantasía es “Asesorías Deportivas Los Piratas”.
En el registro público consta que hasta noviembre de 2015 sus accionistas eran Katherine Villarreal y Alejandro Soffia. Pero, sorpresivamente, ese mes el entonces presidente de Cobreloa, Augusto González Aguirre, compró un 48% de la participación. Esto en la misma semana en que el tribunal de honor de la ANFP lo sancionó por un año por faltas a la ética.
Es más, González Aguirre era el representante legal del club loíno desde 2006, año en que constituyó la sociedad anónima deportiva para controlar Cobreloa.
Sin embargo, no hay más datos que arrojen información sobre el uso o la operatividad de Asesorías deportivas Los Piratas tras el ingreso de Augusto González, quien ese mismo año salió de la presidencia de Cobreloa tras cumplirse el fallo de la junta de accionistas que lo tenía por destituido desde mayo de 2015.
En la misma línea de sociedades cuya operación no pudo ser comprobada se encuentra Cleaning Heights Limitada, luego renombrada como Constructora G&S por las iniciales de los apellidos de sus accionistas. La S por Alejandro Soffia y la G por Pablo Gilabert, hermano del árbitro del fútbol chileno, Francisco Gilabert.
No obstante, la sociedad no reporta movimientos desde agosto de 2016.
Ahora bien, volviendo a Soffia, este se retiró de Mundo Futuro en enero 2019, entregando su porcentaje de la agencia de representación a una sociedad inmobiliaria de Morales que, en enero de 2022, cedió sus derechos a Gastón González Pezola.
Pero a González Pezola no le duró demasiado su paquete accionario, ya que en julio de 2022 le cedió el 20% a Sergio Morales y el 10% restante a su hija, Isabel Morales Villarreal, de 20 años.
Por su parte, González Pezola anunció que se retiraba de Mundo Futuro el 26 de julio pasado, pues ahora administrará su agencia de representación, llamada Revival Football.
En un comunicado público, el ex socio de Morales dejó en claro que su nueva agencia heredará los futbolistas representados de Mundo Futuro que se desempeñan actualmente en México, entre ellos Ignacio Jeraldino (ex Coquimbo), Diego Valdés (ex Audax) y Joaquín Montecinos (ex Audax).
¿Todos quieren jugar en Audax?
Algo que han demostrado los representantes ligados al control de clubes, es que no puedes poner todos los huevos en la misma canasta. Por ello, Christian Bragarnik ha extendido sus injerencias por Unión La Calera, San Luis y Fernández Vial, además de Audax Italiano, donde también tiene su juego Fernando Felicevich, quien ha sido acusado de controlar La Serena, manejar la plantilla de Huachipato a su antojo y tener parte de la propiedad del fondo de inversión que hoy controla la Universidad de Chile.
Por su parte, Sergio Morales con Mundo Futuro también ha conseguido extender su influencia hacia Audax Italiano, donde representa ocho jugadores en la presente temporada, además de Palestino y Colo Colo, con ocho y siete futbolistas bajo su manejo.
El caso más interesante de su influencia está en Audax, donde llegó a representar 17 jugadores en 2020. Según registros de prensa, durante 2022 se le vinculó estrechamente como asesor de la familia Antillo, entonces propietaria del club audino que estaba pronto a vender.
Las críticas se profundizaron cuando Lorenzo Antillo, cabeza de la familia, se postuló a presidente de la ANFP. En seguida, Antillo tuvo que salir al paso, afirmando que su relación con el dueño de Mundo Futuro era la de un mero asesor de su gestión y no copropietario del club, además de mantener con él una amistad.
De todas formas, según Radio ADN, Morales sería, en parte, dueño del complejo deportivo Ciudad de Campeones, ubicado en Puente Alto, y donde entrena Audax junto a Lorenzo Antillo. Sin embargo, los nuevos dueños del club -vinculados tanto a Fernando Felicevich como Christian Bragarnik- optaron por no comprar el complejo, lo que dejó en entredicho la continuidad de Morales en la nueva administración del club itálico.
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Cómo puedo que me vean. Un
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