La presión sobre Miguel Crispi (RD) no ha dejado de crecer durante estos últimos días. Él es el protagonista político de la semana, no por sus palabras, sino precisamente por lo contrario: los silencios.
Esto, pues para muchos Crispi es una de las figuras clave para conocer en qué momento el presidente Gabriel Boric (CS) se enteró del caso Democracia Viva, antes de que fuera conocido de forma pública.
A poco más de cuatro meses de destaparse el caso, semana tras semana, las versiones sobre quién sabía y quién no, han sido cambiantes y han hecho de la trama un terreno fértil para las dudas y las especulaciones. De hecho, el senador Juan Ignacio Latorre (RD) se negó a responder -en dos oportunidades- si había hablado con Crispi sobre la información que conoció antes de que apareciera el oficio que hizo público el caso.
Pero lo que llevó a Crispi a ser el centro del debate político actual fue la negativa en dos oportunidades a asistir a la Comisión Investigadora de la Cámara sobre las transferencias de dinero a fundaciones. La primera vez simplemente se excusó y la segunda envió adjunta a la excusa una respuesta por escrito sobre el rol que tuvo como subsecretario de Desarrollo Regional en las transferencias a la Fundación ProCultura.
"Recordemos que inclusive el presidente Gabriel Boric, en una declaración intentando explicar cuándo se enteró, las fechas no calzaron y hubo que prácticamente traducir lo que quiso decir el presidente, por lo que se entiende que el señor Crispi tenía información y nosotros lo que necesitamos es saber cuándo lo supo, cómo lo supo y a quién le informó, porque aquí cabe la duda, siendo tan cercano del presidente, si tenía información y se le ocultó".
Sin embargo, el verdadero interés es conocer su versión como jefe de Asesores. Por lo pronto, el Gobierno se jugó un par de cartuchos en salvar a Crispi de declarar en la Comisión y el ministro de Justicia, Luis Cordero (cercano a Socialismo Democrático), apeló a que al recibir honorarios y no ser un trabajador a contrata no aplicaba como funcionario público y por consiguiente no debía asistir a la Comisión pues escapaba de la jurisdicción del Congreso.
La Contraloría dio un portazo a la interpretación del Gobierno y el contralor Jorge Bermúdez afirmó que debía asistir, incluso, mediante dictamen del servicio. Con todo, Crispi podría responder positivamente a una tercera citación por parte de la Comisión encargada, pero ahora con una presión absoluta.
Interferencia entrevistó a la diputada Yovana Ahumada (Ind.), quien integra la Comisión y además fue quien, a través de su oficio, destapó el caso Democracia Viva. "Si es que él viene a declarar solo como subdere me generaría aún más dudas, puesto que se entendería que no quiere hablar de Democracia Viva, y me confirmaría la tesis de que no hay un relato verdadero ni único, y por tanto, se teme que diga algo que provoque darnos cuenta de que hubo información que no se entregó", dice Ahumada.
- ¿Cuál es el interés de citar a Miguel Crispi a la Comisión Investigadora del Caso Convenios?
- Las razones para escuchar al señor Miguel Crispi se fundamentan en que cuando partió el caso Democracia Viva, entre las figuras que aparecieron públicamente dando cuenta de la información que tenían, eran personas cercanas al caso dado el vínculo con Revolución Democrática. Lo hizo el senador Juan Ignacio Latorre, lo hizo el exministro Giorgio Jackson y obviamente el señor Crispi es cercano a esta cúpula.
Y quedó la duda instalada de cuándo y cómo se enteraron del caso en La Moneda. Recordemos que inclusive el presidente Gabriel Boric, en una declaración intentando explicar cuándo se enteró, las fechas no calzaron y hubo que prácticamente traducir lo que quiso decir el presidente, por lo que se entiende que el señor Crispi tenía información y nosotros lo que necesitamos es saber cuándo lo supo, cómo la supo y a quién le informó, porque aquí cabe la duda, siendo tan cercano del presidente, si tenía información y se le ocultó. Eso es más grave aún.
Me preocupa que no ha habido un relato único durante todo este tiempo, sino muchas contradicciones. Entonces, lo que uno piensa es que aquí hay alguien que no está diciendo la verdad, porque cuando tienes una sola información, una sola verdad, no hay manera de enredarse ni de equivocarse.
- En algún momento, el senador Latorre evitó responder con precisión si había comentado con Crispi la información que tenía, ¿ese tipo de acciones levantan más dudas?
- Sabemos que el senador Latorre es una persona cercana al presidente y por supuesto que tiene una relación y una comunicación directa con el señor Crispi también. Lo que hemos visto es que si bien se dijo 'caiga quien caiga', después hacen una defensa corporativa en particular con el señor Crispi.
Pese a la defensa de las ministras Camila Vallejo [PC] o Carolina Tohá [PPD], hoy día tenemos la claridad y la certeza de que debía sí o sí venir el señor Crispi a la Comisión, en la obligación de entregarnos información o decirnos su verdad.
Y estas fórmulas que han creado para evitar que venga a la Comisión, lo que me genera es que se tenga miedo de que en estas explicaciones se enrede, se pise la cola y termine diciendo algo que no se quiere que se diga y que demuestre efectivamente que había información que se supo con antelación y no se actuó con la debida premura ni urgencia para un caso tan grave como el de la Fundación Democracia Viva.
- El fondo es saber si informó o no al presidente.
"Estas fórmulas que han creado para evitar que venga a la Comisión, lo que me genera es que se tenga miedo de que en estas explicaciones se enrede, se pise la cola y termine diciendo algo que no se quiere que se diga y que demuestre efectivamente que había información que se supo con antelación y no se actuó con la debida premura ni urgencia para un caso tan grave como el de la Fundación Democracia Viva".
- Saber si es que él sabía y si es que no se lo informó al presidente, que lo encuentro gravísimo, porque al final genera toda esta controversia, mantiene la duda en torno a los quién, cuándo y cómo.
- No es que crean que Crispi está relacionado con el caso.
- Bueno, yo espero creer que en realidad no estuvo involucrado, sino conocer cuándo se enteran y conocer la verdad. Yo sé que no es fácil, porque si aquí había un trasfondo relacionado con Revolución Democrática, y la investigación arroja que esto no fue una casualidad ni un error, sino que fue premeditado, organizado y reiterado, prefiero creer que él simplemente se enteró de esta situación y no actuó como correspondía en su minuto, informándole prontamente al presidente.
- Aceptar eso implicaría reconocer que el Gobierno mintió respecto de cuándo se enteró.
- Yo siempre he dicho que aquí alguien miente. O sea, es imposible que alguien no mienta en esto cuando no ha habido un relato único. No hay una consistencia durante toda esta historia famosa del caso Democracia Viva.
- ¿Cómo interpreta la reacción del Gobierno y la defensa a Crispi con la estrategia de señalar que no es un funcionario público y por tanto no debería asistir al Congreso a prestar testimonio?
- Hay una relación laboral igualmente y el contralor lo dijo. Entonces esta creatividad para interpretar o para justificar se cae a pedazos hoy día cuando recibimos la carta del señor Crispi que dice que -pese a que los antecedentes enviados a través de su correo no responden a nuestra inquietud-, él está a disposición para venir a la Comisión.
"La verdad es que el señor Crispi lo que está haciendo es dañar más al Gobierno, generar más dudas y crear polémicas en la interna".
- Pero también está la intención de ir, pero hacerlo en su calidad de exsubdere y no como jefe de asesores.
- Por eso digo que acá hay contradicciones. Y lo han dicho también diputados de la Comisión que son oficialistas, que se dan cuenta de los errores del Ejecutivo al tratar de blindar y proteger al señor Miguel Ángel Crispi con estas declaraciones, para justificar la inasistencia, para decir efectivamente que él no tiene la obligatoriedad de asistir.
La verdad es que el señor Crispi lo que está haciendo es dañar más al Gobierno, generar más dudas y crear polémicas en la interna, porque yo estoy segura de que todo esto ha generado conflictos en la interna.
- Si solo llega a declarar como exsubdere, ¿qué sensación le generaría?
- Si es que él viene a declarar solo como subdere me generaría aún más dudas, puesto que se entendería que no quiere hablar de Democracia Viva, y me confirmaría la tesis de que no hay un relato verdadero ni único, y por tanto, se teme que diga algo que provoque darnos cuenta de que hubo información que no se entregó.
- El ministro Cordero afirmó que esto sentaba un mal precedente, ¿comparte esas declaraciones?
-No, considero que está tratando de excusar y defender a quien esté cerca del presidente y conozca la verdad de esto. Pero acá hay que dejar en claro que el señor Miguel Ángel Crispi tiene una relación cercana con Revolución Democrática, una conexión de cercanía y confianza con sus militantes más relevantes.
El senador Latorre dijo que se había reunido con los involucrados antes de que todo esto saliera a la luz. Él es cercano y se relaciona con el señor Crispi, quien es muy cercano del presidente. Entonces, si tú haces esta conexión y lo centras en su rol de subdere se desvía el foco, y se nos quiere decir 'no pregunten sobre esto'.
Aquí hay muchos otros actores relacionados y todos ellos por acción u omisión, tenían conocimiento y omitieron o callaron, pensando que esto no iba a explotar y que iba a pasar por debajo del agua. Y esto era mucho más grande de lo que cualquiera se hubiese imaginado.
"Si es que él viene a declarar solo como subdere me generaría aún más dudas, puesto que se entendería que no quiere hablar de Democracia Viva, y me confirmaría la tesis de que no hay un relato verdadero ni único, y por tanto, se teme que diga algo que provoque darnos cuenta de que hubo información que no se entregó".
- ¿No cree que el legislador se está excediendo en sus funciones?
- Estábamos actuando bajo nuestro rol fiscalizador como diputados y también en lo que nos atañe en esta comisión investigadora es que tenemos la facultad y la atribución para poder preguntar de todo lo que corresponde al señor Miguel Ángel Crispi. Si él efectivamente va a venir aquí solo a sentarse para responder por las acciones que tuvo al respaldar o autorizar a la Fundación Pro Cultura, yo creo que están muy equivocados y una vez más están cometiendo un error.
Acá las explicaciones se la tienen que dar a la ciudadanía, son ellos los que hoy día están exigiendo transparencia, están exigiendo la verdad. Entonces, de verdad que esto sería un muy mal precedente y colocaría al Ejecutivo aún más mal de lo que ya está.
- Ya van dos excusas por parte de Crispi, ¿cree que la tercera es la vencida?
- Aquí hay una conversación pendiente, yo creo que incluso con el presidente, para decidir si Crispi asiste o no. Y si él no lo hace, creo que es muy mala señal y confirmaría todos estos supuestos o le daría mucho más peso a todas las dudas que hay.
Él envió una respuesta por escrito la vez anterior, ahora envía un correo diciendo que va a venir o que está a disposición de la Comisión y de los diputados de la Comisión, pero yo creo que aquí no estamos para faltarnos el respeto como autoridad democrática y él es un trabajador público que recibe un sueldo que le pagan todos los chilenos y a eso él se debe.
- ¿No cree que por parte de la derecha hay una intención de hacer un punto político y terminar dañando la discusión de la Ley de Presupuesto?
- Si bien se utiliza o se maneja políticamente como siempre ha ocurrido, digamos muchas veces tanto de lado y lado, si todos sabemos que siempre la izquierda presiona a la derecha y la derecha lo hace siempre con la izquierda, yo creo que acá debemos actuar con altura de miras.
Si hay una rebeldía de parte del señor Crispi y del Ejecutivo por no enviarlo a que dé las explicaciones y se presente como corresponde en algún minuto, hay vías que se utilizan políticamente para presionar.
Uno, políticamente, tampoco tiene otra opción, no vas a seguir con acusaciones constitucionales. Son Señales políticas que a veces son necesarias porque es la manera de generar el punto, pero los recursos van a estar, van a ser aprobados, Lo que uno hace es generar presión y llegar a acuerdo con el Ejecutivo.
Comentarios
Añadir nuevo comentario