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Jueves, 7 de Agosto de 2025
Entrevista

'Eramos tan felices': el documental sobre Bélgica Castro, Alejandro Sieveking y Víctor Jara que rescata imágenes y canciones inéditas del cantautor

Lissette Fossa

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Foto de Luis Poirot.
Foto de Luis Poirot.

María de la Luz Hurtado, en entrevista con INTERFERENCIA, cuenta cómo gracias al trabajo de archivo pudieron acceder a la música original que Jara creó para la obra La Remolienda, escrita por Sieveking y estrenada en 1965, y también a imágenes que muestran a Jara dirigiendo la obra. 

“Era realmente cierto que Víctor tenía un talento especial para el teatro”, dice Bélgica Castro, refiriéndose a Víctor Jara, en el trailer del documental Éramos tan Felices de los directores María de la Luz Hurtado y Marcelo Porta, película que es parte de de la competencia nacional del festival de cine musical In-Edit, que dura hasta el 12 de diciembre.

Ese talento artístico innato de Víctor Jara y una complicidad única, fue lo que lo unió en una amistad profunda con Alejandro Sieveking, director de teatro, y la actriz Bélgica Castro, esposa de Sieveking. Esa relación dio fruto a varias obras de dramaturgia que Jara musicalizó y que de manera única son reproducidas en este documental.

“En 1997 invité a una clase de la universidad a Bélgica Castro y allí ella explica que con Alejandro seguían ‘viudos’ de Víctor, que sentían que los tres eran como un matrimonio, fue tan impactante”, cuenta a INTERFERENCIA María de la Luz Hurtado, una de las directoras del documental.

“En 1997 invité a una clase de la universidad a Bélgica Castro y allí ella explica que con Alejandro seguían ‘viudos’ de Víctor, que sentían que los tres eran como un matrimonio, fue tan impactante”.

Fascinada con esta esta historia de amistad que generó obras de teatro que marcaron las tablas nacionales, como La Remolienda y Ánimas de Día Claro, Hurtado y Porta comenzaron a grabar estas conversaciones con Sieveking, Joan Jara, Luis Poirot, María Izquierdo y quienes trabajaron con este trío de artistas, mientras indagaron en los archivos de la época. Así nace Éramos tan Felices, título que también tiene la fotografía de Luis Poirot que retrata a este grupo riendo sentados en una banca del parque Forestal.

Además de un profundo rescate de imágenes de archivo de fotos y videos, en la película se puede escuchar la música original que Jara creó para las obras escritas por Sieveking y otros temas del artista, gracias al apoyo de la Fundación Víctor Jara.

-¿Cómo nació la idea de hacer esta película?

-Nace de una amistad y un aprecio, por las personalidades creativas y humanas, tanto de Víctor Jara, como de Alejandro Sieveking y Bélgica Castro. Yo, por un tema generacional, no conocí a Víctor Jara, pero ha llenado mi mundo, mi imaginario, mi acercamiento a la idiosincrasia y a las luchas sociales de Chile. Víctor ha estado siempre conmigo.

Cuando volvieron del exilio me acerqué a Alejandro Sieveking y a Bélgica Castro. Y en 1997, invité a Bélgica a una clase de historia del teatro chileno, para que hablara con los estudiantes y en ese momento ella se explayó mucho sobre su vínculo con Víctor Jara y ella explicó que con Alejandro seguían “viudos” de Víctor, que sentían que los tres eran como un matrimonio. Fue tan impactante que uno de los alumnos era Gabriel Sepúlveda, quien años después escribió Víctor Jara, Hombre de Teatro.

Hace unos años también estuve en un proyecto con el archivo de Luis Poirot. Y esas conversaciones las grabó Marcelo, y ahí Luis nos pudo contar desde dentro de esa relación entre Sieveking, Castro y Jara. Poirot era amigo de ellos y entró al teatro porque vió Parecido a la Felicidad, una obra que dirigió Víctor Jara. 

"Alejandro escribe una obra que se llamaba Asuntos Sofisticados, que la define como una comedia musical y ahí le da a Victor Jara el rol de folklorista en la obra. Y ahí Víctor Jara le dice que no sabe tocar música, que cómo iba a hacerlo y Alejandro le dice que tiene que aprender a tocar guitarra".

A partir de eso, le pedimos a Alejandro Sieveking que recreara esa fotografía icónica que se llama Éramos tan Felices, de Poirot, donde aparecen sentados en un banco del parque Forestal en 1965, riendo. Ahí está el equipo creativo de la obra La Remolienda, escrita por Sieveking, dirigida por Jara y protagonizada por la Bélgica Castro. Alejandro se puso en el mismo lugar y la misma postura de la foto, la idea era que conversáramos con la presencia fantasmal de los ausentes. Conversamos abiertamente y aparecieron cosas que nunca había dicho, se desplegó en su temperamento, su humor, y contó muchas cosas de su juventud.

-¿Y cómo fueron los inicios de esa relación entre Sieveking, Jara y Castro?

- A mi me encantan esos momentos de inicio, donde se fragua y se descubren los talentos. En este caso, Alejandro Sieveking era compañero de curso en la escuela de teatro de la Universidad de Chile con Víctor Jara, ambos estudiaban para ser actores. Y era un curso genial, imagínate que ahí estudiaba Jaime Vadell, Tomás Vidiella, etc. Y Alejandro y Victor eran un poco mayores porque venían de estudiar antes otras cosas, por eso conectaron, porque ya tenían un mundo más abierto. Y cuando estaban estudiando, Alejandro escribe una obra que se llamaba Asuntos Sofisticados, que la define como una comedia musical y ahí le da a Victor Jara el rol de folklorista en la obra. Y ahí Víctor Jara le dice que no sabe tocar música, que cómo iba a hacerlo y Alejandro le dice que tiene que aprender a tocar guitarra.

Entonces Víctor empieza a aprender a tocar guitarra, para estar en la obra. Y ahí se inicia su carrera como cantautor. Y él le pide a Nelson Villagra, el actor que protagoniza El Chacal de Nahueltoro, que le enseñe a tocar la guitarra. Y se van al sur a conocer a los cantores populares del campo, a aprender. 

Entonces, no hubiese habido un Víctor Jara si no hubiese un Alejandro Sieveking. Ese fue el inicio, porque de ahí en adelante ambos trabajaron juntos, con Bélgica Castro como protagonista de las obras.

De hecho, Ánimas de Dia Claro la escribió en 1958 como un regalo para Bélgica Castro, y cuando Víctor Jara la leyó, le gustó y montó la obra. En esa obra, Víctor Jara compone la música. 

Tras la muerte de Bélgica y Alejandro, se recreó parte de esa obra y Damián Noguera encontró en los archivos de la Universidad de Chile la música original de 1965 que compuso Víctor Jara, que estaba perdida. Fue un regalo que haya aparecido este año, en 2022, y que pudimos incorporarla en el documental. 

Toda esa relación, el vínculo de trabajo, talento, y amor, entre los tres, está en el documental.

"Incluso Bélgica Castro, que fue dirigida por todos los grandes directores de la Universidad de Chile, incluso por directores de otros países, como Atahualpa Del Cioppo, de Uruguay, dice que Víctor Jara fue el mejor director que haya conocido".

Fuimos incorporando sus recuerdos y tuvimos muchos aportes de archivos, por ejemplo, del GAM, de Canal 13, y destacaría el archivo de la escena teatral de la Universidad Católica, donde trabajo, donde habían cientos de fotografías de las obras de teatro dirigidas por Víctor Jara. También tuvimos un gran apoyo de la Academia Chilena de Bellas Artes.

Y bueno, se entiende que el título también tiene que ver con la felicidad, la juventud, ese período creativo. Por eso el título es Éramos tan Felices, Alejandro Sieveking, Víctor Jara y Bélgica Castro, Complicidades de Juventud, Creación y Muerte.

- En el documental se perfilan tres personajes increíbles, los tres creativos y cada uno importante en el área donde se desarrolló. En el caso de Víctor Jara, se conoce más su música, pero acá usted abarca su trabajo teatral. ¿Cuál es la importancia de Victor Jara en el teatro? ¿Por qué Alejandro Sieveking siempre rememoró su trabajo con Jara?

- Victor Jara tiene una importancia fundamental en la década de los sesenta. 

Luis Poirot relata en el documental que ver Parecido a la Felicidad lo definió para estudiar teatro, que había un tema de luz,  de dirección, de sensibilidad distinta, que nunca había visto antes. Alejandro Sieveking dice que la crearon pensado en un cine, porque Víctor y él eran cinéfilos. Poirot cuenta, entonces, que el día que vió la obra se acercó a Víctor Jara para pedirle aprender de él sobre teatro, y fue asistente de dirección de Victor Jara en Ánimas de días Claros y La Remolienda. 

Incluso Bélgica Castro, que fue dirigida por todos los grandes directores de la Universidad de Chile, incluso por directores de otros países, como Atahualpa Del Cioppo, de Uruguay, dice que Víctor Jara fue el mejor director que haya conocido, que nunca nadie la dirigió tan bien como cuando trabajó con él. Él escuchaba a cada uno, tenía una humanidad y una cercanía diferente y el resultado creativo sobre las tablas se notaba. 

Victor Jara dirigió Los Invasores de Egon Wolff en 1963, con un fuerte mensaje político, también otras obras, trabajó con el ICTUS ,en la Universidad Católica dirigió Antígona de Bertolt Brecht , donde incluso Joan Jara colaboraba en la preparación de actores.

"El relato de la película creo que nunca te suelta, intentamos armar un buen guión para evocar la figura de Víctor, para hacerlo presente. Porque no son anécdotas las que se cuentan, son relatos que reconfiguran la persona de Víctor Jara". 

Alejandro Sieveking dice que Víctor Jara resolvía mejor que nadie las obras y que nadie más entendía tan bien sus obras y las perfeccionaba incluso.

- ¿Qué sensaciones cree que va a generar en el público esta película?

- Nosotros ya tuvimos una avant premier a fines de septiembre y el público quedó muy emocionado, los comentarios fueron muy buenos. Y el documental es transversal entre generaciones e interdisciplinario, tiene muchas aristas, y el relato creo que nunca te suelta, intentamos armar un buen guión para evocar la figura de Víctor, para hacerlo presente. Porque no son anécdotas las que se cuentan, son relatos que reconfiguran la persona de Víctor Jara. 

Es un documental que marca, porque uno se encuentra vívidamente con estos tres grandes creadores, pero también los otros artistas que dan testimonio, abren su corazón y su memoria y recrean también sus recuerdos. Hay un trabajo de archivo muy valioso, pudimos acceder a imágenes originales. Y también se ven las raíces culturales chilenas, con que trabajaban Alejandro, Bélgica y Víctor y esas raíces culturales, esa poética, también se ve en nosotros y en la película.



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Comentarios

Comentarios

Víctor siempre estará en el corazón del pueblo, fue un regalo a nuestra cultura, que jamás pudo quitarnos el fascismo cobarde y asesino.

Ahí te equivocas, medio a medio felipito 1° ( DE NO SÉ QUÉ JA ja) Claro que nos los quitó y nos sigue quitando el fascismo. Él debía haber estrenado en ese mes, él estaba creando, él debía haber seguido creando, porque era un gran creador. Otra cosa es; QUE SIGA EN NUESTROS CORAZONES!! Pero, que nos lo quitó la dictadura y el fascismo de hoy, obvio que si lo hicieron.

Que grande recuerdo, tuve la ocasión de ver en el teatro Antonio Varas, La Remolienda de tres grandes como Bélgica, Alejandro y Victor, siempre la recuerdo y Joaquín Murrieta, Victor un gran flolclorista y gran Director de Teatro, gracias por estos recuerdos.

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