Una mujer de 40 años, oriunda de Talca, odontóloga, doctora en Salud Pública de la Universidad de Chile, profesora de la Universidad de Talca y dirigenta social de la Red Ambiental del Maule: María Elisa Quinteros Cáceres es la nueva presidenta de la Convención Constitucional, de cara a los últimos seis meses que restan para que el organismo presente la propuesta de nueva Constitución para Chile.

A las 15:30 horas de ayer martes se retomó el proceso eleccionario de la directiva de la Convención, luego que durante la jornada del martes no se lograra un acuerdo entre los distintos bloques para definir la nueva directiva, lo que obligó a suspender la sesión a las 4:15 de la mañana del miércoles con ocho votaciones fallidas a cuestas.

Pero, durante la madrugada se dejaron amarrados ciertos acuerdos que facilitaron el resultado del día de ayer. Después de que a eso de las 2 de la madrugada Cristina Dorador (Movimientos Sociales Constituyentes) decidiera bajar su candidatura, se definió a María Elisa Quinteros como la carta de de su bloque, esto en consenso con Pueblo Constituyente y la Coordinadora Plurinacional, grupos que el martes respaldaron al convencional Eric Chinga (escaños, pueblo diaguita).

Una vez que comenzó la nueva votación, ya estaba definido en la decisión de la mayoría de los convencionales que María Elisa Quinteros –conocida entre sus cercanos como ‘MEQ’ debido a sus iniciales–, sería la nueva presidenta.

Una vez que comenzó la nueva votación, ya estaba definido en la decisión de la mayoría de los convencionales que María Elisa Quinteros –conocida entre sus cercanos como ‘MEQ’ debido a sus iniciales–, sería la nueva presidenta. Esto lo consiguió con 78 votos a favor de los bloques anteriormente mencionados, además de Chile Digno, Independientes No Neutrales y un voto de Renovación Nacional, el de Luciano Silva, quien compartió con Quinteros en el Comité de Ética.

A diferencia de lo complejo que resultó elegir a la nueva presidenta, la vicepresidencia se zanjó en la primera votación, luego de que 112 convencionales votaran a favor de Gaspar Domínguez (INN), médico rural y parte de las disidencias sexuales en la Convención. 

Su elección estuvo condicionada por los acuerdos tomados para la presidencia, principalmente por el error de cálculo del Frente Amplio durante la jornada, el que terminó por dejar fuera de los dos principales cargos directivos de la Convención a este bloque que desde el 11 de marzo será gobierno.

Específicamente, el Frente Amplio decidió apoyar a su propia carta, Beatriz Sánchez, en desmedro de María Elisa Quinteros. Según se especulaba en los pasillos del ex Congreso durante el miércoles, la intención de los frenteamplistas era que en una nueva vuelta sus votos fueran decisivos para que Quinteros fuera elegida. Pero esto no ocurrió, principalmente porque el colectivo Independientes No Neutrales apoyó de inmediato a la actual presidenta, volviendo innecesario el respaldo del FA.

A raíz de esto último, Gaspar Domínguez se convirtió también en un nombre de consenso, mientras que el Frente Amplio además de quedar fuera del carro de la victoria en la elección de la presidencia, no logró articular con más sectores que el Colectivo Socialista.