El periodista Alfonso Peró llega a La Moneda a ocupar un puesto clave: director de Comunicaciones de Presidencia, una instancia que no existía hasta hoy. Su nominación se produce en medio de aguas revueltas del área comunicacional del gobierno, luego de la renuncia de Jorge Selume a la dirección de la Secretaría de Comunicaciones (Secom), quien dejó el cargo luego del gazapo producido por el informe de Big Data que publicó La Tercera y que resultó un hazmerreír del cual todavía no se encuentran responsables.

Peró llegó directamente desde El Mercurio, donde ocupaba un alto puesto desde agosto de 2019 en el equipo de Cristián Edwards en materia de análisis de datos, habiendo sido editor de Política y Reportajes hasta esa fecha. Sin embargo, Peró no llegó a cubrir un eventual vacío dejado por Selume en materia de análisis, sino que a cumplir un rol de desarrollo de estrategia para potenciar la figura del presidente Sebastián Piñera.

Según logró establecer INTERFERENCIA, el alto editor llegó al cargo luego de sondeos a otros candidatos, a quienes se les consultó por las estrategias que consideran más adecuadas para intentar revertir la baja popularidad del presidente. 

En tanto, según fuentes del periódico, Peró no logró una buena relación con el director Carlos Shaerer, lo que explica su traspaso al área de desarrollo digital que dirige Edwards. Peró llegó al diario en 2011, traído por el ex director Cristián Zegers, a la unidad de especiales, para en 2012 hacerse cargo de la sección Política. Conforme lo dicen estas mismas fuentes, el actual alto asesor es una persona inteligente e irónica, bien formado profesionalmente.

No es la primera vez que un alto editor de uno de los periódicos más tradicionales se pasa a alguno de los gobiernos de Piñera. Ya sucedió al menos con Christian Rendic (actual director de Secom), con quien está por verse si Peró logra delimitar sus campos de acción, pues es difícil hacer comunicaciones del gobierno sin considerar al presidente, en un regimen ultrapresidencialista.

Rendic es periodista y licenciado en comunicación social. Trabajó en La Nación, La Tercera, Qué Pasa y El Mercurio y fue director de T13.cl -el sitio web de la estación televisiva- durante cuatro años, donde además tenía a su cargo la coordinación política en el noticiero central y además era panelista del programa Conexión Tele 13.

En 2017 dejó su cargo en Canal 13 para asumir como socio director de Populi Comunicaciones, agencia especializada en comunicaciones y marketing, creada por Francisco Sánchez (ex gerente general de La Tercera SA) y Felipe Contreras (ex director de medios digitales de la misma empresa), empresa que dejó en marzo de 2018 (ver nota de la redacción al pie),. 

También es el caso de Mauricio Lob, quien fue subeditor general de La Tercera, y coordinador de política en la sección Reportajes del mismo diario. Además de esto, Lob coordinó las secciones Sociedad, Tiempos Modernos y Deportes en la Revista Qué Pasa.

Tras esas funciones ocupó el cargo de director de la Secome entre 2010 y 2013, es decir en el primer gobierno de Piñera. Desde ese puesto, pasó a ser subsecretario del Ministerio Secretaría General de Gobierno (Segegob), cargo que ocupó entre 2013 y 2014. 

Lob se integró a Quiñenco S.A. en 2014, el family office de la familia Luksic, como asesor comunicacional junto a Carolina García de la Huerta, quien fue ex presidenta del directorio de Canal 13, habiendo pasado por El Mercurio y Revista Capital. El 2 de enero de 2020, Lob fue nombrado gerente de Asuntos Corporativos y Gestión Social de Quiñenco.

En estos juegos de ida y vuelta, también es relevante el antecedente del nombramiento por parte de Piñera de Álvaro Saieh, dueño de Copesa, el conglomerado que controla La Tercera, entre otros medios, como el jefe de la misión chilena a la Expo Dubai 2020, según consignó INTERFERENCIA en julio de 2019

Tampoco es la primera vez que el propio Peró cambia el periodismo por la política, aunque nunca el periodista ha tenido militancia en algún partido.

Un hombre de Allamand

"Es un animal político. De esos que tienen siete vidas. Su agenda semanal se parece bastante a una guía telefónica porque, literalmente, no para. Buen observador, analista sagaz, trabajólico y un duro negociador, así es Andrés Allamand en la intimidad. Posee un don especial para convencer con sus argumentos incluso a sus adversarios, aunque también una cierta impaciencia y una rudeza que le juegan malas pasadas. Su rutina es una 'locura'", dice la entrada del artículo Off The Record, uno de los que compone el especial Las caras de Allamand de Revista Capital, con fecha de enero de 2011.

"El autor de esta crónica trabajó dos años en el círculo más cercano del hoy ministro de Defensa. Allí conoció de primera mano el estilo y la rutina del dirigente de Renovación Nacional: reuniones que podían durar 12 horas; una agenda diaria con mil temas; una franqueza brutal al momento de discutir y la capacidad para negociar y dar vuelta a sus adversarios casi sin que se diesen cuenta. Este es un recorrido personal por el lado menos conocido de un político duro de matar. Por Alfonso Peró", dice el encabezado de la misma nota.

Y Peró no fue un asesor común y corriente. 

En un artículo de La Tercera de fin de año del 2006, titulado La cumbre de Piñera, Monckeberg, Allamand y Cubillos, se narra en tono de anécdota y gesta la familiar ascención a La Paloma por parte del entonces candidato presidencial Sebastián Piñera y su hijo Cristóbal, Andrés Allamand, y su hijo Raimundo, Marcela Cubillos, entonces pareja de Allamand, Cristián Monckeberg, el abogado Francisco Varela, parte del bufete de Allamand, y los asesores Joaquín Barañao y... Alfonso Peró. 

"En ese momento, el abanderado [Piñera] sorprendió a todos cuando repentinamente sacó una bandera de Colo Colo -es el segundo mayor accionista de Blanco y Negro- y la clavó. Además, decidió que el grupo debía rendirle un homenaje al club, porque "el Cacique se lo merece", cuestión a la que Allamand y Cubillos sólo aceptaron a regañadientes (son simpatizantes de la UC) [...] El descenso duró cerca de cinco horas y mientras algunos decidieron hacer parte del trayecto sobre mulas que llevaron algunos arrieros, Piñera se mostró orgulloso ante la comitiva porque bajó caminando.", dice el artículo.

Otro artículo, esta vez de El Mercurio y de 2007, narra los intentos conjuntos de Allamand y Piñera por entrar "de lleno en la era digital, buscando establecer relaciones más directas con los ciudadanos".

El proyecto se trató de una plataforma digital "internet 2.0, cuya característica principal es que la gente interactúa en comunidades virtuales y el contacto entre todos se hace bajo una óptica más horizontal y no vertical".

Eran los tiempos de la tesis de Allamand de El Desalojo, que tenía una versión web (www.eldesalojo.cl, ya no disponible) cuyo propósito era servir como herramienta de denuncia de los actos de corrupción por parte de funcionarios de la Concertación.

"La idea es abrir las puertas a la gente que sufre día a día con las políticas públicas nefastas. Queremos plantearle una solución: la alternancia en el poder", dice Peró en el artículo, quien es descrito como "un estrecho asesor de Allamand y quien está a cargo del proyecto".

Nota de la redacción: Con fecha posterior a la publicación, Christian Rendic informó que no tiene ningún vínculo con Populi desde marzo de 2018, y que su LinkedIn no estaba actualizado, tal como decía el artículo original, el cual fue corregido conforme este nuevo antecedente.