María Luisa Brahm

El Tribunal Constitucional apostó por su propia supervivencia y dejó al presidente solo en su intento por evitar un tercer retiro de fondos de las AFP. En tanto, el panorama partidista muestra a un oficialismo más alejado de La Moneda y a una oposición más cohesionada. Por su parte, el descontento social sigue marcando la pauta.

El constitucionalista, que también ejerce la docencia en la Universidad Diego Portales, no sólo alega a favor del gobierno en el Tribunal Constitucional. También realiza, a pedido del Presidente, gestiones para ‘enderezar’ coberturas de prensa.

La actual presidenta del TC y el abogado de La Moneda Gastón Gómez comenzaron los primeros años de la transición colaborando y coincidiendo profesionalmente con un promisorio y joven senador: Sebastián Piñera. Desde entonces son amigos.

El Tribunal Constitucional tiene que responder al requerimiento como máximo 17 días después de declararlo admisible, algo que debiera ser a pocos días antes de los comicios del 15 y 16 de mayo. Tras el anuncio se produjeron diversas manifestaciones populares de protesta.

María Luisa Brahm, presidenta del TC y ex jefa de asesores del gobierno de Piñera, presentó el lunes un escrito argumentando que el reglamento que investiga y determina responsabilidades administrativas en el TC -aprobado por ella misma años atrás- no puede aplicarse a los ministros de dicho tribunal, permitiéndole evitar el sumario en su contra. Una sesión extraordinaria de ese tribunal deberá pronunciarse al respecto.

La posibilidad de volver a sacar dinero de las cuentas individuales vive una semana clave. Esta semana se votarán en el Senado el proyecto original del Congreso y el del “préstamo del 10%” presentado por el gobierno. Pero ya empieza a tomarse la agenda el qué hará el Tribunal Constitucional, uno de los organismos más cuestionados por la población en los últimos años.

María Luisa Brahm, ex asesora en el primer gobierno de Piñera, salió ayer a respaldar de manera tácita al mandatario al afirmar que todos deben respetar la Constitución. ¿El problema? No consensuó con sus colegas su propia declaración.