Lo que ocurrió este jueves en Temucuicui es el operativo de la PDI (Policía de Investigaciones) más grande que se tenga registro en 30 años, según expertos consultados por INTERFERENCIA, de acuerdo al número de polícias en funciones en terreno (800).

El resultado de este gigantesco operativo, fue el decomiso de un poco más de mil plantas de marihuana, una subametralladora UZI, otras 9 armas de fuego, 12 millones de pesos en efectivo y dos detenidos. A lo que hay que sumar el fallecimiento del oficial de la PDI, Luis Morales Balcazar, y diez inspectores heridos, tras un enfrentamiento a tiros en el lugar.

Alrededor del mediodía de este jueves, en paralelo a la lectura  del veredicto del homicidio de Camilo Catrillanca, varias comunidades fueron allanadas, en un operativo que involucró a 800 funcionarios de la PDI, además de drones y helicópteros.

Principalmente el operativo se desarrolló en Temucuicui, donde se registraron, según informó la policía, cinco domicilios en donde se encontró, en invernaderos, cultivos de marihuana, además de armas.

Según una fuente que ha estado ligada a la investigación de casos de narcotráfico, “nunca, desde al menos los años ochentas, habíamos visto un operativo con esta cantidad de PDI. Y menos, que un operativo de esta índole no esté relacionado a un narcotráfico internacional, como lo es el tráfico de cocaína, por ejemplo”.

Para esta fuente, esta movilización de cerca de 800 policías civiles es solo comparable con el secuestro del coronel Carlos Carreño, por parte de militantes del Frente Patriótico Manuel Rodríguez (FPMR), hecho ocurrido en 1987, en dictadura, lo que desató una de los operativos policiales más masivos de los que se tenga recuerdo en el país.

“Yo creo que debe ser el allanamiento con más efectivos de la PDI, que yo recuerde. Yo como fiscal recuerdo haber realizado dos allanamientos grandes, de narcotráfico, que no superaron los 200 efectivos”, comenta a INTERFERENCIA el abogado y ex fiscal, Andrés Cruz.

“Yo creo que debe ser el allanamiento con más efectivos de la PDI, que yo recuerde por ahora", dice el ex fiscal Andrés Cruz.

Por dar algunos ejemplos de otros grandes operativos, pero que no alcanzaron esa magnitud, está el allanamiento a Colonia Dignidad, a mediados de la décadas de los 90, el que contó con alrededor de 200 efectivos de la PDI, quienes principalmente buscaban al fundador y jerarca del lugar, Paul Schäfer.

Uno de los últimos allanamientos -con el que se buscaba encontrar fichas de detenidos durante la dictadura que fueron torturados y desaparecidos en Colonia Dignidad- contó solo con cerca de treinta efectivos de la PDI.

Escuálida cosecha

El allanamiento de Temucuicui de esta semana -durante la lectura de la condena de siete carabineros y un abogado, por el asesinato de Camilo Catrillanca- consta entre sus resultados con el hallazgo de solo una arma UZI, y otras nueve de menor poder de fuego. Para los especialistas, dicho armamento, no habla de una organización de alta complejidad ni experiencia en el narcotráfico.

Esto, sin contar con el producto, un poco más de mil plantas de marihuana, las cuales con toda probabilidad son para el mercado doméstico y no para la exportación, indica que no se trata de actividades de crimen organizado con redes internacionales. 

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Por otro lado, estas mil matas de marihuana en realidad contienen pocos gramos del cogollo de marihuana, que es lo que se comercializa en el mundo del tráfico. Un experto en semillas y plantaciones personales, consultado por INTERFERENCIA, explicó que cada mata de las que se ven en imágenes debe tener 100 gramos de cogollos o 150 como máximo, y en muchos de ellos, es posible que el cogollo no haya florecido aún, por lo que todas esas hojas y troncos de las plantas se van a la basura para los traficantes.

“De las imágenes que difundió la PDI en los medios, yo veo que en un invernadero hay plantas que se nota que no tienen cogollos, aún en crecimiento (etapa vegetativa), mientras en el otro invernadero se ven con cogollos (en floración). Las plantas que aparecen secándose son en realidad hojas y troncos, que al parecer las suben a las camionetas”, explica el especialista.

Considerando los 150 kilos de cogollos decomisados, cruzándolos con la cantidad de policías empleados, fue necesario un PDI por cada 190 gramos. En términos de los ocho meses de planificación, la PDI debió invertir 1,6 días por cada kilo de cogollo de marihuana decomisado.

“Además, nunca había visto un operativo de 800 PDI, que terminara con solo mil matas incautadas”, agrega la fuente.

El criterio de considerar el cogollo como realmente la droga que se trafica (y que se pesa para establecer la gravedad del delito), es algo que ha generado jurisprudencia en tribunales chilenos. Es decir, crecientemente los jueces toman en cuenta el peso de los cogollos y no de las matas, con troncos, ramas y hojas.

Sobre la cantidad de plantas incautadas, el Fiscal Regional de la Araucanía, Cristián Paredes, señaló ayer que superan un poco más las mil matas de marihuana, lo que representaría unos 700 kilos de esta planta. Sin embargo, considerando solo el cogollo de esta planta, podríamos estar hablando solo de entre 100 y 150 kilos de cogollos.

Considerando esta última cifra, cruzándola con la cantidad de policías empleados, fue necesario un PDI por cada 125 gramos de cogollos de marihuana . En términos de los ocho meses de planificación, la PDI debió invertir 2,4 días por cada kilo de cogollo decomisado. 

El procedimiento policial se enmarca, según explicó Paredes, en una investigación de ocho meses, que ha considerado una veintena de detenidos por delitos que incluyen el cultivo ilegal de canabis, tráfico de drogas, tráfico de armas y municiones, entre otros delitos.

Pero, esta cantidad de kilos y de matas encontradas en allanamientos se da de manera frecuente como parte de la labor de la Policía de Investigaciones.

Tan solo este viernes, la PDI, en coordinación con la Fiscalía Local de La Ligua, incautó 3.602 plantas de marihuana, en sector de la Quebrada La Retamilla, ubicada en la comuna de Zapallar. Es decir, más de tres veces que lo encontrado en Temucuicui.

En febrero del año pasado, la PDI detuvo a tres personas por el cultivo de más de 3.600 plantas de marihuana, también en la Región de Valparaíso.

Tan solo este viernes, la PDI, en coordinación con la Fiscalía Local de La Ligua, incautó 3.602 plantas de marihuana, en sector de la Quebrada La Retamilla.

La incomodad de los efectivos de la PDI

Los cuestionamientos a la efectividad de un operativo de más de 800 efectivos de la PDI y ocho meses de preparación, llegados de todas las regiones del país, y que resultó con el decomiso de marihuana y una decenas de armas de fuego y con una baja policial -la del inspector Luis Morales Balcazar- han llegado desde el mundo político, pero también desde dentro de la institución.

Una fuente al interior de la institución señaló a INTERFERENCIA que “más que incomodidad, estamos enojados”.

Esta fuente cuenta que fueron enviados a una zona que está en conflicto por tierras mapuches con un equipamiento exagerado, y aún así, tuvieron que lamentar la muerte del inspector Morales. 

La Policía de Investigaciones, al igual que Carabineros, depende también del Ministerio del Interior y todos los dardos apuntan a las responsabilidades políticas del procedimiento. Los comentarios en torno al allanamiento y al escuálido decomiso comenzaron desde un inicio, por lo que en un punto de prensa del mismo jueves, el director general de la Policía de Investigaciones, Héctor Espinoza, negó que hubiera falencias en el operativo.

“Cuando se trata de una organización criminal de tanto poder de fuego, aquí no hay ninguna falla, acá tenemos... Por favor, reconozcan, especialmente el mundo político, que condene la violencia”, fue la entrecortada respuesta de Espinoza.

“Cuando se trata de una organización criminal de tanto poder de fuego, aquí no hay ninguna falla, acá tenemos...Por favor, reconozcan, especialmente el mundo político, que condene la violencia”, declaró nervioso el director general de la PDI Héctor Espinoza.

Según un artículo de El Mostrador, también se observó como una falla del operativo “que a cada uno de los vehículos utilizados se les instaló una bandera de color para identificar a qué predio debía ingresar, lo que llamó aún más la atención de quienes tuvieron más de 40 minutos para observar el llamativo traslado, donde el efecto sorpresa nunca estuvo presente”.

Con respecto al momento en que se realizó el allanamiento, durante la lectura del fallo en contra de los autores del homicidio del comunero Camilo Catrillanca, el senador Jaime Quintana (PPD) también pidió explicaciones sobre el operativo.

"Hay una situación política en la decisión que se adopta, aquí debe esclarecerse por qué en el mismo minuto en que se estaba leyendo la sentencia, que es condenatoria para quienes cometieron este hecho, pero también para un clima de guerra que fue instaurado con el Comando Jungla previo al asesinato de Camilo Catrillanca, entonces por qué es que se decide hacer el operativo justo a esa hora", cuestionó Quintana.