Enlace permanente Enviado por Mauricio Corco Reyes el Dom, 04/18/2021 - 08:33
Osea en Chile, debemos estar contentos, con la politica que tenemos? Con figurines, sonrientes que inundan las calles de palomas? Insiste la autora sin decirlo claramente que gente como Lavin o Jiles representan genuinamente a alguien?. Antes de la pandemia el gran tema era la ilegitimidad de toda la clase política, osea los partidos politicos, cuya legitimidad sigue por el suelo. Durante el estallido, no se vió a ningún politico por la calle, porque nadie los quería ahí, subiendose a la micro por detrás, como decía Victor Jara, el mas quedao apropiandose del baile.
Admitamos que la pandemia, nos llevó a una pausa distópica, pero no quiere decir que el debate sobre el contubernio de la politica con el poder economico no siga instalado en la inquietud ciudadana. Tal como fue concebido leoninamente a favor de los partidos politico el proceso constituyente, tiene el germen de la ilegitimidad.
Talvez Perú, no esté tan mal, como sugiere la autora. Está mas cerca de la democracia directa, que para los unicos que significa caos, es para los que se acostumbraron a vivir de los demás, a los parasitos que rondan la vecindad reducida del chorreo de plata de la oligarquía.
Ya que estás aquí, te queremos invitar a ser parte de Interferencia. Suscríbete. Gracias a lectores como tú, financiamos un periodismo libre e independiente. Te quedan artículos gratuitos este mes.
Osea en Chile, debemos estar