Carlos Peña

Estudee mijo, esfuercese pa' que salga adelante, le dijeron a la gente en los ochentas y noventas. La gente estudió, se esforzó, terminó derecho, y ahora sale el rector a decir: el problema es que esto se llenó de rotos. Yo veo más bien la cosa así: la gente estudió, salió de la universidad, su familia se endeudó y se llenó de esperanzas. Los niños terminaron sus carreras, pero el chancho siguió mal pelado.

Hace unos días se publicó un esperado informe sobre medios en que trabajaron varias universidades y actores de la industria. Enfocado en dar recomendaciones para mejorar las condiciones del ejercicio de la libertad de expresión, el documento fue duramente criticado por El Mercurio y la Asociación Nacional de la Prensa, automarginados del proceso y temerosos de una nueva regulación medial.

Las críticas al trabajo de Matías del Río no justifican el discurso de quienes hablan de una supuesta 'cultura de la cancelación' y que reciben curiosamente amplios espacios, en medios de comunicación, para hacer estas acusaciones. Pero, singularizar a del Río por un problema que se arrastra por décadas no solo es injusto con él, sino también inoficioso en el largo plazo. Su salida no cambia en nada un eventual desequilibrio en el sistema de medios.

El máximo tribunal sentenció que el plantel encabezado por Carlos Peña vulneró derechos fundamentales de 14 estudiantes que fueron expulsadas o suspendidas por participar de una toma feminista. Ganadoras del recurso señalan que se trata de un fallo histórico, que se les negó el derecho a educarse, y exigen garantías para terminar con abuso, acoso y encubrimiento en el plantel.

Como una iniciativa inédita dentro de la Universidad Diego Portales (UDP), profesores también hicieron "una pausa reflexiva" por una semana, ante la crisis que vive la Escuela de Artes, tras acusaciones de acoso sexual, laboral y discriminación por género contra ex profesoras y a alumnas por parte de tres profesores. El petitorio de los estudiantes todavía en paro solicita la desvinculación de los acusados y reforzar políticas de género.

Mientras que un grupo de alumnas fueron sumariadas y suspendidas por participar en asambleas durante las tomas, decisión que fue revocada por la Corte de Apelaciones tras un recurso de protección de las jóvenes, profesores acusan que fueron interrogados, cuestionados, perseguidos y desvinculados en las escuelas de Arte y Diseño de la UDP. Esto bajo el silencio y el rol pasivo del rector, Carlos Peña.

Una vez más, el jefe de la UDP traspasa fronteras éticas, jugando a ser alfil y dama a la vez en el debate educativo. Ya había defendido a Harald Beyer en 2014, como columnista. Hoy la defensa va un paso más allá: un informe en derecho. Nada de eso pasó con Yasna Provoste en 2008.

Este lunes las autoridades de la Universidad Diego Portales enviaron una carta a las estudiantes que mantienen ocupadas todas las facultades de la universidad desde el jueves 29 de agosto. En ella, acceden a cumplir con lo solicitado por las estudiantes sólo si las tomas se deponen a más tardar este miércoles 4 de septiembre.

Los columnistas de La Tercera, Ascanio Cavallo, y de El Mercurio, Carlos Peña, cuestionaron la sentencia del juez Alejandro Madrid, desatando una ola de críticas y elogios. Ambos ponen en duda el estándar probatorio del magistrado. Pero varios abogados expertos aseguran que sus dudas son 'livianas'.