El martes 28 de diciembre de 2021, la portada de la Revista Ya -la publicación para el público femenino de El Mercurio- fue para Irina Karamanos, la actual pareja del presidente electo Gabriel Boric, y líder del Frente Feminista de Convergencia Social (CS).
En dicha entrevista -una especie de debut en sociedad- esta cientista política abordó por primera vez lo que el nuevo gobierno haría con el cargo. Pese a que Ya la presentó como “la futura primera dama”, Karamanos no aseguró que ocuparía el cargo, aunque dio varias señales de que sí lo haría. “Creo que es una figura que, en muchos casos, se ve como si fuera para darle algún espacio a la pareja del Presidente o Presidenta. Eso es cuestionable. Sin embargo, desde allí también se pueden impulsar cambios importantes”.
Pasaron tres martes, y ayer Karamanos comunicó que decidió asumir el rol de primera dama, pero “con el compromiso de reformularlo”.
“Hay que darle un giro diferente y más contemporáneo a este rol, despersonalizarlo, y esto va a significar cambiar también la relación con el poder y también cambiar la forma en que vemos la relación entre el poder y las mujeres que hacemos política”, dijo Karamanos, quien delineó que lo suyo sería un rol menos caritativo y más articulador y diplomático para poder usar la tribuna para visibilizar grupos que han sido invisibilizados”.
En concreto, el cargo de primera dama consiste en la dirección sociocultural de la Presidencia, que está a cargo de Fundación Integra, Fundación de las Familias, Fundación para la Promoción y Desarrollo de la Mujer (Prodemu), Tiempos Nuevos (MIM), Fundación de Orquestas Juveniles e Infantiles (Foji), Fundación Artesanías de Chile y Fundación Chilenter.
La excepción fue Michelle Bachelet, quien en su primer gobierno nombró a no familiares: Adriana del Piano y María Eugenia Hirmas, y en su segundo período a su hijo Sebastián Dávalos.
El cargo ya fue reformulado fuertemente después del fin de la dictadura, habiéndolo ocupado entonces, Lucía Hiriart, esposa de Augusto Pinochet, y pasándolo a ocupar después todas las cónyuges de los presidentes varones; Leonor Oyarzún (Patricio Aylwin), Marta Larraechea (Eduardo Frei Ruiz-Tagle), Luisa Durán (Ricardo Lagos) y Cecilia Morel (Sebastián Piñera).
La excepción fue Michelle Bachelet, quien en su primer gobierno nombró a no familiares: Adriana del Piano y María Eugenia Hirmas, y en su segundo período a su hijo Sebastián Dávalos.
Pese a las promesas de reformulación del cargo por parte de Karamanos, arreciaron las críticas principalmente por mujeres feministas que no son parte de la alianza de gobierno.
Por ejemplo, Karina Nohales, ex candidata de Movimientos Sociales a la Convención y parte de la Coordinadora 8M dijo en Twitter: “Esto me disgusta como feminista, pero sobre todo me preocupa el relato con que se presenta: "mantemos un cargo para subvertir el cargo". Dicho de otra manera, presentar la continuidad como transformación ¿Cuántos anuncios vendrán inscritos en la misma lógica? Ojo, pestaña y ceja”.
Priscila González, integrante de la Coordinación Nacional de la Red Chilena contra la Violencia hacia las Mujeres señaló que parece una contradicción de parte del presidente electo.
En conversación INTERFERENCIA, Priscila González, integrante de la Coordinación Nacional de la Red Chilena contra la Violencia hacia las Mujeres señaló que parece una contradicción de parte del presidente electo, considerando que en su campaña mencionó que era un cargo que no debiese existir.
“Sorprende que Irina Karamanos ratifique esa decisión de asumir el cargo, por cuanto es difícil hablar de repensar un cargo y despersonalizarlo, cuando es la propia pareja de el presidente electo quien lo va a asumir. Es un cargo enfocado en otorgar un rol secundario a las mujeres, que históricamente ha servido para efectos protocolares, pero donde no hay ningún proyecto concreto para pensar que el apodo ‘feminista’ va a estar presente en la gestión de Irina Karamanos. Además hay una cuestión de legitimidad de origen, nosotras votamos para elegir un presidente y en cambio la designación de Karamanos viene solamente por el hecho de que es la pareja actual del presidente electo”, dijo.
Dado que de todas formas Karamanos asumirá el cargo, Priscila González añadió que “desde el punto de vista de la gestión pública, por supuesto que me gustaría que fuese un cargo que tuviese funciones más delimitadas, que pudiese haber una rendición de cuentas claras, pero si se quiere despersonalizar y si se quiere avanzar en un aspecto más feminista de lo que se ha planteado hasta ahora, debiésemos pensar en un cargo donde no tenga nada que hacer la pareja del presidente o presidenta de la República, sino que sean otros mecanismos para designar quien sea el director o directora del área sociocultural de la presidencia, eso como un mínima”.
“La figura o institución de ‘primera dama’ es en extremo patriarcal, puesto que relega a la mujer a funciones que se perciben como menores frente a las del Presidente", dijo Soledad Acuña.
Por su parte, Soledad Acuña, abogada, miembro de la Coordinadora Transversal de Mujeres Organizadas, Asamblea Feminista Plurinacional y Colectiva sin Derechos y ex candidata independiente a la Convención, opina que “la figura o institución de ‘primera dama’ es en extremo patriarcal, puesto que relega a la mujer a funciones que se perciben como menores frente a las del Presidente y la pone siempre en un segundo plano. También hace ruido que sea un cargo cuyo requisito es la relación personal que tenga con quien haya sido electo presidente o presidenta, más cuando se nos ha inculcado el valor del mérito y la sanción al nepotismo”.
En su cuenta de Twitter, la periodista y fundadora de la Agrupación Lésbica Rompiendo el Silencio, Érika Montecinos, respaldó la decisión de Karamanos, manifestando que es “importante que Irina Karamanos reformule el cargo. Eso es importante. Poder transformar espacios y dotarlos de toda una visión feminista. Ya dio señales como por ejemplo sacarle ese rol de "caridad". Fortalecer a organizaciones, a personas como sujetes de derechos”.
También fueron varias las mujeres que recordaron la famosa intervención de la literata Diamela Eltit en 2013, quien se abstrajo de toda actividad de campaña de su marido Jorge Arrate.
También fueron varias las mujeres que recordaron la famosa intervención de la literata Diamela Eltit en 2013, quien se abstrajo de toda actividad de campaña de su marido Jorge Arrate, quien fue candidato presidencial por la izquierda de entonces, en contraste con Cecilia Morel, la esposa de Piñera; Marta Larrechea, la de Frei; y Karen Doggenweiler, la de Marco Enríquez-Ominami, quienes fueron muy activas durante esa elección.
“No creo en la figura de la ‘primera dama’. Me parece anacrónica e indigna de la democracia. Indicaría que las otras damas de la nación, la totalidad de las ciudadanas chilenas, serían damas de segunda y así se podría pensar en damas de tercera o de cuarta. No pues, eso sí que no”.
Boric candidato; Boric presidente
En julio de 2021 en Radio Concierto, el entonces candidato Gabriel Boric se entrevistó con Alfo Schiapacasse, quien le preguntó por el cargo de primera dama. “No tiene ningún sentido. No pueden haber cargos en el Estado que tengan que ver o estén relacionados con el parentesco del Presidente o con nadie [...] por lo tanto, las funciones que hoy están a cargo de la primera dama, como orquestas juveniles, Fundación Integra, entre otras, deberán entregarse a la Alta Dirección Pública o funcionarios de carrera“, dijo Boric.
“Vamos a abolir esa institución y generaremos una instancia que sea transparente, en función de méritos y de carreras funcionarias, y no de lazos de sangre o afinidad con el Presidente”, remató.
Ayer, el ahora presidente electo dio una vuelta en 180°: “Lo que Irina misma ha defendido es que es una institución que tiene que ser modernizada, que tiene que ser totalmente transparente, reevaluada. Para eso, para poder modificarla, hay que tomarla. Las cosas no se modifican dejándolas estar [...] La decisión que ha tomado mi compañera, Irina, es valiosa, porque no lo hace desde una posición para buscar algún tipo de beneficio, sino que para transformar la institución. Eso es lo que ella ha trabajado con su equipo”.
Comentarios
Una decisión que tiene sus
Añadir nuevo comentario