Es imposible asegurar qué pasará el 16 de noviembre cuando se realice la primera vuelta presidencial. El escenario cambia tan rápido y constantemente que los astrólogos probablemente tengan las mismas chances que los analistas políticos de explicar ciertamente qué están pensando los chilenos.
A principio de año nadie vaticinaba que la candidata del oficialismo en Chile sería la militante comunista, Jeannette Jara. Menos que a cuatro meses de la elección aparecería en el primer lugar de varias encuestas.
Y estos días las encuestas volvieron a remecer la carrera presidencial. Por un lado, Jara se consolida como una opción con bastantes posibilidades. Pero además, mostraron que en la derecha el panorama estaba más revuelto de lo que se pensaba.
Esto porque Franco Parisi, líder del Partido de la Gente (PDG) y candidato a La Moneda en dos ocasiones anteriormente, irrumpió sorpresivamente acercándose –lentamente–, a los primeros lugares en algunas mediciones, dejando en el olvido al fundador del Partido Nacional Libertario, Johannes Kaiser, y amenazando el lugar de la abanderada de Chile Vamos, Evelyn Matthei.
Cadem, la más influyente, publicó en su última entrega que el economista empató en el tercer lugar con Evelyn Matthei, ambos con un 10%, siendo superados por el representante del Partido Republicano, José Antonio Kast (24%) y por Jeannette Jara (16%). Kaiser está más abajo, con un 4%.
Si bien otras encuestas recientes muestran a Parisi en cuarto lugar y un poco más lejos de Matthei, lo indicado por Cadem es relevante si se considera que en la anterior elección presidencial Parisi justamente alcanzó el tercer lugar en la primera vuelta, cuando ninguna medición lo había pronosticado, y dejó en el cuarto puesto al abanderado de Chile Vamos, Sebastián Sichel.
En 2021 obtuvo el 13% de los sufragios, superado por el 26% de Gabriel Boric y el 28% de José Antonio Kast, todo a punta de una campaña realizada por internet, ya que se encontraba viviendo en Estados Unidos debido a una orden de arraigo que pesaba en su contra en Chile, esto por el no pago de más $207 millones de pesos en la pensión de alimentos de sus hijos.
Hoy el fundador del PDG está viviendo en Chile, no tiene problemas judiciales con sus hijos, se encuentra dando entrevistas por doquier y todavía está fuertemente activo en redes sociales.
Trata a sus contendores, al presidente Boric y a casi todos los representantes políticos de flojos, cobardes, cuicos, apitutados, etc., además asegura que no es de izquierda ni de derecha.
Trata a sus contendores, al presidente Boric y a casi todos los representantes políticos de flojos, cobardes, cuicos, apitutados, etc., además asegura que no es de izquierda ni de derecha.
Lo anterior es justamente lo que lo ubica –aunque no le guste–, en el carril de la derecha en esta aventura presidencial, ya que su estilo ofensivo y anti élites en el discurso –si bien lo adoptó desde su primera candidatura en 2013–, hoy es un activo que comparte con ganadores del sector en el mundo, como el mandatario de Estados Unidos, Donald Trump, y su par argentino, Javier Milei.
Y esta forma es la que lo ayudó a dejar atrás al primero: Johannes Kaiser.
El actual diputado irrumpió en la política en 2017 a través de su canal de Youtube ‘El nacional libertario’, donde con un sombrero similar al de un vaquero se posicionó gracias a frases extremadamente violentas para la convivencia respetuosa.
“Lo que pasa es que también tienes ahí una especie de esquizofrenia. Las mujeres dejan de ir al parque a trotar porque tienen miedo a inmigrantes que las pueden violar, pero siguen votando por los mismos partidos que están trayendo a esa gente y tú realmente te preguntas si el derecho a voto (a las mujeres) fue una buena idea”, dijo, por citar un sólo ejemplo, en 2021.
Kaiser, más allá del juicio moral a sus distintas frases, era el rebelde, el outsider de la derecha, el que ‘dice las cosas que nadie se atreve a decir’. Entonces fue subiendo como la espuma y a principios de este año incluso se posicionaba como el con más proyección de la derecha en las encuestas.
Pero la posición de candidato presidencial al parecer lo asustó. Ya no es un canal de YouTube el escenario. Entonces guardó el gorro de vaquero, se puso terno, habla como un académico pese a no tener profesión y sus frases ya no ofenden –salvo sus justificaciones al golpe de Estado de 1973, algo poco original considerando que Kast y Matthei también lo afirman–.
Parisi se da cuenta que aún se puede crecer en política ofendiendo a los demás. Pero a diferencia de Kaiser, entendió que hay que insultar hacia arriba, no hacia abajo.
Parisi se da cuenta que aún se puede crecer en política ofendiendo a los demás. Pero a diferencia de Kaiser, entendió que hay que insultar hacia arriba, no hacia abajo.
Así como está el panorama, mezclando encuestas y hechos políticos, el líder del PDG podría superar a Evelyn Matthei fácilmente si es que esta última sigue tal como está. Es decir, errática y desanimada.
Otro elemento que ubica a Parisi en el carril de la derecha son las prioridades de su programa.
Si bien tiene propuestas contrarias a la que identifica a la derecha actual –por ejemplo, legalizar la marihuana, crear una subsecretaría para gamers o crear un coliseo para conciertos en Concepción–, su discurso se ha centrado en achicar el Estado a través de la fusión de ministerios y la rebaja de sueldos en cargos públicos, además del combate al ‘narcoterrorismo’ a través de operaciones comando.
Pero esta diversidad programática también es su debilidad. Lo posiciona como indeciso, que no sabe por cuál bando ir más que no ser de izquierda o de derecha. Su postura depende de quién lo entrevista. Cambia de colores según la ocasión, tal como señala el hit ‘El Camaleón’ popularizado por King África, artista que justamente cantó en la campaña presidencial de Parisi en 2013.
Otro problema para ir sobre Kast es que el ex diputado tiene una orgánica robusta detrás: el Partido Republicano, el cual tiene 11 diputados y 8 alcaldes a nivel nacional.
Otro problema para ir sobre Kast es que el ex diputado tiene una orgánica robusta detrás: el Partido Republicano, el cual tiene 11 diputados y 8 alcaldes a nivel nacional. Mientras que el Partido de la Gente no tienen jefes municipales ni congresistas, puesto que los seis que tenían todos salieron de la colectividad
Sobre esto último, Parisi ha dicho en sus últimas entrevistas que les pidió la renuncia porque no se querían bajar el sueldo.
Por otro lado, el candidato del PDG, si bien ya no tiene problemas por la pensión de alimentos de sus hijos, puede que deba cargar con el estigma de esta polémica. Asimismo, por las denuncias de acoso sexual en su contra Texas Tech University, por las que fue sobreseído.
¿Qué pasaría si repite el tercer lugar en la primera vuelta? En 2021, entregó su apoyo a José Antonio Kast, luego que su colectividad se inclinara por dicho personaje para el balotaje.
El futuro de Parisi es prometedor pero incierto. Sabemos que no es de izquierda ni de derecha, pero que coincide con ambas en varios temas. Sabemos que hará esta campaña en Chile y que seguirá insultando a la élite. También sabemos que es Virgo, pero habría que conocer su ascendente para una lectura más precisa.
Comentarios
Añadir nuevo comentario