Desde sus inicios este proceso en contra del alcalde recoletano tiene absolutos sesgos políticos. Aquí lo que se trata de acallar es una voz disidente de este modelo perverso en el cual estamos inmersos. Naturalmente que en este saco podemos colocar a todos los poderes que desde siempre han querido mantener sus privilegios por sobre el bien de las grandes mayorías de este país, incluyendo por cierto a los nuevos convertidos seudo progresistas qué obviamente se habituaron a arañar algo de privilegios que los grandes poderosos le hacen entrega como una dadiva por sus servicios. Daniel Jadue es una piedra en el zapato tanto para los poderes facticos como es dado en llamarse así como también para estos nuevos ex progresistas convertidos al nuevo credo neoliberal ya que sus argumentos son irrebatibles a la hora de analizar la contingencia social, política y económica que se lleva a cabo y donde todas o la gran mayoría de las reformas planteadas en el programa de Boric están guardadas en el baúl de la desesperanza. Daniel además ha demostrado empiricament en su gestión a través de sus tres periodos como alcalde, que es absolutamente posible gestionar y efectuar cambios y mejoras en el diario vivir de la ciudadanía atacando las bases mismas de este modelo perverso en donde el dinero es el que determina los accesos más básicos de las personas (salud, vivienda, educación, etc.) para un vivir más humano y solidario