Pese a la mayor crisis política en décadas, el mandatario no ha cambiado a nadie de su gabinete, mientras que la ciudadanía se prepara para la que podría ser la mayor manifestación en años hoy viernes.
Pese a la mayor crisis política en décadas, el mandatario no ha cambiado a nadie de su gabinete, mientras que la ciudadanía se prepara para la que podría ser la mayor manifestación en años hoy viernes.
En la sesión en sala de este martes 22 de octubre los diputados votaron un proyecto de acuerdo, presentado hace meses, para que el presidente Piñera se pronuncie contra la vulneración de derechos humanos ocurridas en China, en medio de acusaciones de tortura, fallecidos y más de 500 heridos en Chile durante el estado de excepción.
También el mundo político pasó por alto sus anuncios y se enfrascó en peleas ideológicas. Recién el miércoles 23 de octubre comenzaron a surgir en la oposición voces criticando la fuerte represión, las que se asemejan en víctimas y duración a las más crudas protestas de 1983. Los gestos de unidad ‘institucional’ de los días anteriores quedaron atrás.
La madrugada del miércoles se difundió un supuesto caso de tortura al interior de la Estación de Metro Baquedano, donde opera la 60° Comisaría de Carabineros. Durante el día, distintos medios dieron a entender que la denuncia sería falsa. INTERFERENCIA conversó con el juez Daniel Urrutia -a cargo de levantar la evidencia del procedimiento investigativo inicial-, quien entregó antecedentes que permiten pensar que dentro de la estación de Metro sí pudo haber tortura.
Conspiraciones de grupos organizados para vandalizar el país con apoyo venezolano, comunas de alcaldes de izquierda protegidas de saqueos y la sospechosa filtración del audio de Cecilia Morel que reforzó la tesis belicista del gobierno. Aquí los datos y circunstancias de estas posibles campañas orquestadas de intoxicación informativa contra la movilización, tal como ocurrió durante la elección presidencial de 2017 en la que se impuso el concepto Chilezuela.
Los feriantes que van a comprar al principal mayorista de frutas y verduras del país no pueden circular libremente por la ciudad durante el toque de queda. Es decir, deben comprar cuando en teoría ya deberían estar instalándose en la feria. Además, según información obtenida por INTERFERENCIA, ninguna autoridad gubernamental ha llamado a los ejecutivos del terminal para obtener información del abastecimiento, a pesar de que públicamente acusaron la intención de "causarle un grave daño a la cadena alimenticia".
Desde que el jefe de gobierno declaró “estamos en guerra”, 19 personas han perdido su vida y cinco de estas a manos de agentes del Estado. El Instituto Nacional de Derechos Humanos y la Fiscalía están investigando estos casos.
La serie de subsidios que anunció el Presidente anoche, que no tocan en nada el modelo económico chileno que perpetúa la desigualdad, no generó entusiasmo en la clase media. ¿Le servirá a Piñera para apaciguar los ánimos?
Desde el estallido social ocurrido el viernes 18, la estrategia política de endurecer la represión a los manifestantes e ir cediendo por goteo a las demandas ha tenido su correlato comunicacional en la figura del mandatario, que con sus matices, no flexibiliza su postura y se mantiene reacio a aceptar preguntas de los periodistas en las vocerías.
Tras una jornada de marchas masivas en muchas ciudades del país, en las que la principal demanda era la renuncia del Presidente, el mandatario anunció diálogos de unidad con su oposición en el Congreso. Pero su gabinete sigue intacto. Es probable que ello deje completamente indiferente a los ciudadanos que se han manifestado.
En la cuarta jornada de protestas, uno de los blancos principales de la ciudadanía indignada fueron los cuatro canales principales de televisión abierta: Mega, CHV, Canal 13 y TVN, acusados de tergiversar las movilizaciones. Manifestantes cargaron contra sus sedes en Santiago y militares tuvieron que resguardar sus instalaciones. Recién a partir de la tarde del lunes, los canales empezaron a dar más cobertura a las crudas escenas de violencia militar y policial.
Durante la segunda noche de toque de queda en distintas ciudades de Chile, el mandatario radicalizó su discurso y aseguro que “estamos en guerra contra un enemigo poderoso, implacable, que no respeta a nada ni a nadie”. En paralelo, el control militar ya ha dejado al menos un muerto, además de múltiples heridos, incluidos niños.
La ola de protestas que mantiene a casi la totalidad del país en Estado de Emergencia no ha pasado desapercibida para los chilenos que se encuentran fuera del territorio nacional. En varias ciudades del mundo se realizaron manifestaciones en solidaridad con el movimiento ciudadano.
En la comuna de la alcaldesa Cathy Barriga se vivió una jornada de protestas, la cual estuvo marcada por la fuerte represión. Los vecinos reclaman que no se les permite siquiera congregarse. “Mis papás están asustados, pero nosotros no tenemos ningún miedo, no estamos hueviando, ya nos aburrimos de este país que abusa de la gente como nosotros”, dijo un maipucino a INTERFERENCIA.
Hace poco el Presidente aseguraba que Chile era "un oasis" en América Latina. Claramente, el mandatario y sus asesores no palpan en el país que viven.
En medio de la crisis por el estallido social, el presidente Sebastián Piñera ha invocado en varias ocasiones a la unidad de la clase política. Lo hizo convocando a los jefes del Senado y la Cámara, para dar gala republicana a la medida de congelar el alza del pasaje del Metro; una medida que ya se había tomado, que llegó tarde y que es insuficiente. Y lo hizo después de anunciar su guerra contra el vandalismo, en la que aseguró que no hay espacio para la disidencia.
El primer toque de queda por motivos políticos desde el fin de la dictadura fue un intento del presidente Sebastián Piñera por controlar el descontento social, pero no ocurrió esto. Las personas salieron a manifestarse de igual forma, y al menos no les ganó el miedo. En Santiago incluso Carabineros se vio atemorizado en sus propias comisarías por la presión social.
El viernes 18 de octubre reinó el caos en Santiago, después de días de indolentes declaraciones de las autoridades de La Moneda. El gobierno perdió el control tras decidir resolver la crisis a través de una fuerte represión por parte de Carabineros. El ejecutivo aumentó su apuesta represiva al decretar la Ley de Seguridad del Estado por parte de Andrés Chadwick, y luego, al invocar el Estado de Emergencia, por parte de Sebastián Piñera.
Desde principios de los 80 que la capital no vivía jornadas de protesta de una intensidad como la vivida el 18 de octubre de 2019. Un recuerdo histórico que reverbera en la memoria: Diez protestas entre 1983 y 1984 que hicieron tambalear al general Augusto Pinochet.
Claudio Valenzuela Chadwick era gerente interino de desarrollo competitivo de la Corfo, cargo por el que se llamó a un concurso que se declaró desierto, en el que participó el funcionario sin ser electo. Permaneció como subrogante y, cinco meses después, se abrió otro proceso para el mismo puesto, renombrado como gerencia de redes y competitividad. Valenzuela postuló de nuevo, y Sebastián Sichel lo eligió.
Hace 50 años se produjo la primera asonada militar que -en parte- anticipó lo que iba a venir. El intento del golpe de Estado tomó por sorpresa al gobierno de Eduardo Frei-Montalva. Pero, ¿cuáles fueron los antecedentes de este movimiento militar? En esta serie de varios capítulos, INTERFERENCIA reconstruye la historia.